Podemos 'quita' a UPN el altavoz sanitario del Grupo Mixto en el Congreso

"Pasamos al Grupo Mixto para garantizar nuestra capacidad de hacer política en el Congreso". Con estas palabras anunciaba Javier Sánchez Serna, diputado de Podemos, su escisión de Sumar el pasado 5 de diciembre. Ahora, según ha podido saber Redacción Médica, se confirma que asumirá la portavocía del grupo en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, que antes del 'divorcio' entre Podemos y Sumar había recaído en el farmacéutico Alberto Catalán (UPN). 

La integración de Podemos en el Grupo Mixto, del que ya formaban parte BNG, Coalición Canaria y UPN, ha obligado a reestructurar las portavocías de la bancada en las distintas Comisiones de la Cámara Baja. Si el pasado 1 de diciembre este medio avanzaba la elección del farmacéutico Alberto Catalán como la voz sanitaria del grupo, veinte días después la Comisión 'pierde' peso profesional al ceder este puesto a Javier Sánchez Serna, licenciado en Filosofía. 

Serna, miembro del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, fue elegido diputado por la provincia de Murcia en el Congreso tras las elecciones generales de 2015 y reelegido en 2016. En el Congreso ejerció como portavoz en la Comisión de Educación y Deporte, portavoz de Ciencia y portavoz adjunto de Universidades hasta el final de la XIII legislatura. 

En 2019 volvió a encabezar la lista de Unidas Podemos por Murcia para el Congreso, manteniendo su escaño. Además, resultó elegido secretario tercero de la Mesa del Congreso de los Diputados y fue portavoz en la Comisión de Educación y Formación Profesional, así como en la Comisión de Ciencia, innovación y universidades, durante la pasada legislatura. 

'Ruptura sanitaria' entre Sumar y Podemos

La 'ruptura' saniraria entre Sumar y Podemos se ha cocinado a fuego lentos los últimos meses. Uno de los primeros desencuentros ocurrió cuando desde la formación morada señalaron directamente una 'laguna' en el programa sanitario de Sumar: la inclusión de un programa de actuación contra la violencia obstétrica. Este aspecto no quedaba recogido en el paquete de medidas propuesto por formación de Yolanda Díaz y desde Unidas Podemos hicieron hincapié en que parecía que había sido "olvidado" por la agrupación de la ahora vicepresidenta segunda del Gobierno.

Otro de los 'choques sanitarios' entre la formación liderada por Yolanda Díaz y la de Ione Belarra fue a causa del peso sanitario de la investidura de Pedro Sánchez. "El asunto territorial es capital y está encima de la mesa, pero no es lo único importante. Para nosotros, el proyecto sanitario y de servicios sociales sigue siendo vital", señalaban desde Sumar a Redacción Médica. La afirmación contrastaba con lo que deslizaron también desde Podemos a este medio: "Nosotros hicimos cinco propuestas, que son públicas, y ninguna de ellas tiene que ver con la sanidad".  En efecto, en esa lista que los de Belarra remitieron al PSOE de cara a negociar su apoyo, figuran congelar los alquileres, abaratar la cesta de la compra y el transporte público, subir a 1.500 euros al mes el Salario Mínimo Interprofesional, lograr “objetivos de profundización democrática” como derogar la Ley Mordaza y renovar el Consejo General del Poder Judicial, y avanzar en derechos feministas y Lgtbi. Ninguna mención expresa a asuntos sanitarios.

Además, desde Podemos elaboraron un documento en el que esbozaron su propia ruta sanitaria al margen de Sumar, avalado por sus bases. “La sanidad pública debe volver a ser la mejor del mundo y estar a la altura de sus profesionales”, reivindica la formación morada, que llama, en este sentido, a acabar con las “transferencias encubiertas” en forma de “concesiones” al sector privado. Ahora lo defenderá en solitario desde el Congreso de los Diputados.