El impacto del cambio climático en la salud global es una cuestión de Estado

En el marco del IV Congreso de Cooperación Internacional de la Organización Médica Colegial, la profesión médica, junto a expertos de otras disciplinas, hemos abordado el impacto en la salud global generado por el cambio climático, un desafío que afecta a toda la humanidad y cuyo abordaje requiere del compromiso ético de toda la sociedad.

Un compromiso que ya forma parte del ADN de la profesión médica y que se recoge en el Código de Deontología aprobado en diciembre de 2022, un compromiso que tiene su máximo exponente en la Alianza Médica contra el Cambio Climático, una iniciativa que aúna los esfuerzos de colegios de médicos y sociedades científicas para la descarbonización de la asistencia sanitaria y para la sensibilización de los profesionales y sociedad en su conjunto.

La reflexión y el intercambio de ideas del Congreso nos marcó un primer paso a seguir, un punto de partida: impulsar, promover y formar en la estrategia One Health y el trabajo multidisciplinar para evitar el impacto negativo del cambio climático en la salud global, porque sólo desde esa mirada de “una sola salud” podremos combatir con ciencia y con conciencia esta gran crisis.

Pero sacamos muchas más lecciones de este foro, como la necesidad de trabajar para fomentar cursos de formación médica continuada, promocionar una prescripción médica más responsable con el medioambiente, racionalizando en lo posible la emisión de gases de efecto invernadero, luchar contra los riesgos asociados a la creciente resistencia a los antibióticos, y promover la economía circular de los residuos de fármacos y material sanitario como medidas que contribuyan a descarbonizar la sanidad.

Para llevar todo eso a término, es necesario que desde la profesión médica y en colaboración con todos los agentes implicados, contribuyamos y apoyemos a entidades y profesionales sanitarios que promuevan políticas públicas a nivel europeo que incidan en el aumento de la financiación de proyectos de acción humanitaria y cooperación al desarrollo, iniciativas que deben priorizar a los más vulnerables.

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"Solo desde la mirada One Health podemos combatir con ciencia y conciencia la crisis climática"

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Desde la OMC ya trabajamos en generar sinergias con instituciones y organizaciones europeas, ejemplo de ello es la creación de una Federación Temática en la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS), denominada Green & Sustainable Medical Practice, para promover y potenciar conductas que contribuyan a la sostenibilidad del planeta en la práctica médica. Con esta iniciativa española, hemos conseguido elevar al ámbito europeo la obligación de implicarnos y trabajar en colaboración con entidades, no solo en nuestro territorio nacional, sino desde este organismo, que agrupa a cerca de 1,6 millones de médicos especialistas en Europa, involucrando a los profesionales en el movimiento contra el cambio climático y en una postura proactiva en la descarbonización de la Sanidad, el cumplimiento de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El alcance de este problema y la magnitud de sus consecuencias para la salud mundial, es decir, la aparición de nuevas patologías y el empeoramiento de las ya existentes –enfermedades respiratorias, cardiovasculares, infecciones alimentarias, salud mental, etc. nos exigen iniciar ya las acciones de lucha que sean oportunas para revertir esta amenaza. Pero no podemos hacerlo solos, por eso, y como reza el título de esta tribuna, el impacto negativo del cambio climático en la Salud Global debe de ser una cuestión de Estado que nos implique e involucre a todos.

Resultado de ese enfoque transversal e integrador, el Congreso contó con representantes del Ministerio de Sanidad y del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación Internacional. 

Es absolutamente clave que la Administración guíe y lidere este importante reto, es imprescindible integrar el enfoque UNA SOLA SALUD (ONE HEALTH) en todas las políticas gubernamentales y es esencial que el impacto negativo del cambio climático en salud sea una cuestión de Estado.

Desde la profesión médica estaremos siempre dispuestos a poner todo nuestro conocimiento y todas nuestras competencias para construir e impulsar estrategias que contribuyan a esta lucha. Nuestro afán es solo uno y milenario, proteger, acompañar, cuidar e intentar curar a los más frágiles y quebradizos, los enfermos.