Otros artículos de Margarita Alfonsel

14 jun. 2015 17:17H
SE LEE EN 4 minutos
La industria europea de tecnología sanitaria agrupada en Medtech (Alliance of European Medical Technology Industry Association) ha emprendido una iniciativa interesante: establecer la “semana europea de la tecnología sanitaria” con el objetivo de centrar nuestra atención en este sector, con mensajes de valor hacia la población sobre el contenido estratégico que para las instituciones sanitarias tiene la tecnología médica, y cómo influye directamente en la salud y en la calidad de vida de las personas.

Con frecuencia, en mis intervenciones señalo que las especialidades médicas que más se han desarrollado han sido las ligadas a mayores desarrollos farmacológicos y tecnológicos y, compartiendo esta afirmación con especialistas de distintas disciplinas, encuentro una confirmación que nos satisface, como no podía ser de otro modo, porque se basa en el reconocimiento de muchos profesionales hacia sectores industriales comprometidos con la salud.

La industria de la tecnología sanitaria es, por principio, dinámica e innovadora y busca y aporta soluciones para el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de las patologías y también desarrolla productos y servicios que inciden directamente en la calidad de vida.

Estamos en un entorno complejo por el constante debate sobre la sostenibilidad del sistema sanitario, y es obligada una reflexión compartida de todos los agentes comprometidos con él para reconfigurar el modelo en base a los principios que marca el entorno en el que hoy nos movemos: una población cada vez más envejecida y, con ello, una alta incidencia de enfermos crónicos y pluripatológicos y personas dependientes, para centrarnos en la búsqueda de la eficiencia como elemento fundamental y prioritario que puede ayudarnos a mantener y mejorar nuestro sistema y trasladar a las siguientes generaciones un modelo universal, equitativo, accesible, eficaz, eficiente e innovador, al servicio del paciente como eje central del Sistema.

La tecnología sanitaria está focalizada en la prevención y el diagnóstico temprano, en los dispositivos de seguridad que minimicen infecciones no deseadas, en tratamientos cada vez menos invasivos, precisos y eficaces con tecnologías sofisticadas al servicio del profesional.

También está comprometida con el seguimiento y control de los pacientes crónicos y la rehabilitación a través de productos y tecnologías innovadoras que facilitan la incorporación más rápida del paciente a la vida laboral, y finalmente la tecnología sanitaria está identificada con la atención domiciliaria y el cuidado del paciente allí donde se encuentre, y para ello existen servicios, productos y dispositivos que nos ayudan en la vida diaria y que facilitan el cuidado de los pacientes con mayor o menor grado de dependencia.

Tenemos que insistir en la necesaria formación del ciudadano en hábitos de vida saludable que colaborarán en la gestión de su salud y de su enfermedad y en su corresponsabilidad. Por ello debemos establecer la educación para la salud como una asignatura básica que colabore a esa gestión eficiente y eficaz protagonizada por cada uno de nosotros.

Y una vez más, debemos contar con las tecnologías de la información y comunicación y las posibilidades que nos ofrecen para alcanzar los objetivos propuestos.

Ya hoy es una realidad la utilización generalizada de la robótica aplicada a distintos campos de la Medicina, la nanotecnología, los dispositivos denominados “prendas inteligentes”, los biomarcadores… y el futuro está en la Medicina personalizada dirigida a un paciente concreto con unas características particulares que le hacen “único”; en la Medicina predictiva, que lleva a la identificación de mapa genético y su utilización para predecir posibles enfermedades abordables antes de su manifestación; en la Medicina participativa por el protagonismo que el paciente está alcanzando en la toma de decisiones sobre su propia salud y enfermedad y en la medicina poblacional, aplicando las técnicas del big data en la sanidad.

En definitiva, esta semana seremos aún más conscientes de lo que la tecnología sanitaria aporta a nuestras vidas y sobre todo valoraremos lo que puede colaborar a preservar nuestra salud y a tratar nuestra posible enfermedad.

  • TAGS