Sede del Ministerio de Sanidad.
El Ministerio de Sanidad trabaja en un
plan operativo para actualizar la Estrategia en Cuidados Paliativos 2015-2020 -con varios años de retraso- mejorando la coordinación asistencial entre regiones y disminuyendo la "variabilidad" de criterios. La idea, según trasladan fuentes del ministerio a
Redacción Médica, es elevarlo al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud “para
solicitar el más alto nivel de compromiso por parte de las comunidades autónomas”. Con ello, en el ministerio vienen a desmarcarse una vez más de la posibilidad de impulsar una
ley específica de cuidados paliativos, principalmente porque, según recuerdan, en España, la atención a los pacientes con enfermedad avanzada y final de vida “es una prestación sanitaria claramente descrita en la legislación española” desde los años 90. “Consideramos que el cuadro normativo actual cubre las necesidades de los cuidados paliativos”, zanjan.
La ministra Mónica García insistió recientemente en que su ministerio continuará impulsando cuantos protocolos y medidas sean necesarios para
garantizar una muerte digna dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS). Lo hizo durante la rueda de prensa posterior al primer Consejo de Ministros de junio, al contestar una pregunta de los periodistas sobre el
caso del pediatra el Hospital Universitario de Cruces, en Barakaldo, que anunció que se tomaría “un descanso profesional” tras
ser apercibido verbalmente por sus superiores por dar cuidados paliativos a una niña de cuatro años fuera de su horario laboral.
En respuesta a una pregunta escrita del PP en el Congreso, Sanidad ya vino a descartar en diciembre de 2023 la
posibilidad de trabajar en una Ley de Cuidados Paliativos defendiendo que el marco legislativo vigente, junto a las Estrategias de Salud y las Guías de Práctica Clínica consensuadas en el Consejo Interterritorial,
garantizaban “los cuidados paliativos integrales” a “todo paciente que presente una enfermedad avanzada, independientemente de la patología de base”.
Para entonces, la
actualización de la Estrategia 2015-2020 ya acumulaba más de un año de demora. Aunque, tal y como avanzó este medio a mediados de 2022, la intención del Gobierno -
siendo ministra de Sanidad Carolina Darias- era empezar a elaborar el nuevo documento en noviembre de ese mismo año, el informe de evaluación no se publicó hasta en enero de 2023, cuando el objetivo inicial era tenerlo meses antes, en septiembre u octubre de 2022. Ya en 2024, con Mónica García como titular del departamento, llegó otro informe de evaluación, el de los
criterios de atención de Cuidados Paliativos Pediátricos de 2014.
El recorrido legislativo de los cuidados paliativos en España
La postura de Sanidad respecto a finales de 2023 no ha cambiado. “En España, la atención a los pacientes con enfermedad avanzada y final de vida es una
prestación sanitaria claramente descrita en la legislación española”, insisten fuentes ministeriales, que añaden que esa circunstancia ya se da “en gran parte de los países desarrollados”.
La primera vez que se legisló en España sobre cuidados paliativos fue en 1995, en el Real Decreto sobre ordenación de prestaciones sanitarias del SNS. Tras ello, llegó el primer
Plan Nacional de Cuidados Paliativos, sellado el 18 de diciembre de 2000 pero publicado en 2001. Dos años después salió adelante la Ley de Cohesión y Calidad del SNS, que “incluye la
atención paliativa a enfermos terminales tanto en el ámbito de la Atención Primaria como en el de la especializada”, apuntan desde el ministerio. El posterior Real Decreto de 2006 que articuló la cartera de servicios comunes del SNS “incluye la atención a los pacientes con enfermedad avanzada y final de vida”.
La primera Estrategia en Cuidados Paliativos nacional se aprobó el 14 de marzo de 2007 en el pleno del Consejo Interterritorial, algo que Sanidad considera “un hito importante” en el desarrollo legislativo sobre la materia. “La Estrategia plantea una serie de objetivos y recomendaciones enmarcados en cinco líneas estratégicas -
Atención Integral, Organización y Coordinación, Autonomía de los Pacientes, Formación e Investigación- que buscan dar respuesta a las necesidades de población española en materia de cuidados paliativos, de manera que se garantice un acceso equitativo a los mismos y una atención de calidad”, resumen desde el ministerio. Esa primera Estrategia se actualizó en 2011 de cara al periodo 2010-2014 La última revisión es, hasta ahora, la del marco 2015-2020.
El papel de las CCAA en los cuidados paliativos
Pero todo ello no es sino la base de la que partir para hacer efectiva esa asistencia. Desde el gabinete ministerial recuerdan que las comunidades autónomas, sobre las que recaen las competencias en materia de salud, son las que “establecen los criterios organizativos y de prestación de la atención” en sus respectivos planes estratégicos. He ahí el actual quid de la cuestión. Las mismas fuentes ministeriales reconocen “la
necesidad de disminuir la variabilidad entre comunidades autónomas, coordinar mejor la atención y avanzar en cuidados de calidad”. De ahí que se apueste por enfocar el plan operativo para la nueva Estrategia en Cuidados Paliativos desde esa perspectiva. El Consejo Interterritorial tendrá la última palabra al respecto.
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