Diccionario de enfermedades

Astenia

Causas, diagnóstico y tratamiento de la astenia
El cansancio es una causa muy frecuente de consulta al médico. Puede ser un cansancio de aparición reciente o prolongado en el tiempo, y puede ser preferentemente físico (no tener fuerza para empezar las tareas diarias o cansarse nada mas comenzarlas) o psíquico (dificultad para concentrarse).

¿Cuáles son las causas de la astenia?


Las causas de un cansancio de reciente aparición pueden ser múltiples dado que hay muchas enfermedades de todo tipo (infecciones, enfermedades inflamatorias, anemias, etc.) que se asocian a cansancio. Las causas de cansancio crónico (más de 6 meses de duración) pueden ser:
  • Psíquicas. Son las causas mas frecuentes de cansancio crónico. Incluyen la depresión, los trastornos del pánico y la somatización (es decir, cualquier problema personal, familiar, laboral o de cualquier otra índole que tengan los pacientes lo manifiestan como cansancio).
  • Alteraciones en el sueño (insomnio u otros). Estas alteraciones pueden producir cansancio durante el día. Pueden deberse a un síndrome de apnea del sueño, a problemas psicológicos o a otras enfermedades.
  • Toma de medicamentos. La toma de hipnóticos, antidepresivos, antihistamínicos e incluso betabloqueantes puede producir cansancio.
  • Anemia por cualquier causa.
  • Enfermedades crónicas del riñón (insuficiencia renal crónica), pulmón (EPOC), corazón (insuficiencia cardiaca crónica) e hígado (hepatopatía crónica) pueden producir cansancio crónico.
  • Enfermedades endocrinas como el hipotiroidismo, la hipercalcemia, la insuficiencia suprarrenal, la diabetes, etc.
  • Cánceres ocultos.
  • Infecciones crónicas, como tuberculosis, infección por el virus del SIDA, endocarditis, etc.
  • Artritis reumatoide.
  • Síndrome de fatiga crónica y fibromialgia. Son causas infrecuentes de cansancio crónico que precisan cumplir unos criterios estrictos para su diagnóstico.
  • Cansancio crónico idiopático. De causa desconocida. Aproximadamente en uno de cada 3 sujetos con cansancio crónico no se llega a conocer su causa. Muchos de ellos se tratan en realidad de síndromes de fatiga crónica que no cumplen criterios.


¿Cómo se diagnostica la astenia?


En cualquier paciente que refiera cansancio, se precisa distinguir claramente si lo que tiene es realmente cansancio o si se trata de dificultad para respirar (disnea), debilidad muscular generalizada (la cual se observa en enfermedades de los músculos, como la miastenia gravis o la parálisis periódica) o somnolencia.

Una buena historia clínica permite enfocar el diagnóstico, debiéndose realizar unos análisis simples para descartar diversas enfermedades. Se debe de preguntar específicamente sobre la calidad del sueño y la toma de medicinas o drogas. Por lo general, no se recomienda realizar pruebas más complejas (análisis, radiografías, ecografías, TAC, etc.), dado que no suelen aportar información y pueden confundir al médico. Solo deben solicitarse si hay sospecha de alguna enfermedad concreta. El síndrome de fatiga crónica y el cansancio crónico son probablemente la misma enfermedad, si bien se exige para el diagnóstico de síndrome de fatiga crónica que el paciente cumpla una serie de criterios clínicos.

¿Cuál es el pronóstico?


Depende de la enfermedad responsable del cansancio. La astenia crónica de origen desconocido y el síndrome de fatiga crónica, si bien no ponen en peligro la vida del paciente, tienen un pronóstico variable, en general no muy favorable. En algunos pacientes la sintomatología desaparece completamente y se recuperan del todo, si bien la mayoría suele mantener el cansancio de forma crónica, con periodos en que se encuentran mejor y otros peor. Ni la astenia crónica idiopática ni el síndrome de fatiga crónica se asocian a una mayor mortalidad o a un mayor riesgo de problemas graves en órganos importantes.

En general el pronóstico, referido a la persistencia de los síntomas, es peor en las personas de mayor edad, con menor nivel de educación, en la enfermedad de muy larga duración, cuando se asocia a diversas enfermedades psiquiátricas y cuando el paciente cree que el cansancio es debido a problemas físicos que no han sido diagnosticados por el médico.

¿Cuál es el tratamiento de la enfermedad?


El tratamiento es el de la enfermedad responsable del cansancio.

El tratamiento del síndrome de fatiga crónica y del cansancio crónico de causa desconocida es el mismo (ver síndrome de fatiga crónica). Además de la necesidad de que exista una buena relación médico-paciente y una buena calidad de sueño, los tratamientos que han demostrado eficacia son:
  • Terapias conductuales cognitivas. Se trata de sesiones con un psicólogo dirigidas a mejorar las conductas que puedan llevar a la recuperación.
  • Ejercicio físico gradual.
A todos los pacientes con datos que sugieran depresión se les debe ofrecer un ciclo de tratamiento con antidepresivos.

No existe ninguna evidencia científica que demuestre que el tratamiento con vitaminas, minerales o suplementos de cualquier otro tipo mejoren el cansancio en personas que no tengan alguna deficiencia vitamínica. La mejoría que experimentan algunas personas al recibir alguno de estos tratamientos es atribuible al efecto placebo (mejoría psicológica).
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.