Mónica García, anestesista y candidata por Más País al Congreso, detalla a Redacción Médica sus propuestas electorales

"En España la corrupción sanitaria no se menciona, pero está"
Mónica García, candidata de Más País al Congreso de los Diputados.


7 nov. 2019 9:20H
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Mónica García, anestesista y candidata por Más País al Congreso de los Diputados el próximo 10N, desgrana en una entrevista concedida a Redacción Médica las líneas básicas del partido en materia sanitaria. Sus dos medidas estrella, la eliminación de las guardias médicas de 24 horas y la reducción de la jornada a 32 necesitarían una modificación del Estatuto Marco y de la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias, tal y como la propia médica detalla.

En su opinión, desde el Ministerio de Sanidad "se pueden hacer políticas útiles para todo el Estado español" pero, para que el Sistema Nacional de Salud tenga un lugar preferente, "hay que darle estabilidad". Pese a la escasa representatividad que les ha otorgado el macrobarómetro del CIS, García confía en la remontada.

El Ministerio de Sanidad se convirtió en moneda de cambio en las negociaciones entre PSOE y Podemos en las pasadas elecciones. Como profesional sanitaria, ¿cómo lo vivió?

Con un poquito de frustración. Primero por presentar al Ministerio de Sanidad como algo que no sirve para nada, nosotros sí creemos que desde el Ministerio de Sanidad se pueden hacer políticas que sean útiles para la sanidad en el conjunto del Estado español. Segundo, porque ese bloqueo en la construcción de un gobierno progresista frustró muchas de las esperanzas que tenemos los votantes. Fue una irresponsabilidad por parte de las dos formaciones políticas que no lo consiguieron, ese bloqueo que estamos padeciendo es la razón por la cual nos vamos a presentar nosotros desde Más País a las nuevas elecciones.

Teniendo en cuenta los programas sanitarios del resto de formaciones que ya se han conocido, ¿con quién ve más factible llegar a acuerdos en materia sanitaria?

Yo creo que, en materia sanitaria, más que un pacto global con el resto de fuerzas políticas, hay temas más 'micro' en los que se puede llegar a acuerdos con más de una fuerza política. Hay una parte de la ideología, clara respecto a la derecha y la izquierda, que tiene que ver con la protección de los servicios públicos, la sociedad que queremos y el modelo de servicio sanitario dentro de ella.

García defiende que hay que regularizar la situación de los interinos.

Hay una ideología que considera que tienen que ser una parte nuclear los servicios sanitarios, la
protección de la salud o de la sociedad.

Es parte de nuestro Estado de Bienestar y lleva muchos años siendo descapitalizada y recortada.

Tenemos, por un lado, a los que consideran que ese Estado de Bienestar no es necesario y, por otro, fuerzas políticas con las que coincidimos en que no solo se tiene que mantener sino que se tiene que recuperar y fortalecer porque es parte del desarrollo de nuestra propia sociedad.

¿Podría poner nombre o siglas a los que están en un lado y al otro?

Yo creo que el espectro más de la izquierda pueden estar Podemos y el PSOE. En los partidos más regionalistas hay de todo, pero creo que hay una parte de la sanidad que es suficientemente transversal como para que podamos estar de acuerdo en pequeños detalles.

Las estimaciones del CIS solo dieron dos escaños a Más País, ¿cómo se ha valorado dentro del partido?


"Nosotros nos hemos presentado por la irresponsabilidad de dos partidos, como una alternativa al bloqueo"


Nosotros nos hemos presentado por la irresponsabilidad de dos partidos, como una alternativa al bloqueo y a esa sensación que hay ahora mismo de desafecto con la política.

No acabo de entender muy bien por qué hay políticos que están empeñados en desacreditar la propia política para que haya desafección, incluso hemos visto que han hecho una especie de fake news al más puro estilo de Trump o Bolsonaro suplantando la personalidad de Íñigo Errejón e invitando a la gente a que se abstenga.

Nosotros venimos a defender la política de los acuerdos y ese es el espacio que queremos ocupar. Obviamente, acabamos de nacer, el clima político está ahora mismo bastante enrarecido pero somos optimistas, somos muy de remontar en el último momento. 

