La ministra de Sanidad, Mónica García.
Ministerio de Sanidad y los sindicatos de médicos continúan con las espadas en ristre a falta de apenas cuatro días para que tenga lugar la
huelga organizada por la CESM y SMA para presionar por un marco laboral específico de los facultativos y exteriorizar su rechazo a la
propuesta de Estatuto que se les ha trasladado por parte del departamento de
Mónica García. A consultas de
Redacción Médica, la propia ministra se ha referido este lunes a un conflicto que refleja, a su parecer, una
“disonancia” entre el transcurso de las negociaciones con las centrales (que, según sus palabras, “están yendo bien”) y la postura de los convocantes de la huelga. “No sé si es que los intereses no son los mismos, si no es llegar a un buen texto”, ha deslizado.
La mandataria progresista endurece el tono hacia
CESM y SMA, que ultiman los preparativos de cara a una huelga de la que se desconocen todavía los
servicios mínimos. La convocatoria de paros culmina la ‘ruptura’ entre Sanidad y estas centrales, que han visto agotada su capacidad para reforzar las condiciones laborales del colectivo de facultativos en las
reuniones del Ámbito de Negociación, en las que se debate la
actualización del Estatuto Marco (en este foro solo está representado CESM).
Para Mónica García, el escenario que ‘venden’ los sindicatos médicos difiere con el que se proyecta en las cumbres del Ámbito y con el contenido del
nuevo borrador de Estatuto Marco, cuyas claves fueron avanzadas por este periódico.
Consultada al respectoi durante la presentación de este lunes de una campaña para la
contención de Enfermedades de Transmisión Sexual (ITS), la ministra de Sanidad ha incidido en que su propuesta “viene a resolver muchos de los problemas que tenía el anterior texto”, aprobado en 2003. En concreto, ha aludido a la derogación de las
guardias de 24 horas, la no necesidad de ‘devolver’ esas horas de guardia, el blindaje de los profesionales como
figuras de autoridad y la celebración de Ofertas Públicas de Empleo (OPE) cada dos años, “no cada 15, como hasta ahora”. Asimismo, ha apuntado que la última propuesta que se trasladó a los sindicatos ampara el desarrollo de un capítulo específico para médicos.
“Es un texto en el que se incluyen novedades y garantías para que los profesionales puedan tener unas
buenas condiciones de trabajo -ha explicado-. Pero hay una disonancia entre las
razones y motivaciones que están llevando a un sindicato a ir a la huelga con la negociación del nuevo texto; yo no sé si es que los intereses no son los mismos”.
CESM y SMA insisten en que el Estatuto es “inaceptable”
Este mismo lunes, CESM y SMA han emitido un comunicado en el que vuelven a catalogar de “
inaceptable para la profesión médica y facultativa en general” el texto de Estatuto Marco de Sanidad, que, aseguran, “mantenía inalterada la estructura del
régimen de jornada y horarios” del código laboral actual.
“Introducía un sistema de clasificación profesional que nos equiparaba a los médicos y facultativos al resto de los graduados, devaluando nuestra formación, especialización y responsabilidad específica; incorporaba la obligatoriedad de la
exclusividad para una parte del colectivo; y omitía cualquier referencia a la regulación de la jubilación y al cómputo de las horas de guardia a efectos de cálculo de la edad de jubilación”, reza el comunicado.
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