Un estudio compara la protección cardiovascular de la semaglutida y de la tizerpatida
La
semaglutida vive su propia fama dentro de la
industria farmacéutica. Este principio activo, agonista del receptor GLP-1 (utilizado para regular la glucosa y reducir el apetito), se encuentra en un momento de auge. Si algo ha marcado el 2025 ha sido el crecimiento de la popularidad de la talla de
Ozempic -para el tratamiento de la diabetes tipo 2-, o de
Wegovy -destinado para la obesidad-, ambos con semaglutida e 'hijos' de Novo Nordisk, la compañía farmacéutica danesa. Con este escenario, la investigación, uno de los ejes que guían a la industria, ha propulsado el análisis de estos fármacos. Pero también de sus homólogos. Y es que un estudio reciente de Mass General Brigham ha concluido que
tirzepatida, similar a la
semaglutida pero con varias diferencias, ha mostrado beneficios en la
protección cardiovascular de los pacientes.
Este estudio nació con un objetivo principal: comparar los
efectos cardioprotectores de la semaglutida y de la tirzepatida. Así, la investigación ha analizado datos de cerca de un millón de pacientes con diabetes tipo 2 para evaluar la eficacia de este 'hermano' del principio activo presente en medicamentos de la talla de
Ozempic de cara al
riesgo de infarto, entre otras cuestiones.
Las claves del estudio
La investigación ha dejado una conclusión sobre la mesa. Tanto la semaglutida como la tirzepatida reducen significativamente el riesgo de infarto y el
accidente cardiovascular. Es decir, ambos tienen
efectos protectores para el corazón. Y así se ha hecho público en
Nature Medicine, además de con la presentación de los resultados del estudio en el marco de las Sesiones Científicas de la Asociación Americana del Corazón de 2025.
Bajo el título 'Resultados cardiovasculares de la semaglutida y la tirzepatida en pacientes con diabetes tipo 2 en la práctica clínica', varios investigadores se involucraron en este proyecto para la innovación en la industria farmacéutica. De esta forma, el análisis de ese
millón de pacientes con diabetes tipo 2 ha evidenciado que ambos
fármacos han mejorado los resultados cardiovasculares para aquellas personas que presentaban un mayor riesgo de complicaciones cardíacas.
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"Ambos fármacos muestran fuertes efectos cardioprotectores"
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"En comparación con la sitagliptina, un fármaco para la diabetes conocido por tener efectos neutros sobre la salud cardiovascular, la
semaglutida redujo el riesgo combinado de accidente cerebrovascular e infarto de miocardio en un
18 por ciento", indica la investigación. Por su parte, y en lo que se refiere a su 'hermano', la
tirzepatida,
este principio activo también ha mostrado beneficios, y es que ha logrado reducir el riesgo de accidente cerebrovascular, infarto de miocardio y muerte en un
13 por ciento en comparación con la dulaglutida, otro agonista del receptor GLP-1 que se utiliza desde hace varios años.
Nils Krüger, uno de los autores del estudio e investigador de la División de Farmacoepidemiología y Farmacoeconomía del Departamento de Medicina del Mass General Brigham, ha sido uno de los que ha abordado las conclusiones de esta investigación.
"Ambos fármacos muestran fuertes efectos cardioprotectores", ha concluido en declaraciones recogidas por SciTechDaily. A su vez, ha añadido que los datos derivados de esta comparación entre medicamento "también indican que estos beneficios se manifiestan precozmente, lo que sugiere que sus mecanismos protectores van más allá de la simple pérdida de peso".
"Nuestro estudio halló solo
pequeñas diferencias entre tirzepatida y
semaglutida en la protección cardiovascular en poblaciones con riesgo de eventos adversos, lo que subraya que ambos fármacos ofrecen un beneficio protector y podrían integrarse en la práctica clínica cardiovascular", ha rematado Krüger.
Diferencias entre semaglutida y tirzepatida
Hay una
diferencia clave entre la semaglutida y la tirzepatida. Mientras que la primera actúa como agonista del receptor GLP-1, la segunda lo hace tanto para el GLP-1 como para el polipéptido inhibidor gástrico (GIP), una hormona intestinal que regula la glucosa y el metabolismo. Es decir, tiene un efecto dual.
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