Dentro de su estrategia de salud rural, contemplan incentivos para las plazas de difícil cobertura y el desarrollo de nuevos roles profesionales. ¿De qué incentivos se trata y cuáles son los nuevos roles a los que hacen referencia?

Tenemos que darle una vuelta a todos los nuevos roles dentro de las capacidades de las profesiones sanitarias. Los incentivos son básicos, algunos tienen que ver con el salario y también hay incentivos que tienen que ver, por ejemplo, con que si tú has trabajado en una plaza de difícil cobertura, eso te cuente más en una OPE. Muchas de ellas no están cubiertas, no solo porque son de difícil cobertura sino porque tenemos un déficit de profesionales. Primero tendremos que hacer una planificación de cuántos profesionales necesitamos y de cuáles son aquellas plazas que nos van a ser más difícilmente asequibles.

Después tendremos que ver cómo se incentiva a la gente para que no solamente trabaje en zonas urbanas sino que trabajen también en zonas rurales. Yo estoy segura de que hay muchos profesionales a quienes no les importaría o que incluso preferirían estar trabajando en zonas rurales. Pero si les das unas condiciones de trabajo malas, inestabilidad, eventualidad o incluso precariedad, obviamente nadie se quiere ir a cubrir esas zonas. 

Una de sus medidas estrella en sanidad de su programa, la eliminación de las guardias médicas de 24 horas, contempla la revisión del Estatuto Marco del personal estatutario. ¿Han calculado el impacto económico que tendría o cuántos puestos crearía la medida? ¿Cómo se compensaría la pérdida retributiva para los profesionales? 

Es una medida que tiene que ser a medio-largo plazo. Ahora mismo tenemos un déficit estructural de profesionales y creemos que para implantar medidas que tengan que ver con el cambio del Estatuto Marco, hay que hacer una planificación. 

La candidata de Más País explica cómo se pretende acabar con las guardias de 24 horas.

El Estatuto Marco, que es del año 2003, hay que revisarlo de la misma manera que se revisan todos los protocolos clínicos o médicos. Hay una serie de leyes, como la Ley General de Sanidad del 86, que se han mantenido inamovibles. Obviamente hemos evolucionado, tanto como sociedad como sistema sanitario.

Las guardias médicas de 24 horas -que son estructurales de los médicos pero también las realizan otros servicios como el SUMA-, son unas de esas medidas ancestrales en las que tenemos que trabajar para eliminarla. Aquí entra otro debate que son las condiciones laborales. No podemos cambiar el modelo de guardias -cuando casi la mitad del salario a percibir tiene que ver con éstas- si no cambias el modelo retributivo y cuáles son los roles que tiene cada profesional; hay modelos en Europa que son bastante imitables.

¿Se ampliaría también a otros colectivos como Enfermería?

Lo que decimos en el programa es que tenemos que dar una vuelta al Estatuto Marco y a la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias. Obviamente, el sistema sanitario tiene que cubrir 24 horas, tiene que haber turnos de noche, turnos de tarde... Todo eso tiene que estar ensamblado de tal manera que también se tengan en cuenta temas como la conciliación. Pero no dejamos de ser un servicio que estamos 24 horas, siete días, 365 días al año, porque ese es el alma de un servicio sanitario.

Busquemos las maneras, innovemos para que todos los profesionales tengamos un encaje en el que las condiciones de trabajo y las retribuciones sean óptimas y en el que no vivamos en una permanente eventualidad sin incentivos.

Estamos dejando caer el sistema sanitario a través de una desmotivación de los propios profesionales y tenemos que combatirla porque realmente tenemos maravillosos profesionales con una vocación inmensa, vocación de servicio público y vocación de querer hacer su trabajo bien. La Administración o los gobiernos están haciendo de freno de esa vocación.

Apuntaba a modelos europeos en los que fijarse para el tema de las guardias, ¿tiene en mente algún país en concreto?

No tenemos un estudio elaborado sobre el resto de los países pero sé que, por ejemplo en Inglaterra, los contratos son de equis horas por equis retribución. Aquí en España no tenemos nada de eso, ni siquiera tenemos una carrera profesional que valore realmente la profesionalidad, sino que básicamente es una carrera profesional de supervivencia, cuanto más años llevas en el sistema, más niveles de carrera profesional tienes. 

