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26 mar. 2019 14:10H
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Dice la Real Academia de la Lengua que una de las acepciones del término ‘voz’ es autoridad o fuerza que reciben las cosas por el dicho u opinión común. Hace escasas fechas más de 3.000 voces han hablado de forma muy coincidente y han dejado claro su mensaje a todo aquel que lo quiera escuchar.

Más de 3.000 hombres y mujeres, ciudadanos y pacientes, han dicho en una encuesta realizada por nuestra organización que quieren recibir una atención segura y que, para ello, se necesitan más enfermeras y  enfermeros en los hospitales, en los centros de salud y en el resto de centros sanitarios y sociosanitarios de nuestro país.

Según afirman los expertos en sondeos de opinión, contar con más de 2.000 opiniones es más que representativo de lo que piensa la sociedad española sobre cualquier asunto y, en este caso, se han recabado más de 3.000 testimonios que, de manera contundente, dicen sí a una Ley que establezca un número máximo de pacientes por cada enfermera o enfermero. Una propuesta que mejoraría la atención sanitaria que todos ellos y ellas reciben y que evitaría la sobrecarga del Sistema Nacional de Salud.


"Contar con poco más de cinco enfermeras/os por cada 1.000 habitantes afecta negativamente a la calidad de la asistencia sanitaria"


Coindicen, además, en el diagnóstico realizado por organizaciones profesionales y de usuarios, pacientes y consumidores de que contar con poco más de cinco enfermeros/as por cada 1.000 habitantes afecta negativamente a la calidad de la asistencia sanitaria y, por tanto, a los cuidados que reciben cuando acuden a un centro sanitario o sociosanitario o son atendidos en su domicilio.

Existe, por tanto, un clamor generalizado a favor de un mejor funcionamiento de nuestro Sistema Nacional de Salud y lo que ahora hace falta es que éste no solo sea escuchado sino también atendido por las personas que, desde sus puestos de responsabilidad, tienen la oportunidad de cambiar las cosas.

Ante un nuevo escenario


Estamos a las puertas de importantes citas electorales a nivel europeo, nacional, autonómico y local que, indudablemente, suponen una oportunidad inmejorable de iniciar una nueva etapa en la que se haga realidad el nuevo modelo de atención sanitaria que necesita nuestro país.

Será en ese nuevo escenario cuando, previsiblemente, llegará al Congreso de los Diputados la Iniciativa Legislativa Popular de ratios enfermeras y será el momento de constatar si los encargados de defender el interés público atienden la voz de cerca de 47 millones de personas.

Hasta que llegue ese momento, los compromisos y propuestas siguen sucediéndose, caso del plan en el que Ministerio, consejerías de Sanidad y representantes de organizaciones de profesionales y pacientes están trabajando para mejorar la Atención Primaria.

Entre otras medidas se encuentra la de reducir los cupos de población por enfermera o enfermero y que éstos no superen las 1.500 personas. De hacerse realidad este compromiso aún reflejado solo en un papel constituiría un gran paso en la buena dirección y respondería a la demanda reiterada desde nuestra organización y plasmada en nuestra Ley de ratios enfermeras.

Constata también que los responsables sanitarios públicos son muy conscientes de la necesidad de aumentar los recursos humanos destinados a nuestro sistema sanitario. Lo que ahora hace falta, como siempre, es que de las palabras y las buenas intenciones se pase a los hechos.

Los más de 300.000 enfermeros y enfermeros de nuestro país seguiremos, en todo caso, exigiendo que se priorice a nivel organizativo y económico la seguridad de cualquier persona que requiere nuestra atención y cuidados. Nuestras voces, como no puede ser de otra manera, se suman a las de los ciudadanos, ahora y siempre.