Las enfermedades hepáticas y digestivas afectan a un gran número de ciudadanos y representan una de las áreas de mayor actividad tanto asistencial como científica en el ámbito de Ciencias de la Salud. Esta relevancia es lo que motivó la creación del Centro de Investigación Biomédica en Red en Enfermedades Hepáticas y Digestivas (Ciberehd) cuando se generó el proyecto Ciber, que incluye otras áreas del conocimiento.
 
A partir de la dirección de Jaume Bosch, se ha logrado que el Ciberehd constituya un referente a nivel nacional e internacional. Los grupos líderes de investigación y promoción de asistencia clínica de calidad en enfermedades hepáticas y digestivas en distintos ámbitos de este campo del conocimiento forman parte del Ciberehd.
 
Se han producido resultados de gran impacto en las entidades más relevantes de estos campos tanto a nivel patogénico como en tratamiento, e investigadores del Ciberehd constan entre los más citados en todo el mundo. Esta actividad afecta a entidades como la úlcera péptica, la enfermedad inflamatoria intestinal, los trastornos de motilidad digestiva, la hepatitis vírica, toxicidad hepática por medicamentos, lesión hepática por alcohol o ligada a síndrome metabólico, progresión del daño hepático con fibrosis, cirrosis descompensada, hipertensión portal con hemorragia por varices esofágicas, encefalopatía hepática, trasplante hepático, enfermedad hepática hereditaria, cáncer colorrectal y pancreático, cáncer hepático, biología molecular y transporte de membranas.
 
Además, el Ciberehd se ha dotado de plataformas tecnológicas para estudios genómicos, metabolómicos y proteómicos, así como análisis bioestadístico. Al mismo tiempo, ha puesto en marcha una plataforma para asesoramiento diagnóstico y terapéutico en tumores hepáticos (https://ecatch.bclc.cat ) para facilitar la toma de decisiones clínicas basadas en la evidencia. Todo ello configura un conjunto de actividades de primer nivel que, seguro, se mantendrá y, posiblemente, se expandirá.
 
El reconocimiento de los investigadores del Ciberehd ha permitido redactar documentos internacionales de práctica clínica y de investigación que representan la base sobre la que debe generase la investigación futura. Este presente constituye un reto para una etapa en que debe asegurarse que los nuevos resultados superen a los del pasado. Para afrontar el reto, será fundamental actuar en distintos ámbitos y potenciar la filosofía que ha guiado al Ciberehd desde su creación. El core conceptual debe prevalecer, pero también debe facilitarse una renovación imprescindible en todos los proyectos ambiciosos. Los objetivos, sinergias y planificación estratégica deben revisarse de forma periódica para mantener un nivel de excelencia.
 
Habrá que prestar atención a diversos conceptos clave. El Ciberehd debe continuar como un proyecto de excelencia científica con producción de calidad continuada y que incluya a los grupos líderes del país. Por ley de vida, la capacidad de los grupos evoluciona y se debe contemplar que, en un momento dado, algunos grupos serán separados por haber disminuido su producción. Por tanto, se debe facilitar la incorporación de aquellos grupos emergentes que puedan contribuir eficazmente al proyecto global.
 
Para ello, resulta fundamental una evaluación constante de la producción científica, su impacto y su alineamiento con la misión del Ciberehd. Un aspecto relevante es la renovación generacional dentro del mismo Ciberehd. Deben identificarse y promocionarse los posibles futuros investigadores principales en cada equipo o área con objeto de asegurar la persistencia de equipos relevantes.
 
Debemos ser capaces de transmitir a los más jóvenes que la investigación es parte integrante del crecimiento profesional y de la mejora progresiva de la asistencia clínica a la población. Obviamente, debe asegurarse que no existe una desproporción de liderazgo entre géneros y facilitar que las investigadoras del Ciberehd no queden sin promoción por motivos arbitrarios.
 
Esta voluntad de estimular la capacidad individual de los investigadores debe pasar también por disponer de una carrera investigadora con objetivos definidos y un sistema de evaluación preestablecido. Únicamente a través de este tipo de política se asistirá a una sana competitividad con renovación constante en los diferentes programas. Lamentablemente, en los últimos años hemos padecido limitaciones importantes en la contratación y renovación de recursos humanos pero es esperable que la mejoría de la economía permita desbloquear este obstáculo a la flexibilidad necesaria para afrontar los retos en investigación.
 
La nueva etapa en el Ciberehd se estructurará alrededor de 4 grandes áreas que no deben verse como compartimientos estancos. Al contrario, en ellas se articulan proyectos colaborativos amplios pero, al mismo tiempo, existen multitud de ellos compartidos por grupos de distintas áreas con objetivos comunes. Un ejemplo paradigmático lo constituye toda la actividad de investigación prospectiva en infección por virus de la hepatitis C.
 
La disponibilidad de fármacos altamente eficaces frente a este agente permite elaborar grandes estudios de cohortes con objeto de definir la evolución tras curación de la infección tanto en lo que respecta a función hepática (regresión de la fibrosis hepática, recuperación de función hepática con desaparición de la indicación de trasplante) como a evaluar la posible disminución del riesgo de cáncer en relación a este agente.
 
Las áreas del Ciberehd y sus coordinadores para los próximos cuatro años son las siguientes: Mecanismos de daño hepático/evolución a cirrosis avanzada y trasplante (Dr. R. Bañares del Hospital Gregorio Marañón de Madrid); Fisiopatología gastrointestinal: enfermedad inflamatoria y trastornos de la motilidad ( Dr. P. Clave del Hospital de Mataró); Epidemiología, prevención y tratamiento de la infección por virus de la hepatitis (Dr. X. Forns del Hospital Clínic de Barcelona); y Oncología hepática y digestiva (Dr. B. Sangro de la Clínica Universitaria de Navarra).
 
En resumen, el pasado resulta brillante y el futuro prometedor pero con múltiples dificultades. No obstante, desde el Ciberehd se pondrá toda la energía para poner de manifiesto a la sociedad que la inversión en investigación produce un retorno de gran valor a la población. Se genera riqueza, se progresa en el conocimiento y, en último término, se mejora la asistencia sanitaria tanto en eficacia como en eficiencia. Éste es el objetivo final de la investigación en salud y es lo que nos anima a perseverar.

  • TAGS