Diccionario de enfermedades

Cansancio crónico (Astenia): causas, síntomas y tratamiento

La astenia o cansancio crónico tiene causas que van de lo físico a lo psicológico
El cansancio es una causa muy frecuente de consulta. Este estado, conocido médicamente como astenia, puede ser de aparición reciente o prolongado en el tiempo, y puede ser preferentemente físico (no tener fuerza para empezar las tareas diarias o cansarse nada más comenzarlas) o psíquico (dificultad para concentrarse).

¿Por qué estoy tan cansado? Causas de la astenia


Las causas de un cansancio de reciente aparición pueden ser múltiples dado que hay muchas enfermedades de todo tipo (infecciones, enfermedades inflamatorias, anemias, etc.) vinculadas a este síntoma. Las causas de cansancio crónico (más de 6 meses de duración) pueden ser:

Diagnóstico de la fatiga crónica: ¿hay pruebas?


En cualquier paciente que refiera cansancio, se precisa distinguir claramente si lo que tiene es realmente astenia o si se trata de dificultad para respirar (disnea), debilidad muscular generalizada (la cual se observa en enfermedades de los músculos, como la miastenia gravis o la parálisis periódica) o somnolencia.

Una buena historia clínica permite enfocar el diagnóstico, debiéndose realizar unos análisis simples para descartar diversas enfermedades. Se debe de preguntar específicamente sobre la calidad del sueño y la toma de medicinas o drogas. Por lo general, no se recomienda realizar pruebas más complejas (análisis, radiografías, ecografías, TAC, etc.), dado que no suelen aportar información y pueden confundir al médico. Solo deben solicitarse si hay sospecha de alguna enfermedad concreta. El síndrome de fatiga crónica y el cansancio crónico son probablemente la misma enfermedad, si bien para el diagnóstico de la primera se exige que el paciente cumpla una serie de criterios clínicos.

¿La astenia se cura?


Depende de la enfermedad responsable del cansancio. La astenia crónica de origen desconocido y el síndrome de fatiga crónica no ponen en peligro la vida del paciente. Sin embargo tienen un pronóstico variable, en general poco favorable. En algunos pacientes la sintomatología desaparece completamente y se recuperan del todo, si bien la mayoría suele mantener el cansancio de forma crónica, con periodos en que se encuentran mejor y otros peor. Ni la astenia crónica idiopática ni el síndrome de fatiga crónica se asocian a una mayor mortalidad o a un mayor riesgo de problemas graves en órganos importantes.

En general el pronóstico, referido a la persistencia de los síntomas, es peor en las personas de mayor edad, cuando se asocia a enfermedades psiquiátricas y cuando el paciente cree que el cansancio es debido a problemas físicos que no han sido diagnosticados por el médico.

Tratamientos para combatir el el cansancio


El tratamiento del síndrome de fatiga crónica y del cansancio crónico de causa desconocida es el mismo . Además de la necesidad de que exista una buena relación médico-paciente y una buena calidad de sueño, los tratamientos que han demostrado eficacia son:
  • Terapias conductuales cognitivas. Sesiones con un psicólogo dirigidas a mejorar las conductas que puedan llevar a la recuperación.
  • Ejercicio físico gradual.
A todos los pacientes con datos que sugieran depresión se les debe ofrecer un ciclo de tratamiento con antidepresivos.

No existe ninguna evidencia científica que demuestre que el tratamiento con vitaminas, minerales o suplementos de cualquier otro tipo mejoren el cansancio en personas que no tengan alguna deficiencia vitamínica. La mejoría que experimentan algunas personas al recibir alguno de estos tratamientos es atribuible al llamado efecto placebo.

Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.