Le siguieron la heroína, el alcohol y el cánnabis



19 dic. 2012 22:46H
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Redacción. Santander
El Consejo Asesor de Drogodependencias ha celebrado este miércoles su reunión anual, en la sede de la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales,  para analizar los resultados del Plan Regional sobre Drogas y del Plan de Prevención y Control del Tabaquismo en 2011.

El pasado año, la red sanitaria pública de Cantabria atendió a 820 personas por drogodependencias y otras 425 recibieron atención integral en la red concertada (Asociación Montañesa de Ayuda al Toxicómano, Asociación Cántabra de Ayuda al Toxicómano, y Proyecto Hombre).

En concreto, el Gobierno regional dio una respuesta asistencial a 326 personas en la Unidad de Atención a la Drogodependencia (UAD) de Santander, 174 en la UAD de Torrelavega, 210 en la de Laredo y 110 en el Centro de Rehabilitación y Reinserción de Drogodependientes (CRRD) de Pedrosa.

Reunión del Consejo Asesor de Drogodependencias.

Además, el indicador de admisiones a tratamiento por abuso o dependencia de drogas  revela que, en 2011, se registraron 479 admisiones a tratamiento ambulatorio, lo que supone un descenso con respecto a 2010 (80 menos). La mayoría correspondieron a hombres (cerca del 85 por ciento) y en un 56 por ciento de los casos las personas admitidas ya habían recibido tratamiento previo. La edad media superó los 36 años.

La cocaína es, por primera vez, la droga que motivó un mayor número de admisiones a tratamiento (el 40,7 por ciento del total), situándose a continuación la heroína (el 26,5 por ciento), el alcohol (el 18,8 por ciento) y el cánnabis (el 10 por ciento).

Por otra parte, la Memoria presenta los datos de la intensa labor de prevención que se ha llevado a cabo tanto en el ámbito escolar, donde se han realizado actuaciones en 14 centros, que han llegado a casi 2.000 alumnos y 96 docentes;  familiar, con los programas ‘Claves para prevenir los problemas de drogas’ (147 participantes), ‘En familia curso virtual’ (268 participantes) y ‘Cine en la Enseñanza’ (860 participantes), y comunitario con la campaña ‘¿Y tú qué eres?’, y la de ‘Calidad de Ocio Nocturno’ que ha facilitado información a los adolescentes y jóvenes sobre los riesgos derivados del consumo de drogas.

Además, se ha llevado a cabo el programa Jóvenes y Drogas que específicamente se dirige a los adolescentes que se inician en el consumo de drogas o presentan conductas de riesgo asociadas a este consumo. En concreto, en 2011 han participado 100 jóvenes, 85 de nueva incorporación y el 60 por ciento concluyeron el tratamiento durante el pasado año.

En un 47 por ciento de los casos el consumo de cánnabis fue la razón de entrada en el programa  y en un 56 por ciento de los casos se han llevado a cabo intervenciones en el ámbito familiar.

Los participantes en el Consejo Asesor  aprobaron los resultados de las memorias del Plan Regional de Drogas y el de Prevención y Control del Tabaquismo, y manifestaron su intención de continuar trabajando, cada uno desde su ámbito de competencia, con el objetivo de disminuir la incidencia en Cantabria de estos hábitos tan perjudiciales para la salud pública.

El Consejo Asesor está compuesto por cerca de 40 personas, representantes de todos los sectores sanitarios y sociales de Cantabria relacionados con esta materia. 

Encuesta escolar sobre Drogas 2010

La memoria del Plan Regional sobre Drogas recoge, además, los principales resultados de la Encuesta sobre drogas a la población escolar, que evidencia un descenso en el consumo de las drogas tanto legales como ilegales entre los jóvenes, especialmente significativo en el caso del cánnabis y el tabaco.  La única excepción es el consumo esporádico de tranquilizantes sin prescripción médica, que aumenta 1,2 puntos respecto a 2008, y ha sido consumido fundamentalmente por chicas.

