Enfermería tacha de "trasnochada" la visión del médico "comandante"

El presidente del Consejo General de Enfermería (CGE), Florentino Pérez Raya, ha respondido este jueves de forma tajante a la última tribuna de opinión del presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Tomás Cobo, titulada "Los médicos españoles y el siglo XXI" y publicada en Redacción Médica. En una carta dirigida al sector, Pérez Raya matiza las tesis de Cobo y advierte de que la pretensión de crear un "Estatuto Marco propio" para los médicos solo busca generar "fragmentación" y "nuevas brechas" entre profesionales. El líder de la Enfermería tacha de "trasnochada" la jerarquía que sitúa al médico como "comandante" y denuncia el intento de "vetar" a las enfermeras en la gestión sanitaria.

Pérez Raya censura la analogía utilizada por Cobo, que compara al médico con un piloto de avión y al resto del equipo con azafatas o personal de tierra. El presidente del CGE sentencia que esta metáfora no justifica que los médicos gocen de una "singularidad en sus funciones hasta el punto de que se creen normas exclusivas para ellos". Para Pérez Raya, esta visión sitúa a otros sanitarios como "subordinados", algo que considera "fuera de la realidad". Argumenta, además, que el liderazgo es una "competencia transversal" que no se puede pedir "por un simple tema de autoridad", sino que "se gana uno día a día".

Rechazo a un Estatuto exclusivo

La respuesta del CGE es contundente frente a la aspiración de un marco legal propio para los facultativos. Pérez Raya cuestiona directamente: "¿En qué ayuda eso a la sanidad y los ciudadanos?". El representante de la Enfermería avisa de que cualquier normativa debe integrar "todos los derechos y necesidades" de forma coherente para garantizar "seguridad jurídica, equidad y cohesión". En este sentido, defiende que la enfermería es una profesión con "sólida base científica", formación de Grado, especialidades EIR y acceso al doctorado, por lo que rechaza la apertura de "nuevas brechas" en el Sistema Nacional de Salud.

Otro de los puntos de fricción es la capacidad de prescripción —técnicamente denominada indicación—. Pérez Raya critica que, tras haber rubricado el acuerdo en 2017 ante el Ministerio de Sanidad, los organismos médicos ahora "paralizan e intentan judicializar las guías que dictan esas actuaciones". El CGE reprocha a la OMC sus "reticencias" a que la enfermería desarrolle sus competencias plenamente, lo que a su juicio refleja un "temor infundado" en lugar de un verdadero espíritu de colaboración. "Resulta difícil no percibir mayor comodidad en el ejercicio profesional dando órdenes desde arriba que en el trabajo codo con codo", sentencia el texto.

Frente a la defensa de la responsabilidad médica de Cobo, Pérez Raya recuerda que la vida de los pacientes está "a diario y en múltiples actos asistenciales en manos de las enfermeras". Cita específicamente los ámbitos de cuidados críticos, diálisis, urgencias o enfermería militar como ejemplos de alta responsabilidad. El CGE concluye su respuesta aclarando que la profesión no aspira a reemplazar a los médicos: "No somos ni queremos ser un 'minimédico', ni un sucedáneo de médico; solo queremos ser enfermeras/os y que se nos respete por ello".