La Administración está desaprovechando herramientas para que los profesionales trabajen el tiempo que tienen que trabajar, un tiempo regulado que incluye también las noches y las tardes. No tiene sentido que si tú tienes una guardia a la semana, estés haciendo casi 60 horas a la semana y solo te contabilicen  35 o 37 horas y media;  no tiene ningún sentido.

Regularicemos y adaptémoslo con parámetros de cualquier país europeo o nuestros propios. No hace falta copiar sino que podemos innovar.

Prometen crear una empresa farmacéutica pública. ¿Tendrían un carácter permanente o excepcional?  Ya hay estructuras que pueden asumir esas funciones, como el Centro de Farmacia que el Ministerio de Defensa tiene en Colmenar Viejo. ¿Qué papel tendrían estos centros?


"Estamos dejando caer el sistema sanitario a través de una desmotivación de los propios profesionales"


Lo que hay ahora mismo es muy residual y parte de esta iniciativa tiene que ver con aprovechar todos los recursos que tenemos. Lo hemos llamado empresa pública porque puede ser el lugar desde donde centralizar esa iniciativa, pero tiene que ver con colaborar con universidades, incluso con farmacéuticas, y con todos los organismos y todo el talento que ahora mismo tenemos trabajando para fuera.

Que seamos capaces de hacer proceso de desarrollo, de innovación, de investigación, de comercialización, de fármacos. La mayoría surgen de una investigación básica que tiene que ver con una inversión pública y que luego no somos capaces de que tenga un retorno.

¿Han tenido algún contacto con la industria farmacéutica?

No, no hemos tenido ningún contacto, lo cual no significa que no podamos tenerlo.  Es una cosa que no viene a instalarse contra nadie, sino que viene a crear otro tipo de modelo de desarrollo de la investigación y la innovación en el tema farmacéutico. Otro modelo que puede convivir perfectamente y que no viene a instalarse contra nadie, sino que viene a cubrir una serie de necesidades que nos vamos a encontrar en un futuro como el tema de la escala de precios, la desinversión en aquellas moléculas que no tienen un alto rendimiento pero que sí que tienen un valor terapéutico y se están dejando de fabricar; o el desabastecimiento.

Tiene que ver con que podemos hacerlo, con que tenemos la capacidad, tenemos un sistema sanitario lo suficientemente fuerte, con el suficiente talento como para plantearnos hacer este desarrollo.

Quieren crear una Dirección General de Cuidados con una enfermera o enfermero director al frente. Dado el sistema de transferencias, ¿dictarían una norma básica estatal para obligar a su cumplimiento?

Lo que queremos con esta medida es dar visibilidad a una parte que tiene que ver con los cuidados que, fundamentalmente, recaen en la parte de la Enfermería. A través de esa dirección general se podrán hacer normativas o desarrollos. La mayoría de la sanidad está transferida, pero hay que dar una vuelta a la regulación y a cómo podemos cambiar la lógica de trabajo que tenemos ahora, muy sectorizada no sólo en las diferentes profesiones, sino las diferentes especialidades.

Tiene que haber un modelo más multiprofesional en el cual la Enfermería tenga un papel importante que no ha tenido hasta ahora. Hay que innovar, pensar, hacer proyectos piloto y ver cómo podemos meter los cuidados dentro de lo que es el armazón de nuestro sistema sanitario. Para eso necesitamos que la enfermería tenga un papel más relevante.

Mónica García cree imprescindible blindar la Atención Primaria y la Salud Pública.


Hablan de aumentar el gasto sanitario con variables como el PIB  e invertir más en Atención Primaria y Salud Pública. De qué porcentajes estamos hablando (en Madrid se hablaba de un 20 por ciento para Primaria), y de dónde recortaría ese dinero extra destinado a la sanidad.

