Antonio Sanz se mantendrá en la, hasta ahora, Consejería de Salud de la Junta de Andalucía de manera permanente lo que resta de la legislatura. El anuncio lo ha hecho este miércoles el presidente autonómico,
Juan Manuel Moreno Bonilla, quien ha resaltado que la "salud es una
prioridad absoluta"
de su gobierno, tras la crisis por la polémica de los cribados de cáncer de mama en el Servicio Andaluz de Salud (SAS) que llevó, incluso, a la
dimisión de Rocío Hernández a dicho ramo.
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Antonio Sanz será desde hoy
consejero de Sanidad, Presidencia y Emergencias de Andalucía", ha informado a través de su cuenta de X (antes, Twitter), en donde ha destacado que "su
experiencia de gestión, capacidad de trabajo y diálogo", serán "fundamentales" en este periodo.
Sanz asumía la
Consejería de Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, hasta el último jueves cuando, a través de un decreto en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, se anunció que estaría también al frente de Salud de manera interina. Esta decisión, sin embargo, ha cambiado, y se hará cargo del sector
de forma permanente, sin dejar Presidencia y, además, Emergencias.
Cambios en las competencias de las consejerías
Estos no son los únicos cambios anunciados por Moreno Bonilla, quien ha avanzado también que Carolina España, portavoz del Gobierno y consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, "
asumirá las competencias en
Diálogo Social y Simplificación Administrativa", dos de las áreas de las que estaba encargado Sanz.
Por su parte, Jorge Paradela, consejero de Industria, Energía y Minas de la Junta, añade a sus funciones las
competencias en digitalización, "incorporando a su área la Agencia Digital de Andalucía (ADA)".
Crisis por los cribados de cáncer de mama
La decisión de mantener a Antonio Sanz al frente de Sanidad, se produce precisamente a una semana de la dimisión de Rocío Hernández a la Consejería de Salud y Consumo. El estallido en el Gobierno andaluz se produjo a consecuencia de
fallos en el proceso que se sigue en los
cribados de cáncer de mama, afectando a por los menos
2.000 mujeres, según las cifras oficiales.
Como respuesta, la Junta ha anunciado un
plan de choque con una dotación presupuestaria extraordinaria de
casi 12 millones de euros para el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama, así como
dos meses de plazo para realizar una segunda prueba a todas las pacientes pendientes de seguimiento.