Los sindicatos catalanes exigen 1.000 millones más de inversión en sanidad

Los sindicatos de clase presentan conjuntamente las propuestas para los presupuestos de 2026 de la Generalitat de Catalunya, a través de las cuales exigen 1.000 millones de euros más de inversión en sanidad. UGT y CCOO han planteado un incremento global de 3.200 millones de euros respecto al Presupuesto de 2023 y los suplementos de crédito aprobados en 2024 y 2025, teniendo en cuenta el crecimiento de los ingresos de la Generalitat y la evolución de la economía catalana.

"Hace falta incrementar los recursos para la sanidad y que esta mejora de financiación priorice el gasto en personal y la inversión en infraestructuras, garantizando una provisión adecuada de servicios", reza el documento de propuestas internas de CCOO y UGT a las nuevas cuentas.

La medida que concentra una mayor cantidad es el esfuerzo para combatir el déficit estructural del total del sistema sanitario de Cataluña, con 400 millones de euros que deben complementar los 680 millones de euros recogidos en el resto de propuestas. "Hace falta un pacto nacional para la salud que debe tener la dotación presupuestaria necesaria para su desarrollo", han señalado los sindicatos.

Esto implica un compromiso presupuestario y una apuesta para tener la dotación presupuestaria necesaria para su desarrollo. "El déficit estructural de salud de Cataluña se calcula en unos 6.000 millones de euros anuales. Para poder llegar a reducirlo en un tiempo razonable haría falta una inversión de 1.000 millones"

Inversión del 25% en Primaria

Por su parte, UGT y CCOO han pedido incrementar el presupuesto sanitario para Atención Primaria hasta el 25 por ciento siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de las sociedades científicas, que se traducen en destinar 1.235 millones de euros más a esta red asistencial. "Repartido en cuatro ejercicios presupuestarios, serían 310 millones de euros por año", han detallado.

Por otro lado, ambos sindicatos han reclamado combatir la pérdida de competitividad del sistema público de salud a la hora de retener profesionales por los bajos salarios y por las malas condiciones laborales que ofrecen en comparación con otros países.

Mejorar las condiciones laborales

UGT y CCOO también han demandado mejorar las condiciones laborales y salariales de las personas trabajadores del sector de la salud. "Hacen falta políticas de estímulo, tanto en materia salarial como en medidas sociales y de reconocimiento de los profesionales del sector que permitan recuperar el talento que han emigrado, y, al mismo tiempo, hacer que las tareas sanitarias sean atractivas para los jóvenes", han agregado. En este sentido, los sindicatos han pedido un incremento presupuestario de 150 millones de euros.

Otra de las propuestas de las organizaciones sindicales es hacer un plan de choque de salud mental que ayude a desplegar el Pacto Nacional de Salud Mental. "Es necesario que se haga con un equilibrio territorial igual que se hace con la cobertura hospitalaria, garantizando la atención de salud mental en todas las comarcas. Hace falta reducir las listas de espera y recuperar el papel real que deben tener psiquiatras y psicólogos colegiados, para garantizar que no se sustituya por otras figuras que no tienen un componente terapéutico real. Hace falta apostar por las psicoterapias antes del tratamiento farmacológico, incrementando los profesionales de psicoterapia", han detallado. Esta medida pretende dotar al presupuesto con 50 millones de euros más.

Por último, UGT y CCOO han planteado la homologación del personal del transporte sanitario del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM). Como en el presupuesto de 2023 se incluyó una partida de 70 millones de euros asignada al SEM que debía comenzar el camino de la homologación, pero, finalmente, esta partida no se dedicó a la homologación de condiciones y se quedó en el SEM, ambos sindicatos exigen que se recupere esa misma cantidad para las cuentas de 2026.