Queremos blindar la Atención Primaria y la Salud Pública. Si lo dejamos al albur de las decisiones políticas de las comunidades, al final es la (especialidad) que más sufre, por ser la menos vistosa y la menos electoralista. Nosotros, en nuestro programa regional, hablábamos de un 20 por ciento. Ahora mismo, en Atención Primaria, la media de España está en un 14 por ciento pero hay comunidades, como puede ser la comunidad de Madrid, que está en un 10 ciento. No queríamos poner un porcentaje, nos valdría con que pudiéramos empezar con un 15 por ciento y que tuviéramos un horizonte de llegar hasta un 20 por ciento.


"Para que el SNS tenga un lugar preferente, hay que darle estabilidad"


En cuanto a 'recortar', tenemos una gran cantidad de bolsas de ineficiencia en nuestro sistema sanitario que no harían necesario tener que recortar de nada. Por ejemplo, la Comisión Europea habla de que los sistemas sanitarios en Europa gastan entre un 15 y un 20 por ciento en malas prácticas, en corrupción. Es un diagnóstico europeo de muchos países, en España la corrupción en sanidad no se menciona, pero está.

Necesitamos urgentemente una lealtad de nuestros gobiernos con el sistema sanitario, que estudie, que diagnostique, que vea dónde está la corrupción, dónde están las malas prácticas, dónde está la mala contratación. Sabemos que todos los diques de contención a las malas prácticas de la compra pública nos los estamos saltando y en eso nos va despilfarro y nos va el ahorro que realmente deberíamos de estar invirtiendo en sanidad. Y luego, otra de las partes que llevamos también es el tema de la privatización. Hay zonas de privatización donde estamos despilfarrando dinero. Por supuesto que necesitamos más porcentaje del PIB. Estamos en un 5,9 por ciento y en Europa se está en torno a un 7 por ciento. Además de invertir más, tenemos una necesidad acuciante de invertir mejor y que cada euro que va a la sanidad, sea un euro que va destinado a la salud y que no va a negocios periféricos.

¿Quién formaría parte de la Oficina de Anticorrupción sanitaria que proponen?

La idea de crear esta oficina es para sacar a la luz el tema de la corrupción. Es un tema que está estudiado en Europa, hay un congreso ahora en noviembre sobre corrupción en sistemas sanitarios al que vamos a acudir desde Más País y aquí en España no se habla.

Tiene que estar formado por gente independiente e implicada. Tiene que haber mecanismos y cauces de comunicación en los cuales se puedan hacer denuncias y debe haber una protección de los denunciantes. Tenemos que hacer un ensamblaje legal y estructural de filtro de todo este tipo de corrupciones.

¿Que tenemos corrupción en sanidad? Seguro. No va a ser España, con nuestros antecedentes, el único país de toda Europa que se libre de esta lacra. Corrupción es todo aquello que hace que un sistema sanitario se desvíe de sus propósitos originales. 

Afirman que ampliarán el umbral de la renta para quedar exentos del copago farmacéutico, ¿cuál sería ese nuevo umbral?


"Desde el Ministerio de Sanidad se pueden hacer políticas útiles en toda España"


Tenemos a un 4 por ciento de españoles que no pueden acceder a los medicamentos porque tienen una barrera económica. Nosotros querríamos quitar los copagos, consideramos que hay otras maneras de recaudar más justas, más redistributivas, con el concepto que tenemos sobre nuestra sanidad en el cual todos aportamos. Una vez que tienes esa caja, das más a los que más lo necesitan y das menos a los que menos necesitan. En ese modelo social de lo que tiene que ser un sistema sanitario, consideramos que en el momento en el que tú necesitas más, no tienes que volver a pagar.

Ahora bien, creemos que tiene que ser una cosa progresiva, empezando con aquellas capas que son más vulnerables y que realmente este copago les está haciendo de barrera económica al acceso a los medicamentos. Aquellas rentas por debajo de, por ejemplo, 18.000 euros -en la Comunidad de Madrid al final acordamos 12.000-, familias que tengan pacientes crónicos o familias que tienen hijos con necesidades especiales o con discapacidad a cargo.

Hay una red de familias a las que no estamos atendiendo y de alguna manera disimulada les estamos negando el acceso a la sanidad y al tratamiento. Por cierto, un tratamiento que ponemos los facultativos, es decir, que siempre se dice que hay un abuso de los pacientes. Hacer recaer la responsabilidad en los pacientes que se tienen que tratar, una responsabilidad que es, primero profesional, y luego política, me parece que es de alguna manera justificar lo injustificable.

