Machismo y desprecio profesional, 'combo' de la violencia contra Enfermería

Las agresiones a enfermeras siguen siendo una realidad en el sector sanitario. Los motivos por los que este colectivo se convierte en el objetivo de la ira de algunos pacientes son variados, aunque es el 'combo' machismo y desprecio por la profesión la justificación que encuentran los propios sanitarios a esta situación.

Es la conclusión que se desprende de una encuesta realizada a través de las redes sociales de Redacción Médica en la que un 58 por ciento de los más de 600 participantes creen que la combinación de esos dos motivos son los que se esconden tras el mayor número de agresiones al colectivo enfermero. Otros, el 20 por ciento, creen que no hay razones de género tras las acciones agresivas que reciben estos profesionales y que todo se debe al desprecio generalizado que sufre la profesión. La tercera opción más votada ha sido la que se refiere a otros motivos que nada tienen que ver con estas dos alternativas. Tan solo el 7 por ciento lo achaca exclusivamente al machismo.

La "sobrecarga del sistema sanitario" es una de las opciones que señalan los sanitarios como causa principal de las agresiones a los profesionales de la Enfermería. "El desconocimiento de cómo funciona el SNS" o "la falta de respecto son otros de los motivos que apuntan los sanitarios en respuesta a esta encuesta.

Otros sanitarios han querido compartir algunas de sus experiencias al ser testigos de este tipo de violencia contra el personal enfermero. Una matrona ha explicado a este periódico que "hay gente que no sabe gestionar la enfermedad que padece su familiar", un problema que puede provocar una acción violenta contra los sanitarios. "Es posible que el miedo frente a la enfermedad o la incertidumbre impacten negativamente sobre nuestro equilibrio emocional y que esto produzaca irritabilidad o agresividad contra los enfermeros", apunta otra sanitaria.

Plan integral contra la agresiones a enfermeras

Los últimos datos del Observatorio de Agresiones del Colegio General de Enfermería (CGE), correspondientes al año 2021, reflejan un total de 1.629 agresiones a enfermeras. La cifra es similar a la del año anterior, cuando se contabilizaron 1.657 agresiones. Diego Ayuso, secretario del CGE explicó que "el registro anual de agresiones siempre oscila entre las 1.500 y 1.600. Ha aumentado el número, pero eso no quiere decir que sean todas las que ocurren; esto es solo la punta del iceberg" puesto que en 2021 solo se denunciaron 61, lo que supone un 3,7 por ciento del total.

Ayuso apuntó durante la rueda de prensa de presentación de estos datos el pasado 7 de febrero que el ámbito de la Atención Primaria es donde más agresiones se registran. "También hay alta incidencia en las urgencias hospitalarias, y las consultas de salud mental, pero Atención Primaria es el ámbito en el que hay más incidencia", explicó. Santiago García San Martín, presidente del Observatorio de Seguridad Integral de Centros Hospitalarios (Osich), recordó que en las consultas de Primaria no existe la figura del director de seguridad, por lo que las enfermeras están más desprotegidas.