"Lo que no vale en política sanitaria es que engañen a los médicos"

Pediatra, entrenador de natación, director y fundador de Grupo IHP Pediatría y vicepresidente de una ONG de ayuda a África. Estas son algunas de las claves que podría definir la trayectoria de Alfonso Carmona, presidente del Colegio de Médicos de Sevilla, quien a día de hoy sigue recalcando que la Medicina es lo mejor que le pudo pasar en su vida. En estos últimos cuatro años, la política y gestión sanitaria han ocupado gran parte de su tiempo, lo que le ha hecho defender como en la gestión de la salud “lo que no nos vale es que nos engañen”.

Desde un punto de vista personal, a la vez que da voz al colectivo de médicos sevillanos, Carmona ha repasado junto a Redacción Médica los últimos avances en la política sanitaria andaluza, con el foco puesto en todo lo que queda por hacer y lo que “debemos dejarle a las nuevas generaciones”.

¿Cómo ha sido dirigir el Colegio de Médicos de Sevilla en tiempos de pandemia?

Estos últimos cuatro años han sido realmente extraordinarios, porque con el tema de la pandemia todo ha sido novedoso, nadie sabía cómo actuar ni política, ni socialmente con lo cual todo ha sido nuevo. Hay que destacar que tuvimos dos episodios importantes, como fueron la listeriosis y la fiebre del Nilo, ya parecía que estábamos en Egipto con las plagas, pero la verdad es que han sido interesantísimos.

¿Cómo se diferencia la política sanitaria del ejercicio médico por vocación?

Yo ante todo soy médico, y dentro de ser médico soy Pediatra. En cuanto a la gestión política, siempre digo que hay que ir con la verdad por delante. Tenemos la libertad de hablar y a la gente hay que decirles la verdad. Sabiendo que hay cosas que se pueden hacer y otras que no, pero siempre diciendo la verdad y no dar la callada por respuesta. Si un político ha dicho que va a hacer algo debe hacerlo y si no lo puede hacer en ese momento al menos debe decir el motivo, para intentar buscar soluciones. Lo que no nos vale en política saniatria es que nos engañen.

¿En Andalucía se ha dado la cara en política sanitaria?

En Andalucía se han hecho muchas cosas en este tiempo. Se ha acabado con los contratos basura de días, se han convocado OPES y se están liberando cada dos años, se ha estabilizado el trabajo sanitario, construido hospitales.. todo esto es muy importante porque da estabilidad a los médicos para que estén en un puesto donde puedan tratar a los pacientes con una continuidad. Los médicos tienen que estar en un puesto fijo, con contratos de largo recorrido.

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"Los médicos tienen que estar en un puesto fijo, con contratos de largo recorrido"

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¿Qué valoración da de la gestión de Jesús Aguirre?

Jesús Aguirre se sentía muy cómodo entre los profesionales sanitarios y lo ha hecho muy bien. Ha conectado con los pacientes y con todos. Políticamente ha acertado y con nosotros también. Cambiar por cambiar, si funcionaba bien no lo entiendo, salvo si ha sido petición propia de él. Hay que entender que ha tenido una situación extraordinaria y ha sabido conectar bien, con un diálogo fácil. Tenemos que continuar con esa inercia para realizar todas las cosas que él y su equipo tenían en la mente. Al ser médico de Familia conoce cómo funciona todo, desde abajo hasta la dirección y eso es muy importante. Detrás de uno viene otro, y ya veremos como lo hacen, pero para nosotros lo ha hecho tan bien que si la presidencia es como un “premio” lo vemos perfecto.

Nombramiento de Catalina García: "Un enfermero no debe estar al frente de esa Consejería"

¿Cómo valora el nombramiento de Catalina García al frente de la Consejería de Salud y Consumo?

Se trata de un nombramiento que desde el Colegio de Médicos de Sevilla no vemos de recibo. Es una valoración personal que comparten muchos médicos. Creemos que la anterior Consejería ha sido de las mejores de España, se han hecho cosas muy bien. No estoy en contra de nadie, pero si tenemos algo muy bueno, tenemos que intentar mejorarlo no cambiarlo. No estoy en contra de la persona pero un enfermero no debe estar al frente de esa Consejería, donde tiene que haber un nivel científico y un liderazgo importantísimo para toda la sanidad, que en mi opinión un liderazgo que venga desde arriba siempre es mejor y, en este caso, creo que no es de recibo como se han hecho las cosas.

¿Qué retos tiene actualmente Andalucía en sanidad?

Hemos conseguido la eliminación del complemento de exclusividad, por el que dos médicos haciendo lo mismo cobraban distinto. Se han subido las guardias de una forma interesante y se está trabajando en la carrera profesional. Esto no para y hay que seguir avanzando muchísimo para que tengamos lo que se merecen los sanitarios. Pero en la privada, los profesionales están alejados de la mano de Dios, llevamos 30 años sin poner unos baremos adecuados a los tiempos que vivimos, con contratos y bajas laborales que no tienen. Todo lo que se deja de trabajar se deja de cobrar.