Durante la entrevista, la candidata de Más País resaltó la necesidad de que la Enfermería tenga un papel más importante en el SNS.


Prometen impulsar los cambios legislativos necesarios para reducir de forma gradual y negociada la jornada laboral sin pérdida de salario a 32 horas semanales o 4 días por semana en el marco de la próxima década. ¿Qué normativas se modificarían? ¿A quién afectaría dentro de sanidad? Estatutarios, laborales, residentes, sanidad privada…

Estamos pensando en qué modelo de sociedad queremos dentro de 10 años y el sistema sanitario y nuestros profesionales están incluidos. Tenemos un modelo poco productivo para la cantidad de horas que estamos en los trabajos, mal distribuido, con gente que trabaja mucho y a la que no se le pagan las horas extras o gente que no tiene trabajo. Hace 40 años nadie se podía imaginar que ahora con más tecnología, más medios, más capacidad, más conocimientos y con más talento, no fuéramos capaces de distribuir el trabajo de una manera más racional.

Como muchas medidas, parte de qué es lo que queremos cambiar de aquí a 10 años o qué queremos que trabajen nuestros hijos, ¿queremos que trabajen como ahora de 9:00 a 21:00? ¿Queremos que haya trabajos que haya entre un 15 y un 20 por ciento de gente que no va a volver a trabajar nunca o queremos distribuir el trabajo o queremos distribuir también la riqueza de nuestro país? Eso es lo que tenemos que pensar, qué es lo que queremos dentro de 20 o 30 años.

Entiendo que habría que modificar distintas normativas, ¿no?

Sí, claro, habría que tocar básicamente todas las normativas que afectan a cuál es el modelo social que queremos implantar en un futuro.

Preguntados por esta cuestión, los médicos afirman que sería necesaria la contratación de 10.000 facultativos, ¿es acorde con sus cálculos?

Aquí tenemos que hacer una planificación con todos los elementos. No solamente con el elemento de "queremos reducir las horas, necesitamos 10.000 mañana". Tenemos que calcular cuáles son las jubilaciones, los roles que realmente queremos que ejerzan los médicos y las enfermeras, cuál es la distribución del trabajo que queremos que haya dentro del sistema sanitario. ¿10.000? Puede ser. Es que a lo mejor ya nos faltan 10.000 médicos.

Si dentro de 10 años se van a jubilar, aproximadamente, un 30 por ciento de los médicos y otro tanto por ciento también de las enfermeras, igual ya estamos empezando a tener un déficit de profesionales.

Es un problema lo suficientemente importante y a largo plazo como para que tengamos todas las piezas del puzle, no solamente las horas sino también los roles profesionales y cuál es el déficit que vamos a tener dentro de 10 años. Toda esta planificación de los profesionales no sale en una legislatura. Se tiene que empezar con la formación MIR, con un cambio de paradigma.

Comentaban también que al reducir la jornada ordinaria, podría aumentar la complementaria, con menores retribuciones, ¿se han planteado este escenario?, ¿cómo garantizarían que los salarios de los profesionales del SNS no se reducirían? 

Para eliminar las guardias, explica, es necesario recolocar el modelo retributivo.

Claro, eso si se mantiene el mismo modelo, que no tiene ningún sentido. No tiene ningún sentido que de las 24 horas que estás de guardia hay una parte, 17 horas, que se consideran como complementarias, ni siquiera extra. Es un modelo que sólo existe en el colectivo médico, que no cuenta como hora trabajada, que está pagada en cada comunidad de una manera y que hace que parte de tu salario dependa de ello.

Obviamente, no puedes quitar las guardias sin recolocar todo el modelo retributivo, no puede ser que ahora quites las guardias y digas: "ya no vas a cobrar el dinero que tienes pero tienes que hacer tardes, o tienes que hacer noches, ¡alguien tiene que hacer las noches!" Hay mucha más gente de acuerdo en que esto tiene que cambiar y lo único que tenemos que hacer es empezar a trabajar, ponernos de acuerdo en cómo lo vamos a hacer. Es un problema en el que estamos de acuerdo profesionales, seguramente sindicatos, patronales y muchos de los actores políticos y los actores sociales. Es un modelo que hemos interiorizado que es normal, pero es completamente irregular.

