Diccionario de enfermedades

Trombopenia

¿Cómo se diagnostica la trombopenia?
Las plaquetas son unas células de la sangre (en realidad no son auténticas células porque no tienen núcleo) necesarias para taponar y evitar la salida de sangre desde cualquier herida que se produzca en un vaso sanguíneo (vena o arteria). Ante cualquier rotura en la pared de un vaso sanguíneo las plaquetas se apilan unas sobre otras y forman un coágulo o trombo que impide la salida de la sangre.

Las plaquetas se fabrican en el interior de los huesos, en una zona llamada médula ósea (el tuétano de los huesos de los animales), al desprenderse de unas células llamadas megacariocitos.

En situaciones normales, el número de plaquetas en sangre oscila entre 150.000 y 450.000 por microlitro.

En general, se considera que existe una trombopenia cuando el número de plaquetas en la sangre es menor de 150.000 por microlitro (μl).

Causas de la trombopenia


Las causas por las que las plaquetas de la sangre pueden estar bajas son tres:
  • Menor producción de plaquetas en la médula ósea. Generalmente el descenso de plaquetas se acompaña de alteraciones en los glóbulos rojos y blancos:
  • Anemia aplásica, es decir, falta de producción de todas las células de la sangre por una alteración grave de la médula ósea. Puede ser debida a radiación, tóxicos, medicinas, infecciones, etc. En este caso las plaquetas bajas se acompañan de glóbulos rojos bajos (anemia) y de glóbulos blancos bajos (leucopenia).
  • Enfermedades infecciosas (tuberculosis, etc.) o cánceres (linfomas, metástasis a la médula ósea) que invaden la médula ósea e impiden la formación de plaquetas.
  • Secuestro de plaquetas en alguna parte del cuerpo, generalmente en el bazo:
  • Enfermedades que causan esplenomegalia, fundamentalmente la cirrosis hepática.
  • Destrucción de plaquetas en la sangre. No suelen estar afectadas otras células de la sangre, solo las plaquetas. Puede ser debida a:
  • Púrpura trombopénica autoinmune (púrpura trombocitopénica idiopática o PTI). Se produce trombopenia por destrucción de las plaquetas dentro de la circulación sanguínea. Puede afectar a niños y adultos. Sus causas pueden ser desconocidas o puede estar asociada a infecciones (generalmente hepatitis o infección por VIH) o enfermedades autoinmunes, con mayor frecuencia a un lupus eritematoso sistémico.
  • Reacciones tras la toma de diversos medicamentos.
  • Púrpura trombocitopénica trombótica (PTT) o síndrome hemolítico urémico. Se trata de una destrucción de las plaquetas en el interior del sistema circulatorio asociada a alteraciones en la coagulación de la sangre, con formación de pequeños trombos que pueden llevar al fracaso del riñón (fracaso renal agudo) y a una elevada mortalidad. Puede ser de causa desconocida o asociarse a infecciones, a vasculitis (inflamación de las venas), al trasplante de médula ósea, al embarazo o a la toma de algunas medicinas.
  • En muchas ocasiones la causa de la trombopenia es mixta, es decir, por alteraciones en la producción de plaquetas en la médula ósea y por mayor destrucción en la sangre. Esto se puede ver en:
  • Infecciones por virus (hepatitis, mononucleosis infecciosa, infección por VIH, etc.) o bacterias (infecciones de la sangre). Son una de las causas más frecuentes de bajada de plaquetas, la cual suele ser moderada y sin trascendencia clínica.
  • Toma de numerosos medicamentos. Algunos afectan fundamentalmente a la producción de plaquetas en la médula ósea (quimioterapia) y otros favorecen su destrucción en la sangre. Las medicinas que más frecuentemente se han asociado con trombopenia son los anti-inflamatorios, algunos antibióticos, algunas medicinas para la epilepsia y algunas medicinas para el corazón.
Es frecuente que una persona tenga plaquetas bajas y no se encuentre ninguna causa clara de la trombopenia. En estas circunstancias, la decisión de realizar o no estudios más completos depende de la gravedad de la trombopenia y de la presencia de otras alteraciones en la sangre.

La mayoría de las veces no produce síntomas y se descubre al realizar un análisis de sangre por otros motivos



Síntomas de la trombopenia


En la mayoría de las ocasiones la trombopenia no produce ningún síntoma, siendo un hallazgo casual al realizar un análisis de sangre por cualquier otro motivo. Si bien se considera trombopenia la disminución de plaquetas por debajo de 150.000 por microlitro de sangre, se suelen necesitar descensos mucho más importantes para que aparezcan síntomas, en general que las plaquetas se encuentre por debajo de 30.000 por microlitro. Si se produce un descenso muy importante, la trombopenia aumenta el riesgo de sangrado y de hemorragias. La gravedad de dicho sangrado dependerá del número de plaquetas que haya en  la sangre:
  • En casos leves puede producirse:
  • Aparición de manchas rojas y pequeñas en la piel (como pequeñas hemorragias), generalmente en pies, tobillos y piernas, llamadas petequias, o manchas más grandes llamadas equimosis.
  • Sangrado al cepillarse los dientes.
  • Sangrado por la nariz o por las encías.
  • Mayor sangrado con la menstruación.
  • En casos graves puede producirse:
  • Hemorragias cerebrales.
  • Hemorragias digestivas.

¿Cómo se diagnostica?


El diagnóstico de trombopenia solo necesita un análisis de sangre. En muchas ocasiones, la trombopenia se debe a que al extraer la sangre, las plaquetas se pegan entre sí dentro del tubo (como si formaran entre ellas un coágulo) y al contarlas parece que hay menos de las que realmente hay (pseudotrombopenia). En estas circunstancias se debe extraer un nuevo análisis de sangre.


Siempre debe mirarse si además de las plaquetas hay alteraciones en los glóbulos rojos y en los glóbulos blancos, otras células que también se fabrican en la médula ósea. Para conocer las causas puede ser necesario realizar análisis de sangre más complejos (búsqueda de anticuerpos antiplaquetas, búsqueda de infecciones u otros), un aspirado de médula ósea o una biopsia de médula ósea o diversas pruebas de imagen como ecografías o TAC.

¿Es hereditaria?


Algunas formas de trombopenia son hereditarias, sin embargo, son enfermedades muy infrecuentes.

¿Puede prevenirse la trombopenia?


En general, la trombopenia no puede prevenirse.

Pronóstico:


Depende de la enfermedad responsable de la trombopenia. La púrpura trombocitopénica autoinmune suele responder adecuadamente al tratamiento.

Tratamiento de las trombopenias


En pacientes con trombopenias leves puede no existir indicación de tratamiento. Por el contrario, cuando las plaquetas están muy bajas puede ser necesario poner transfusiones de plaquetas para evitar el elevado riesgo de hemorragia grave.

En general, el tratamiento de las trombopenias por destrucción de plaquetas en la sangre suele ser la administración de corticoides y/o la inyección intravenosa de gammaglobulinas. En las personas con recaídas cuando se está bajando la dosis de corticoides, puede valorarse la esplenectomía, es decir, extirpar el bazo. En casos muy concretos pueden utilizarse medicinas que estimulan la formación de plaquetas en la médula ósea.

En la púrpura trombocitopénica trombótica se recomienda el recambio del plasma, el tratamiento con corticoides y, en algunas circunstancias, otras medicinas.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.