Sanidad sondea un giro estructural para financiar los nuevos adelgazantes

Imprescindibles y asequibles. Esas son las dos palabras que han girado en torno a la industria farmacéutica estos días. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido su primera guía sobre el uso de fármacos destinados a la pérdida de peso. Entre ellos, algunos de los más famosos en el mercado farmacéutico: Ozempic, Wegovy, Mounjaro o Rybelsus. Una enumeración que cuenta además con una reclamación, y es que el organismo sanitario ha solicitado que este tipo de medicamentos sean accesibles para la población. Entre tanto, el Ministerio de Sanidad, cuestionado por este asunto, explica a Redacción Médica la situación en la que se encuentran estos medicamentos en lo que se refiere a la financiación en la prestación farmacéutica de la sanidad pública. Es decir, sí van a tener algún tipo de ayuda a la hora de que el Sistema Nacional de Salud (SNS) cubra parte del coste de estos productos farmacéuticos.

Sanidad y sus vías para los medicamentos esenciales

“La introducción en la financiación de los productos para obesidad requiere un análisis detallado porque supone también cambios estructurales en la forma en la que se atiende a estos pacientes”, confían las voces consultadas por este periódico. Sus palabras se refieren concretamente a Wegovy, que en los últimos meses ha tratado de formar parte de la prestación farmacéutica del SNS.

Este fármaco con semaglutida, creado por Novo Nordisk, está destinado al tratamiento de los pacientes con obesidad como complemento a la dieta y ejercicio físico. Esa es la base de Wegovy, uno de los medicamentos más aclamados en los últimos meses dentro de la industria farmacéutica, y uno de los que se encuentra presente en este listado emitido por la OMS.

Es aquí donde Sanidad, a lo largo de la conversación con Redacción Médica, hace la distinción entre los diferentes tipos de fármacos con semaglutida. Por un lado, Wegovy, que no está disponible en la financiación pública del SNS debido a, como aludió la Comisión Interministerial de Precios de Medicamentos (CIPM) en sus últimos dictámenes, “criterios de racionalización del gasto público destinado a prestación farmacéutica e impacto presupuestario”.

La situación de Ozempic y Rybelsus, ambos destinados al tratamiento de pacientes con diabetes tipo 2 y creados por el ‘padre’ de la semaglutida, Novo Nordisk, es distinto. Ambos se encuentran financiados en el SNS, aunque estos últimos días, como avanzó Redacción Médica, se hicieron públicas las intenciones de la compañía farmacéutica para sumar ambos medicamentos a esta prestación en su formato en monoterapia. A ellos se unió Eli Lilly, que trató de que Mounjaro fuese uno más en la cartera del SNS. Unos deseos que fueron rechazados por la CIPM.

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"Se trata de encontrar un precio justo y acordado que recompense la fabricación de medicamentos"

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“El Ministerio de Sanidad sigue negociando con estas compañías para hacer accesibles los medicamentos dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS) sin poner en riesgo la sostenibilidad de este”, apuntas las voces consultadas por este periódico. Y es que, según estas mismas fuentes, las últimas publicaciones se corresponden con las “propuestas de resolución a las que las compañías alegan”. Por tanto, ahora hay un nuevo paso: “Con estas alegaciones se vuelve a la CIPM y se resuelve de manera definitiva con una aprobación o una denegación de precio y financiación”.

Es en este punto donde llega otro de los puntos clave que rodean la petición de accesibilidad y asequibilidad de la OMS. Sanidad no muestra dudas. “El precio de los medicamentos es muy importante para la Comisión Interministerial de Precios de Medicamentos (CIPM)”, admite el Ministerio. En otras palabras, el alto coste de estos fármacos es uno de los puntos que se han tenido en cuenta a la hora de dictaminar ese ‘no’.

¿Qué significa y en qué se traducen estas palabras de la cartera sanitaria? El organismo político deja esta cuestión en manos de las empresas. “Las compañías son las únicas que pueden ofrecer precios más reducidos y eso facilita la financiación de los medicamentos”, dicen sobre el asunto. En este sentido, cabe señalar que esta bajada de los costes supondría una inversión millonaria para las farmacéuticas en otros ámbitos como la investigación y los ensayos clínicos, entre otros.

“En cualquier caso, se trata de encontrar un precio justo y acordado que recompense el desarrollo y fabricación de los medicamentos en base al valor real que aporta en términos de salud, prevención, calidad de vida o productividad, y que este precio no ponga en riesgo la prestación de servicios sanitarios en otras enfermedades o patologías”, rematan sobre este aspecto las fuentes cercanas al Ministerio de Sanidad.

La semaglutida, entre los medicamentos esenciales de la OMS

La industria farmacéutica vive la fama de la semaglutida. A lo largo de este 2025, el sector ha acogido el auge de medicamentos con este principio activo. Entre ellos, Ozempic, Rybelsus o Wegovy, que incluso han vivido la aparición de un mercado paralelo, ilegal, en los últimos meses.

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"Estos medicamentos podrían contribuir a ampliar la brecha entre ricos y pobres"

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Más allá de este asunto, sobre el que ya se encuentran trabajando los distintos organismos sanitarios como la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), lo cierto es que los fármacos con semaglutida vuelven a ser noticia. Hace unos unos días, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó la primera guía sobre el uso de terapias con principios activos agonistas del receptor GLP-1, entre los que se encuentran la semaglutida, la tirzepatida y la liraglutida.

"Sin una acción concertada, estos medicamentos podrían contribuir a ampliar la brecha entre ricos y pobres, tanto entre países como dentro de ellos", ha advertido Tedros Adhanom, director general de la OMS.

La OMS ha emitido su dictámen, y el Ministerio de Sanidad sus primeras reacciones. La cartera liderada por Mónica García ya condiciona la financiación de los medicamentos destinados al tratamiento de la obesidad a un "análisis profundo". Un aspecto que influirá en fármacos de la talla de Wegovy, que cuentan con esta indicación y que en los últimos meses ha tratado de formar parte de la prestación farmacéutica del SNS.