Hay un sindicato en concreto, Comisiones Obreras, que está planteando una reclasificación y recualificación para redefinir lo que comentaba de los roles y las retribuciones que le corresponden a cada categoría profesional. ¿Han tenido ocasión de hablar con ellos? ¿Verían conveniente hacer un cambio de modelo global como ellos apuntan?

La Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias tiene que adaptarse a las nuevas graduaciones y a los nuevos títulos académicos que hay, se han quedado desfasados.

Esa parte hay que ensamblarla. Sí hemos hablado con CCOO y está en el horizonte de mucha gente empezar a pensar cómo se puede ensamblar las profesiones sanitarias con la actualidad, con la evolución que han tenido los sistemas sanitarios y las propias profesiones, y cómo se le puede modernizar.

Quieren limitar la contratación temporal  a una duración mínima de 30 días (salvo excepciones recogidas en los convenios colectivos provinciales). ¿Sería la sanidad una de esas excepciones?

Está habiendo abusos en nuestro sistema sanitario, la temporalidad es una cosa que hasta los tribunales europeos nos han reclamado. No tiene ningún sentido tener la temporalidad y la eventualidad que tenemos en un sistema sanitario. Si quieres que nuestro sistema sanitario ocupe un lugar preferente dentro de nuestra sociedad le tienes que dar estabilidad, si no le das estabilidad es porque no confías en que los profesionales tengan que estar estables.

Nuestros residentes consideran normal firmar contratos cada mes, cada 15 días, que haya contrataciones en invierno que sean de 45 días pero que las encuentres el día anterior. Sabemos que en invierno vamos a necesitar más profesionales, que en verano vamos a necesitar menos en un sitio y más en otros, ¿no lo podemos planificar? ¿No somos capaces de dar estabilidad a un modelo y luego adaptarnos a las diferentes eventualidades? Una de las medidas que podría incentivar a nuestros profesionales, como es la estabilidad, la estamos utilizando para todo lo contrario, para que no sepan cuándo tienen que presentarse a una oposición.

O sea, no sería una de las excepciones de las que se habla en el programa

Es que por qué va a ser una excepción, por qué vas a tener que ir a ver a tu médico de Atención Primaria o tu neurólogo y a los dos meses vas a tener que ver otro. Los profesionales se tienen que enfrentar a un horizonte de inestabilidad después de haber hecho la carrera, la especialidad, de haber trabajado en distintos lugares. No tiene ningún sentido a no ser que quieras que eso sea una herramienta para desmantelar el sistema.

En Madrid se marcaban un objetivo del 10 por ciento de eventualidad, ¿lo extrapolan a nivel nacional?

El programa de Más País contempla un Pacto de Estado sobre los profesionales sanitarios.

Si tú eres capaz de poner a funcionar un mecanismo de estabilidad del empleo que sea anual o bianual, en cuatro años no tendrías una eventualidad mayor del 8 o el 10 por ciento, que es lo que se recomienda en función de las fluctuaciones que tienen los diferentes sistemas sanitarios.

¿Por qué no se pone a funcionar esa maquinaria? En nuestro programa también llevamos un pacto de Estado para esa estabilidad. ¿Estamos de acuerdo en que necesitamos estabilidad los profesionales sanitarios? ¡Sí! Pues pongamos una maquinaria a funcionar. Por ejemplo, que salga la convocatoria en los impares y te presentes en los pares. Es como el MIR, que hay todos los años y hay una maquinaria que se pone a funcionar.

Vivimos en la era del big data, sabemos qué es lo que va a pasar, o más o menos con unos márgenes que se pueden cubrir, con ese 8-10 por ciento de eventualidad, cuáles son las jubilaciones de las diferentes profesiones, pongamos una maquinaria a funcionar para que haya estabilidad.

 Afirman que ampliarán la responsabilidad a la empresa principal (privada o pública) contratista en los supuestos de vulneración de derechos fundamentales en el tema de la contratación. ¿Se plantean establecer sanciones contra las Administraciones sanitarias, por ejemplo, cuando no se convocan las OPE a tiempo?

