Reunión del Perte de Salud de Vanguardia en abril.
El
Perte para la Salud de Vanguardia, impulsado por el Gobierno en 2021 para potenciar la
innovación en el Sistema Nacional de Salud (SNS), ha movilizado ya 2.868 millones de euros, de los que 2.505 proceden del Estado y 363, del sector privado. Son cifras que superan el tope presupuestario planteado inicialmente: en abril, el Ejecutivo hablaba de 2.481 millones de inversión pública -de los que ya se había ejecutado el 82 por ciento- y de 363 de inversión privada -de los que ya se habían movilizado 205-. Fuentes del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades confirman a
Redacción Médica que
“se ha producido una actualización en la inversión”. Además, avanzan que el objetivo es que el capital privado alcance los 376 millones de euros al cierre del programa.
Se trata de uno de los aspectos que destaca el Gobierno en dos respuestas parlamentarias al PP para defender su estrategia de
transformación e innovación farmacéutica para con el SNS. El Grupo Popular se había hecho eco de unas declaraciones de la directora general de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (
Aemps), María Jesús Lamas, que se había referido a la “transformación” del ámbito sanitario como
“una oportunidad única para los pacientes y los sistemas de salud”, dado que “abre la puerta a una mayor eficiencia en el uso de recursos y a procesos más ágiles”. Lamas también abogaba por “avanzar hacia un sistema más armonizado y predecible para todos los agentes, desarrolladores y la industria farmacéutica innovadora, facilitando la colaboración y el acceso a la innovación”.
Colaboración entre ministerios y agentes para innovar en salud
En su respuesta, Moncloa recuerda, entre otras cosas, que el Perte para la Salud de Vanguardia impulsado en 2021 es un “programa estratégico” que se centra en “la innovación en salud” y cuyo objetivo es “mejorar el sistema sanitario, la protección de la salud a la vez que fortalecer el tejido industrial y generar crecimiento económico”: “Estos objetivos favorecen la colaboración y el fomento de la innovación en salud, haciendo que
el sistema esté armonizado y sea predecible para todos los agentes del ecosistema”. Entre las medidas impulsadas en este proyecto destaca la puesta en marcha de
Terafront, la primera sociedad mercantil público-privada en terapias avanzadas de España, con la que se busca acelerar la llegada de las terapias más punteras a la sociedad española a través del sistema sanitario público.
La Gobernanza del Perte, explica el Gobierno, se articula con un
Grupo de Trabajo Interministerial copresidido por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y el Ministerio de Sanidad, aunque cuenta con “todos los ministerios y agencias que ejecutan acciones de
apoyo a la investigación e innovación en salud, incluida la Aemps”. La alianza incluye “a las distintas comunidades autónomas, patronales del sector, asociaciones de pacientes, sociedades científicas y representantes de la investigación y la innovación”.
Esa circunstancia “hace que las acciones que se lanzan por parte de los distintos agentes financiadores estén coordinadas, se apoyen unas en otras cubriendo toda la cadena de valor de investigación e innovación desde sus Technological Readiness Levels más bajos hasta la traslación, certificación y lanzamiento al mercado, promoviendo asimismo la
colaboración entre los diferentes agentes del ecosistema de innovación en salud”.
Medidas impulsadas a través del Perte de Salud
La inversión de 2.868 millones de euros desplegada hasta ahora se ha canalizado “principalmente”, según el Gobierno, en convocatorias de subvenciones en concurrencia competitiva, creación de estructuras, redes y
centros de I+D en salud, compra pública innovadora y precomercial, coinversiones de capital riesgo, convenios con comunidades autónomas y acuerdos en conferencia sectorial, así como la constitución de sociedades público-privadas. Son más de 50 las medidas implementadas.
En el marco del Perte, los ministerios de Sanidad y de Transformación Digital y Función Pública, en colaboración con las comunidades y las ciudades autónomas, “desarrollan actuaciones clave en materia de espacios de datos en salud, análisis y explotación de datos, y
transformación digital del sistema sanitario”: “La coordinación se realiza desde el Ministerio de Sanidad, con un modelo de trabajo colaborativo en el que las comunidades autónomas avanzadas lideran proyectos concretos con participación del resto. Estas iniciativas se abordan en las reuniones de la Conferencia Sectorial de Sanidad y no corresponde al Comisionado del Perte emitir respuesta sobre ellas”, detallan desde Moncloa.
El plan para innovar en la industria farmacéutica
En cuanto al sector farmacéutico, el Ejecutivo resalta que se ha elaborado por primera vez en España una
Estrategia de la Industria Farmacéutica, “fruto del trabajo de un grupo interministerial integrado por los ministerios de Sanidad, Hacienda, Industria y Turismo, y Ciencia, Innovación y Universidades, junto con las principales patronales del sector: Farmaindustria, Aeseg, BioSim, Afaquim y Asebio”: “Esta Estrategia se ha diseñado desde una perspectiva colaborativa y sistémica, que aúna el
acceso a la innovación, el fomento de la I+D+i y el refuerzo de las capacidades industriales”.
Por otro lado, en Moncloa recuerdan que se sigue negociando la
reforma farmacéutica de la Unión Europea (UE), enmarcada en la
Estrategia Farmacéutica Europea adoptada por la Comisión en noviembre de 2020. “La propuesta de esta nueva directiva, así como el resto de la normativa en desarrollo, tiene entre sus objetivos principales fomentar la competitividad, la innovación y la sostenibilidad de la industria farmacéutica de la UE y el desarrollo de medicamentos de alta calidad, seguros, eficaces y más ecológicos. Una vez se apruebe la normativa, que está ya en la fase de trílogos, tendrá que trasponerse a la normativa española”, resume el Gobierno.
Finalmente, se destaca que la Aemps está integrada en la Red de Agencias de Medicamentos Nacionales (HMA) y, hasta 2028, en la Estrategia de la Red de Agencias Europeas de Medicamentos (Emans), “que dota a la red reguladora europea de medicamentos de las herramientas necesarias para responder a los cambios, centrándose en la
mejora de la innovación y la competitividad en el sector sanitario de la UE”. El documento de esta Estrategia se elaboró durante 2024 y se aprobó el pasado marzo tras someterse a consulta pública.
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