En general, los jóvenes tienen una mayor percepción de riesgo asociado al consumo habitual de drogas, aunque ha descendido la apreciación del peligro que supone el consumo de estas sustancias de forma esporádica.

El alcohol sigue siendo la sustancia cuyo consumo está más extendido entre los estudiantes de 14 a 18 años de Cantabria, especialmente entre las mujeres. Así, 65,8 por ciento de los jóvenes reconoce haberlo consumido en los últimos 30 días  y la edad media de inicio de consumo por primera vez se sitúa poco antes de los 14 años (13,8).

El tabaco figura como la segunda sustancia más consumida por los jóvenes cántabros (12,9 por ciento ha fumado diariamente en el último mes), sobre todo, entre las chicas y la edad media de comienzo del consumo es la más baja de todas las sustancias analizadas (13,5 años).

En cuanto a las drogas ilegales, el cánnabis sigue siendo la sustancia más consumida y el 16,4 por ciento de los jóvenes cántabros reconoce haberlo consumido en los últimos 30 días. El 3,2 por ciento asegura que hace un consumo diario de esta sustancia. En este caso, como en el del resto de las drogas ilegales, los chicos presentan mayores prevalencias de consumo que las chicas.

El resto de sustancias psicoadictivas (cocaína, tranquilizantes, éxtasis, anfetaminas, inhalables, alucinógenos, GHB y heroína) es minoritario y el 2,3 por ciento de los escolares cántabros afirma que lo ha consumido en los últimos 30 días. Los tranquilizantes sin prescripción médica son los más consumidos, de hecho es la única droga que ha incrementado su prevalencia, seguidos de la cocaína.

Además, en esta última encuesta se ha incluido un estudio sobre las drogas emergentes que revela que las setas mágicas son las sustancias de este tipo más consumidas en Cantabria (2,3 por ciento), seguidas de la ketamina y el Spice. En todos los casos, las cifras muestran niveles muy bajos de consumo y confirman el carácter esporádico y experimental del mismo entre el alumnado. 

Más de 6.000 personas iniciaron tratamiento para dejar de fumar en los centros de salud

El Consejo Asesor de Drogas ha analizado, además, los resultados del Plan de Prevención y Control de Tabaquismo que revelan un incremento en el número de personas que recibieron tratamiento en sus centros de salud para dejar de fumar.

En concreto, 6.076 pacientes fueron tratados por los médicos de atención primaria durante 2011, lo que supone un incremento frente a los 5.610 del año anterior.

La Unidad de Deshabituación Tabáquica, ubicada en el centro de salud de Vargas, atendió a 824 pacientes derivados en algunos casos de atención primaria y otros de la especializada.

En concreto, esta unidad da respuesta a las necesidades de aquellas personas fumadoras que precisaban una atención más específica, especializada e intensiva para dejar de fumar.

Así, tienen prioridad aquellos pacientes que han sufrido dos recaídas en sus tratamientos en atención primaria, las personas con alguna patología psiquiátrica (depresión moderada-severa, psicosis, trastorno bipolar, trastornos alimentarios…), las personas fumadoras que tengan problemas graves de salud como son enfermedades cardíacas graves o de otro tipo (EPOC, insuficiencia respiratoria,…), las mujeres durante el embarazo y la lactancia, y el personal sanitario.

Según los datos presentados hoy, cerca del 40 por ciento de las personas que iniciaron su tratamiento en la UDESTA seguían sin fumar pasado un año.

Por otra parte, la memoria del Plan revela que en 2011 se realizaron 2.596 inspecciones a centros de trabajo, establecimientos de hostelería y centros educativos y sanitarios para verificar el cumplimiento de la normativa en materia de consumo de tabaco. Este dato supone un importante incremento en la actividad inspectora respecto a 2010 que se cerró con 445 visitas.

En total, se detectaron 1.550 incumplimientos de la ley, en su mayor parte debido a defectos o ausencia de cartelería informativa obligatoria.

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