El Gobierno ampliará el grado de Enfermería bajo demanda de la profesión

La petición del Ministerio de Universidades sobre el aumento de hasta el 15 por ciento de plazas en los Grados en Medicina ha puesto sobre la mesa el debate de un posible incremento también para la titulación de Enfermería. Un escenario que, según ha podido saber Redacción Médica a través de fuentes del Ministerio, podría materializarse si así lo demanda la profesión. “Este Ministerio, conjuntamente con el Ministerio de Sanidad, estudiará las propuestas concretas que puedan realizarse a este respecto”, aseguran estas fuentes.

Sin embargo, desde la Conferencia Nacional de Decanos de Enfermería (CNDE) hacen una llamada a la prudencia antes de proponer un incremento en el número de egresados de Enfermería en las universidades españolas. Antes de dar este paso, abogan por conocer las necesidades reales del mercado. “Lo primero que hay que plantearse es: ¿Qué pasa con nuestros egresados? ¿Dónde están?”, se pregunta Inmaculada García, presidenta de la CNDE.

“Las enfermeras españolas están muy bien formadas, por lo que son acogidas con agrado en el resto de Europa. Podemos seguir formando estudiantes, pero si se van fuera del territorio nacional seguiremos teniendo déficit de profesionales”, señala la decana, invitando a realizar esta reflexión y recordando que esta es una sociedad de libre mercado que se mueve por la oferta y la demanda.

Qué tipo de contrato se ofrece a las enfermeras o qué reconocimiento reciben, tanto profesional como salarial, es otra de las cuestiones que, según García, hay que abordar antes de emprender un incremento de plazas en el Grado.

Acreditación de profesorado en Enfermería

Por otro lado, en cuanto a la calidad formativa, la presidenta destaca que la normativa europea dicta que la formación contempla 2.300 horas prácticas, por lo que se deben “asegurar espacios” para poder cumplir este requisito.

Además, la decana pone sobre la mesa la necesidad de acreditación de profesorado enfermero dado que otra de las condiciones que establecen las directrices europeas es que los contenidos teóricos y prácticos del Grado tienen que ser impartidos por enfermeras, pero, sin embargo, la profesión se encuentra en una situación de desventaja a la hora de acreditarse.

En concreto, la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca) exige unos requisitos para la acreditación de profesores que pasan por la obtención del título de Doctor, además del reconocimiento de sexenios por méritos en la actividad investigadora. Estos estándares son los mismos que para cualquier otra disciplina de Ciencias de la Salud, a pesar de que la primera promoción de enfermeras que pudo acceder a los estudios de Doctorado fue en 2014, cuatro años después de la implantación del Grado de Enfermería en España.

En la otra cara de la moneda se encuentra el Sindicato de Enfermería (Satse), que ha reclamado al Ministerio de Universidades que se comprometa también a asumir, como ya ha hecho con los médicos, un aumento de hasta un 15 por ciento en las plazas ofertadas para el grado de Enfermería, sin necesidad de modificar el plan de estudios.