La situación de la privada es un tema que hemos lanzado al Consejo Andaluz para tomar cartas en el asunto. Queremos reunirnos con las compañías para poner en valor la actuación del médico dentro de la privada. Hay dos formas de hacerlo, por las buenas y por las malas. Por las buenas nos sentamos y dialogamos. Si es por la malas, la guerra no es buena para nadie.

En la gestión sanitaria del Gobierno ¿Se debe atender la sanidad pública junto a la privada?

El consejero de Sanidad debe atender a la sanidad pública y privada. Yo siempre he defendido la sanidad pública, pero no entiendo que no se defienda la privada. En la Pediatría privada vemos muchísimos niños al cabo de un día, eso es repartir el trabajo, con lo cual todos podemos hacer mejor nuestra labor porque no estamos sobrecargados. Nos hemos formado todos en el mismo sitio y hacemos las cosas del mismo modo. La situación que se da ahora es que, en comparativa. Aunque la sanidad pública está muy mal pagada, la sanidad privada está muchísimo peor.

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"Aunque la sanidad pública está muy mal pagada, la sanidad privada está muchísimo peor"

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En cuanto a la Medicina de Familia, ¿A qué cree que se debe la falta de residentes interesados en esta especialidad?

El médico de Familia es el médico por excelencia, porque está en contacto directo con el paciente que lo va a conocer personal y profesionalmente. Es cuando hay esa relación médico-paciente cuando se produce lo más entrañable de nuestra profesión. Ahora se está perdiendo porque no contamos con el tiempo y medios necesarios para aplicar esta Medicina. No se puede ver a un paciente en 3 o 4 minutos y estar cambiando de centro. Lo ideal sería la posibilidad de repartirnos los pacientes en nuestras ocho horas como mejor veamos los médicos y, después, ver el rendimiento del profesional, porque todos tenemos que ser consecuentes con nuestro trabajo. Al paciente hay que tratarlo sin prisas y sin pausas.

¿Cuáles han sido sus momentos clave como médico?

He vivido grandes momentos dentro de la Medicina. En mi juventud quería ser piloto de caza, era mi primera opción, la carrera militar. Pero en ese momento mi familia requería otra cosa. Me vine a Sevilla y empecé Medicina y bendita sea la hora. Se lo digo a muchos médicos que empiezan y eligen otra especialidad a la que quieren, cualquier especialidad que conozcas y ejerzas es fantástica y disfrutas con ella. Yo puedo decir que desde que empecé la carrera cambió mi percepción de todo, hice la carrera en Sevilla y aprobé la especialidad en Linares, donde estuve cinco años y me divertí muchísimo trabajando. La verdad es que puedo decir que la Medicina me ha llenado de satisfacción.

¿Qué cambios más significativos ha notado en la Medicina de cuando empezó y la actual?

Ahora mismo la gente sale muy bien formada y pero tienen algo menos de tiempo. Cuando yo empecé en los ambulatorios se atendía a todo el mundo, llegaban sin citas y estabas el tiempo que debías con cada paciente. Hay dos momentos clave para mi que tiene la Medicina, el primero fue cuando comencé a desarrollarla y otro, magnífico, ha sido cuando empecé con la ONG de ayuda al tercer mundo, concretamente llevo 18 años yendo a África subsahariana, y esos momentos de satisfacción en los que recibes el cariño es indescriptible e inconmensurable. Cuando me trasladé a Sevilla, uno de mis objetivos era que en la Medicina Privada se diera la misma oferta de servicios que en la pública, pues entonces se estilaba solo una única consulta. Empecé en el Hospital Sagrado Corazón y luego me sumé con la doctora Morillo y el doctor Peralta, logramos hacer lo que hoy se considera uno de los mejores equipos de Pediatría de España, damos una oferta de servicios de todo tipo, con más de 300 especialistas. Ese es mi mayor orgullo, haberlo pensado, desarrollarlo y, hoy, disponer de los grandes profesionales que están con nosotros. Mi orgullo son mis compañeros, nunca han trabajado para mí sino junto a mi.

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"Yo aquí no he venido a nada más que a intentar ayudar a todo aquel que esté colegiado y me haya pedido ayuda"

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¿Es ese un modelo que ha aplicado a su gestión como presidente del Colegio de Médicos de Sevilla?

Sí, trabajamos en un equipo de 13 compañeros. Como objetivos, quiero terminar de gestionar muchos avances, donde la Medicina pública es un pilar fundamental, aunque necesitamos muchos años para mejorarla. Entre mis retos más inminentes está el terminar con la gestión de las demandas en torno a la sanidad privada, dejando a mis compañeros mejor de lo que están ahora, si eso lo consigo sería la mayor satisfacción, la cuarta que me ha dado la Medicina, y el haber hecho las cosas bien. Yo aquí no he venido a nada más que a intentar ayudar a todo aquel que esté colegiado y me haya pedido ayuda. Llegué sin ninguna necesidad pero sí para intentar ayudar a todos, dejando un legado mejor a las nuevas generaciones.

Para finalizar, un mensaje para los futuros médicos.

Les diría que vean siempre al paciente como a alguien especial. Tienen que darle esa pátina de paciencia, mirarle a los ojos, darle cariño y explicarle las cosas. Si tú no pones corazón en cada uno de tus pacientes será difícil que seas un buen médico.