Un modelo Muface pone fecha a su receta concertada para 500.000 mutualistas

El calendario ya está fijado. La fecha marcada. Y la celebración casi preparada. La receta electrónica concertada del mutualismo administrativo allana su camino. La reactivación de este sistema, bautizado como Sirem en Muface, sienta un precedente en materia de digitalización. El aterrizaje de esta herramienta es un hito para la sanidad concertada del mutualismo, que en los últimos meses ha pasado por la que probablemente haya sido la mayor crisis de su historia. Esta nueva etapa de calma tras la tempestad, llega con la receta electrónica concertada como uno de los retos tanto para Muface como para sus ‘hermanos’. Y es que la mutualidad militar, Isfas, ya pone fecha para su implantación de cara a su pleno uso para más de 500.000 mutualistas.

La crisis sin precedentes de Muface llegó a sus ‘hermanos’. Mugeju, la mutualidad encargada de dotar de asistencia sanitaria a jueces, fiscales y al resto del personal de la Administración de Justicia, e Isfas, que hace lo propio con las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil, se convirtieron en los ‘daños colaterales’ del trance histórico que hizo tambalear los cimientos de la sanidad concertada del mutualismo administrativo.

El ‘hermano’ judicial fue quien más sufrió estas consecuencias. En apenas una semana perdió a la mitad de sus aseguradoras para su concierto sanitario. Sanitas, DKV y Mapfre se desvincularon de Mugeju; mientras que Asisa, Adeslas y Nueva Mutua Sanitaria se convirtieron en las encargadas de dotar de cobertura asistencial a los adscritos a Mugeju.

El caso de Isfas fue distinto. El modelo militar tan solo se sumió en la incertidumbre. Las dos entidades que hasta ese momento se encargaban de la asistencia sanitaria de los mutualistas, Asisa y Adeslas, decidieron continuar en la mutualidad. Y, con ello, los ‘hermanos’ de Muface suscribieron sus contratos hasta finales de 2026.

La receta concertada de este ‘hermano’ de Muface

Ese es el escenario previo a esa calma tras la crisis. Isfas y Mugeju firmaron sus conciertos tras un recurso administrativo que no hizo más que dilatar el proceso. Muface hizo lo propio a finales de abril, en una convocatoria que escenificó el ‘sí, quiero’ entre las aseguradoras y la dirección general del modelo. Y, tras este momento, los proyectos volvieron a ser una realidad, como la activación de la receta electrónica concertada.

Esta herramienta está cerca de convertirse una realidad en Muface. Tan solo le quedan cuatro comunidades ‘en lista de espera’: Andalucía, Castilla y León, Cataluña y Comunidad Valenciana. Sin embargo, uno de sus hermanos ya acelera la implantación de este sistema. Isfas, el modelo que dota de asistencia a más de 500.000 mutualistas (y beneficiarios) pretende que la receta electrónica concertada esté disponible en todo el país “antes del verano”.

Así ha salido a relucir en una de las últimas reuniones de Isfas, en la que se citó a distintos representantes en un Consejo Militar. En esta ‘cumbre’, como han adelantado fuentes presentes en la cita a Redacción Médica, la receta electrónica concertada se convirtió en uno de los asuntos principales.

“Antes del verano se pretende llegar a todo el territorio nacional, estando ya implantada en 6 comunidades autónomas”, confían las voces presentes en esta reunión. Asimismo, y en relación a los visados eléctricos de las recetas, “se tiene previsto que entre Semana Santa y vacaciones estivales pueda quedar ya implando el sistema, lo que agilizará los más de 12 millones de recetas que anualmente gestiona Isfas”.

Esa fue una de las ideas que se vertieron en la cita.  Y es que cabe destacar que la receta electrónica concertada de Muface dio sus primeros pasos en 2020, con el aterrizaje de Sirem en Cantabria. La comunidad se convirtió en pionera en esta herramienta que permite retirar medicamentos sin necesidad de presentar talonario en papel. Tras ella llegaron Asturias y Canarias en 2022; Extremadura y La Rioja en 2023; Navarra, Murcia, Illes Balears, Ceuta y Melilla en 2024.

Ya en 2025, una vez finalizada la crisis, la receta electrónica concertada llegó a Castilla-La Mancha y Galicia (en julio); a Aragón (en septiembre); y a Madrid y País Vasco (en noviembre).
El caso de Mugeju es completamente distinto. La mutualidad judicial desconoce qué es esta herramienta digital. Tan solo está disponible en el modelo de sanidad pública, mientras que en el de la sanidad concertada aún le quedan varios pasos por dar.

Sin ir más lejos, hace unos días Redacción Médica informó sobre el hecho de que esta herramienta no será una realidad durante el concierto actual, el de 2025 y 2026. Durante el año que entra la mutualidad se encargará de estudiar la posibilidad de convocar un proceso licitador para implantar la receta electrónica concertada para los cerca de 90.000 mutualistas de Mugeju. No obstante, y como ya adelantó este periódico, el aterrizaje no está previsto “hasta 2027 o 2028”.

La receta electrónica concertada ya es una meta en Isfas. Los meses previos al verano de 2026 serán claves para la implantación de esta herramienta. Una fecha que ya está marcada en el calendario de los cerca de 500.000 adscritos al ‘hermano’ militar de Muface, que podrán hacer uso de este hito en digitalización sanitaria.