El Grupo Miranza advierte que el esfuerzo constante por enfocar de cerca puede inducir a una “falsa miopía”

El Grupo Miranza advierte que el esfuerzo constante por enfocar de cerca puede inducir a una “falsa miopía”
Un paciente en la visita a su oftalmólogo.


SE LEE EN 4 minutos
El uso intensivo de móviles, ordenadores y tabletas obliga a nuestros ojos a mantener un esfuerzo constante, lo que impide que descansen adecuadamente. El estilo de vida actual, marcado por el abuso de pantallas desde edades cada vez más tempranas, está generando un fenómeno denominado “espasmo acomodativo”, un trastorno visual que, si no se detecta y frena a tiempo, puede afectar seriamente la salud ocular de la población en los próximos años.


Qué es el espasmo acomodativo


El espasmo acomodativo aparece cuando el ojo es sometido a un exceso de acomodación al enfocar de cerca durante mucho tiempo sin descanso, provocando síntomas como visión borrosa, fatiga visual y dolores de cabeza. Aunque esta condición pueda parecer algo pasajera, Luis Valentín-Gamazo, oftalmólogo del grupo Miranza, advierte de que “este esfuerzo constante puede alterar la forma del ojo y favorecer el desarrollo de una miopía, probablemente debido a un estímulo aún desconocido”.

En un ojo miope, el globo ocular es más alargado de lo normal. Esto hace que la luz que entra se enfoque delante de la retina en lugar de directamente sobre ella, provocando una visión borrosa de los objetos lejanos. Y aunque la forma del ojo está relacionada con la genética, también influyen múltiples factores, como el uso excesivo de pantallas. Por ello, la miopía es un problema al alza y, de hecho, se estima que en 2025 la mitad de la población mundial será miope.


Miopía o espasmo: la importancia de un buen diagnóstico


El espasmo acomodativo puede desencadenar lo que se conoce como “miopía falsa”, un defecto de enfoque causado por el exceso de acomodación. Pero si el exceso acomodativo persiste, el ojo puede alargarse de forma irreversible, dando lugar a una miopía verdadera, lo que incrementa las probabilidades de padecer enfermedades oculares más graves. No obstante, diagnosticar el espasmo acomodativo resulta bastante sencillo. “El diagnóstico lo realiza un oftalmólogo tras realizar una prueba que consiste en la aplicación de gotas oculares que relajan temporalmente el músculo del ojo, paralizando la acomodación ocular. De esta forma es posible confirmar si la miopía que presenta el paciente es real o debido a un espasmo”, aclara Valentín-Gamazo.

Por tanto, la corrección de este problema es posible. En ocasiones, es suficiente con una pequeña ayuda óptica para enfocar mejor de cerca. También se pueden usar medicamentos en dosis muy bajas, como la atropina diluida, y poner en práctica unos buenos hábitos visuales, fomentando los descansos visuales y la actividad al aire libre. En cambio, la cirugía refractiva, un procedimiento quirúrgico destinado a corregir la miopía, está contraindicada en casos de espasmo acomodativo. “No podemos operar un ojo que aún está cambiando. Antes hay que descartar que se trate de una miopía falsa, y eso solo lo conseguimos con una exploración adecuada”, indica el especialista.


¿Cómo evitar los espasmos acomodativos?


Para prevenir los espasmos acomodativos, es fundamental incorporar hábitos saludables para la vista en la rutina diaria. El oftalmólogo de Miranza ofrece algunas recomendaciones clave para proteger los ojos frente a este fenómeno:
  • Aplicar la regla 20-20-20: Cada 20 minutos, se debe descansar la vista durante al menos 20 segundos y enfocar algo que esté a más de 6 metros (20 pies).
  • Mantener la distancia correcta: Las pantallas o libros deben estar al menos a 40 cm de los ojos, nunca pegados.
  • Mejor postura, mejor visión: El monitor del ordenador debe estar 15º por debajo del nivel de los ojos para facilitar la convergencia natural, que permite una visión binocular clara y precisa de cerca.
  • Confirmar una buena iluminación: Un entorno bien iluminado reduce el esfuerzo ocular.
  • Pasar más tiempo al aire libre: La visión de lejos, con luz natural, relaja la acomodación de forma natural.
  • No ignorar el cansancio visual: Si aparece dolor de cabeza, visión borrosa o fatiga, es hora de consultar con el oftalmólogo.
REGÍSTRATE GRATIS
PARA SEGUIR LEYENDO
¿Ya eres premium? Inicia sesión
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.