De Primaria a la exclusividad: 4 modelos de sanidad para el 21D extremeño

En poco más de una semana, la sociedad extremeña vivirá una cita electoral que puede marcar un antes y un después en la política de la región. Concretamente, el 21 de diciembre se decidirá qué sanidad quieren los ciudadanos y qué medidas consideran imprescindibles en el Servicio Extremeño de Salud (SES). Sobre la mesa, cuatro programas electorales con los que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), el Partido Popular (PP), Unidas por Extremadura y Vox aspiran a hacerse con la Junta de Extremadura.

Son muchas las medidas sanitarias que defienden las formaciones políticas mencionadas. Aún con ideologías diferentes, las cuatro comparten objetivos. Por ejemplo, el refuerzo de la Atención Primaria, uno de los principales pilares de la sanidad autónomicas.

Reforzar la Atención Primaria del SES

Por su parte, PP, PSOE y Unidas por Extremadura apuestan por incrementar la partida destinada al primer nivel asistencial a un 25 por ciento, dentro del presupuesto sanitario. Vox, aunque no especifica su porcentaje 'ideal', sí que refleja en su hoja de ruta el compromiso a reforzar la Primaria extremeña. De hecho, apuesta por la realización de auditorías dentro de los servicios públicos para detectar "gasto inútil" y, así, invertir en lo realmente necesario, "con la sanidad como prioridad".

Sin duda, algo que se puede observar en los textos de los diferentes partidos es la apuesta por la reducción de las listas de espera, una gran 'lacra' del Sistema Nacional de Salud (SNS). Desde el equipo de la actual presidenta, María Guardiola, seguirán potenciando su plan 'Lista 0', que tiene como fin reducir la demora en sanidad.

Unidas por Extremadura y PSOE van más allá y dejan claro en sus programas qué cifras pretenden alcanzar. La formación de coalición encabezada por Irene de Miguel, por ejemplo, aspira a que las esperas en Atención Primaria se reduzcan, como máximo, a 48 horas.

El PSOE de Miguel Ángel Gallardo incluso establece tiempos para el resto relaciones paciente-Administración. Aseguran que lograrán situar las listas de espera en cirugía en 180 días; las de consulta externa, en 60 días; y las de pruebas complementarias, en 30.

Detección precoz y ayudas a pacientes con ELA

La detección precoz también ocupa una buena parte de los documentos electorales. Vox, Unidas por Extremadura y PP hacen hincapié en los cribados de cáncer de mama. No obstante, solo el PSOE se compromete a ampliar los cribados neonatales, aparte de los incluidos en la cartera de servicios común fijada por el Ministerio de Sanidad.

Los de Fernández, sumado a ello, realizarán auditorías en los cribados oncológicos, puestos en el foco mediático tras lo sucedido en la Junta de Andalucía. Una acción que tiene un objetivo claro: evitar fallos en la respuesta a las mujeres que se realizan las pruebas.

Después de un año lleno de dudas acerca de la financiación de la Ley ELA, los cuatro partidos afirman aumentar las ayudas a las personas afectadas por esta enfermedad si se hacen con la Junta. Los socialistas, además, se comprometen a crear unidades específicas alcanzando, así, un cuidado especializado. 

Desde Vox cubrirán el coste asistencial para todos los pacientes que la padecen con la aprobación de ayudas específicas. Pero no solo eso, ya que exigirán al Gobierno nacional una dotación urgente para su atención.

El gran debate de la exclusividad de jefes de Servicio

A menos de un mes de las elecciones, el Consejo de Gobierno de Guardiola aprobó la eliminación de la exclusividad en los puestos de jefes de Servicio y Sección de Atención Especializada del SES, permitiéndoles compatibilizar su actividad en la sanidad pública con otras actividades profesionales. El PP, eliminando esta norma, ya dejó claro su posicionamiento. Una 'libertad profesional' con la que Vox está de acuerdo, y así lo refleja en su programa electoral: "Garantizaremos que los profesionales sanitarios -jefes de Servicio y Sección- del SES puedan seguir compatibilizando su labor en la sanidad pública con la actividad en centros privados".

