Javier Leo. Madrid
Además de España, que ha estado representada por el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, la estrategia contará con el liderazgo de Italia, Francia, Grecia, Malta y Chipre, los países más afectados por estos movimientos migratorios. Uno de los objetivos primordiales será evitar la exposición de las poblaciones europeas a los posibles problemas de salud que puedan derivarse de la falta de acondicionamiento de los campamentos de refugiados, como el de Lampedusa (Italia), donde ya se ha declarado la alerta sanitaria por posibles epidemias. En concreto, el plan de acción europeo pretende solventar algunos problemas específicos, como la falta de agua corriente y saneamiento en Lampedusa, la falta de recursos sanitarios en Malta para atender a los inmigrantes y la saturación de los centros de detención en Grecia. Para atender a las personas procedentes de Túnez, Libia y Egipto, Europa quiere poner en marcha un plan de emergencia sanitaria, que coordine y protocolice las actuaciones en todo el Mediterráneo. Según explicó durante su discurso la directora de la OMS en Europa, Zsuzsanna Jakab, “necesitamos asegurar que nuestros sistemas sanitarios son capaces de manejar este éxodo. Todos estos inmigrantes viven en unas condiciones deplorables y deberían tener el acceso oportuno a servicios sanitarios de alta calidad, particularmente los más vulnerables”. “Es de vital importancia que todos reciban una correcta asistencia sanitaria”, ha enfatizado. |