"La Ley del Medicamento fragmenta la responsabilidad y liderazgo médico"

El borrador del anteproyecto de la Ley de los Medicamentos y Productos Sanitarios no deja de suscitar polémica. La Organización Médica Colegial (OMC) y la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme) presentaron alegaciones contra el previsible articulado de la normativa semanas atrás. A la espera de la valoración de estas a nivel gubernamental, las entidades han aprovechado para explicarlas y valorar el impacto de dicha normativa en el proceso asistencial y la labor de los facultativos. "Pese a que esta ley es constructiva, hay cosas a mejorar", ha destacado el presidente de la OMC, Tomás Cobo. "Y es que hay puntos que pueden interferir en las competencias de las profesiones sanitarias", ha agregado.

El máximo representante de la profesión ha puntualizado que la atención a pacientes es multidisciplinar, pero "el liderazgo de los equipos debe estar en manos de los médicos", algo que se diluye en el borrador de la futura normativa. Para ello, se apoya en los seis años de formación de los egresados de Medicina. "Este tiempo de instrucción aporta seguridad clínica", ha reflexionado.

Un punto de vista con el que ha coincidido el coordinador del Observatorio de la Prescripción de la OMC, Pedro Hidalgo. En general, una opinión que vertebra al conjunto de la profesión facultativa. Lo mismo sucede con el articulado momentáneo de la normativa. "Han logrado que todos los médicos estemos de acuerdo en que no estamos de acuerdo con este borrador", ha apostillado. "Pese a que hay puntos positivos en la normativa, vamos a realizar una oposición conceptual al texto", ha añadido la vicepresidenta primera de la entidad colegial, María Isabel Moya.

Crítica a la prescripción enfermera

Uno de los puntos más comentados del borrador de la Ley de los Medicamentos y Productos Sanitarios es la ampliación de la competencia prescriptora a enfermeras y fisioterapeutas. Y es que hasta la fecha tan solo médicos, odontólogos y podólogos están capacitados de forma completa para llevar a cabo esta función. "Prescribir no es escribir", ha comenzado Hidalgo.

El coordinador del Observatorio de la Prescripción de la OMC ha apuntado que solo los facultativos cuentan con la experiencia y formación suficiente para poder asumir esta competencia. "La prescripción es sagrada para nosotros. Es más, se trata de nuestra actuación más difícil", ha remarcado. Según su ponencia, el médico es el único profesional que puede asumir el diagnóstico previo a la administración de un fármaco y el seguimiento de la pauta terapéutica.

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"Han logrado que todos los médicos estemos de acuerdo en que no estamos de acuerdo con este borrador", ha resaltado Hidalgo

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Además, la vicepresidenta primera de la OMC ha compartido que el texto es confuso en el apartado de la prescripción y cae en contradicciones con el motivo principal de la actualización normativa. "Se habla que la ley busca mejorar el acceso a la innovación y arreglar los desequilibrios del mercado farmacéutico. No entendemos que aportará descentralizar esta competencia. Lo que se debe hacer es facilitar el acceso al médico y potenciar el número de especialistas", ha indicado Moya. Para los ponentes, este cambio fragmentará la "responsabilidad médica y creará un conflicto entre las profesiones".

Un punto de vista que difiere del expresado por el Consejo General de Enfermería (CGE). Dicho organismo recalca que las enfermeras están capacitadas para llevar a cabo esta función, además de señalar que la ley ya ampara su trabajo con los fármacos. "Nuestra idea no es ir en contra de nadie, ya que reconocemos el valor de todas las profesiones. Simplemente buscamos lo mejor para el paciente", ha añadido Cobo.

Puntos a trabajar

Más allá de la prescripción, los representantes de la profesión médica han enumerado otros puntos a mejorar en el presente borrador. Hidalgo ha remarcado que la norma confunde "eficacia con seguridad" de los medicamentos, lo que perjudica el uso racional de los preparados. A su vez, Moya ha agregado que debería desaparecer la denominación de los productos homeopáticos como medicamentos. "Sin duda, se ha perdido la oportunidad de introducir esta denominación", ha añadido.

Por su parte, la presidenta de Facme, Cristina Avendaño, ha lamentado que las modificaciones no impulsen el rol de "responsabilidad" de este perfil sanitario. En este sentido, se debería remarcar el papel del médico en la evaluación de los medicamentos y tecnologías a incoporar en el Sistema Nacional de Salud (SNS), por ejemplo, a través de la designación de especialistas en una determinada patología en los equipos que abordan la autorización de los fármacos que las tratan. Asimismo, ha apoyado que se garantice la dispensación de la marca prescrita por el facultativo, por lo que hay que tener cuidado con las sustituciones que en ocasiones se realizan en las oficinas de Farmacia. "La ley debe salir mejorada", ha apuntado.

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"La ley debe salir mejorada del proceso de alegaciones", ha recalcado Avendaño

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Pese a todo, la representante de las sociedades científicas ha remarcado que la normativa también tiene puntos positivos, como la aceleración del acceso precoz a medicamentos recién comercializados y necesarios para el tratamiento de determinados pacientes, a través de un sistema de financiación provisional, antes de que se certifique la aportación económica gubernamental definitiva. "Al final, estamos a favor de la actualización de este texto", ha remarcado Avendaño.

El objetivo de la profesión es mantener una reunión con los delegados del Ministerio de Sanidad antes de la aprobación del nuevo borrador, según ha indicado la presidenta de Facme. Un espacio en el que explicar la importancia de las alegaciones presentadas para mejorar no solo el desempeño de sus funciones, sino también la asistencia al paciente.