Algo en lo que no coinciden ni PSOE ni Unidas por Extremadura. La fuerza política de Gallardo, de hecho, "potenciará y profesionalizará los puestos directivos del SES, garantizando una dedciación exclusiva al sistema público de salud para, así, fortalecer la calidad, la estabilidad y la gestión clínica". De Miguel es más clara y afirma que derogará el decreto aprobado por Guardiola y aplicará la Ley de Incompatibilidades. Incluso 'amenaza' con mejorar los sistemas de inspección y vigilancia sobre el incumplimiento del régimen de incompatibilidades.

Las dos formaciones situadas a la izquierda del espectro ideológico son firmes en salud mental y avanzan la creación de un nuevo plan, igual que los populares. La coalición de Alianza Verde, Podemos e Izquierda Unida apuesta por la incorporación de los psicólogos clínicos en la Atención Primaria y los socialistas se quedan con una 'generalista' ampliación de los profesionales de salud mental.

Aunque Vox no hace mención en su programa de la elaboración de una hoja de ruta concreta, sí destacan la importancia de dotar de recursos a la capacidad asistencial pública para atender el "gravísimo" problema de la salud mental, con especial atención a la infancia, la juventud y a realidades como la soledad no deseada. Añaden también la incorporación de la línea telefónica de emergencia de Atención Emergente al Suicidio.

Reformar el mapa sanitario extremeño y gestionar los RRHH del SES

Otras comunidades como el Principado de Asturias avanzan en nuevos modelos administrativos en sanidad. Tanto el Gobierno de Adrian Barbón como el de Jorge Azcón, en Aragón, han apostado por un cambio en su mapa sanitario, una inicativa que han recogido PSOE y Unidas por Extremadura y han plasmado en su programa. 

La gestión de recursos humanos también se sustenta como eje fundamental en los cuatro proyectos, aunque con medidas muy diferentes y variadas. El PP hace hincapié en el impulso de "un verdadero desarrollo profesional", así como en la implantación del concurso de traslados abierto y permanente del SES y en la agilización de los procesos selectivos y oposiciones. 

Además, prometen facilitar la cobertura de todas las plazas vacantes por jubilación del personal médico y de Enfermería y potenciar el plan de fidelización de MIR, EIR, PIR, BIR, QIR, FIR Y RFIR. De Miguel da un paso al frente y plantea la desaparición gradual de las jornadas de guardia de 24 horas, que, en su SES 'ideal' contabilizarían como tiempo trabajado y para la jubilación, y apuesta por "desbloquear" la carrera profesional.

Vox propone la elaboración de un plan a tres años vista donde se especifique la contratación de médicos, enfermeros, auxiliares y celadoras, aparte de un aumento de incentivos económicos en favor de los sanitarios de las zonas de difícil cobertura y a MIR.

Colaboración público-privada, a favor y en contra

Los únicos en dejar constancia de su posicionamiento en cuanto a la colaboración público-privada en sanidad han sido De Miguel y Fernández, dos partidos muy alejados en su ideario político. La ingeniera agrónoma quiere acabar con los conciertos sanitarios, mientras que el líder de Vox potenciará las relaciones entre entidades privadas y la Administración. 

Por último, PP, Unidas por Extremadura y Vox coinciden en un refuerzo de la farmacia comunitaria. Los de Guardiola aseguran políticas de apoyo a la farmacia rural y la habilitación de la dispensación de la medicación hospitalaria en oficinas de farmacia comunitarias, y los de Fernández impulsarán la farmacia comunitaria como un agente asistencial integrado en el SES, los mismos que eliminarán el 'famoso' registro de objetores de conciencia del aborto que tanta polémica ha generado durante los últimos días.

Así, se plasman cuatro realidades y cuatro formas de ver la sanidad. El 21 de diciembre se decidirá cuál de ellas podrá pasar del papel al día a día de los ciudadanos.