Es bastante triste tener que regular para sancionar a aquellos que no cumplen la ley y que vivamos en un país en el que saltarse la ley es gratis, política y administrativamente. 

Se puede sancionar, ya hay mecanismos sancionadores que ni siquiera los propios gobiernos los están utilizando. Tenemos mecanismos de control que las propias administraciones se están saltando. Tenemos una intervención general que hace informes de cada hospital todos los años que son absolutamente demoledores con nuestro sistema sanitario. Y no ocurre nada.

Recientemente, la Abogada General del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) cerró la puerta a que los interinos de sanidad puedan pasar a fijos sin presentarse a una oposición. Cuando usted estaba en Podemos, se impulsó la 'Ley de concurso extraordinario de méritos', enfocada en esta posibilidad, que se rechazó en la Asamblea. ¿Cómo valora este dictamen de la abogada? ¿Promoverá ahora algo desde Más País en este mismo sentido?

El hecho de regularizar a los interinos a través de una convocatoria que sea la presentación, por ejemplo, de una memoria, es algo que ya se ha hecho. O sea, no es que nosotros pidiéramos una cosa completamente descabellada.

Hay una manera mejor de hacerlo, estoy de acuerdo, pero hay una parte por la que tenemos que que recoger los platos rotos de antes, qué hacemos con todos esos profesionales que llevan 15 años trabajando y no tienen estabilidad ni están reconocidos. ¿Cuál es el futuro que les vamos a dar?¿Ponemos la maquinaria de la estabilidad a funcionar? Si no lo ponemos a funcionar, siempre vamos a tener este problema y Europa nos va a decir que no se ha regularizado a los  profesionales, que están en fraude de ley. 

La solución rápida es la del concurso de méritos, con los años que lleves trabajados sin pasar por un tipo de oposición. Yo me presenté a una oposición que era un examen en el que desarrollar tres temas. Tengo compañeros que se han presentado a oposiciones que han sido tipo test y otros que han tenido que presentar méritos. No tenemos un modelo de OPE a la que nos vamos a presentar. A lo mejor también nos podemos poner de acuerdo a partir de ahora teniendo en cuenta que tenemos mucha gente en fraude de ley. Eso no lo podemos negar, a esa bolsa de gente hay que darle solución que sea justa con el tiempo que le han dedicado a nuestro sistema sanitario.

Mónica García se ve compaginando su labor política con la asistencial.


No les va a frenar el dictamen de la Abogada del TJUE...

Le tenemos que dar una vuelta a qué hacemos con esa bolsa de gente a la que no hemos regularizado en 15 años. Tampoco es justo no reconocerles que llevan trabajando tanto tiempo para nuestro sistema público. Habrá que buscar un equilibrio entre cómo se hace una OPE con un examen puro y duro, cómo se reconocen los tiempos trabajados y qué peso se le dá a todo eso. Y, a partir de ese momento, homogeneizarlo.

Vamos a terminar la entrevista como la empezamos, haciendo referencia a las estimaciones del CIS y sus esperanzas en que se van a aumentar esos dos escaños. ¿Cómo se ve en unos meses? ¿En el Congreso o en Madrid?

Yo siempre pongo el ejemplo de que en el año 2015 me presenté a las elecciones autonómicas de una manera casual, me dejé llevar por los acontecimientos y por la política, y ahora me pasa exactamente lo mismo. A mí me gusta la política regional, me gusta la política nacional y me gusta la política sanitaria, básicamente. Creo que tiene un papel fundamental en los parlamentos autonómicos que es donde está transferida, pero también tiene un papel al que se le puede sacar mucho provecho en la política estatal.

No está en mi mano decidirlo, pero me veo compaginando, si puedo, mi labor como política y mi labor como anestesista o como médico asistencial. Es fundamental tener una pata en el sitio donde se van a aplicar las políticas públicas que estás promulgando y saber realmente lo que está pasando en el terreno. Me veo con ganas de hacer cosas y con ganas de hacer buena política y de seguir trabajando para el sistema sanitario.
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