La inmunoterapia, desarrollada en el linfoma y en el mieloma múltiple, gana importancia en el paciente adulto mayor

La inmunosenescencia, detrás de la prevalencia de neoplasias hematológicas
La nueva presidenta del Grupo Español de Hematogeriatría, Mónica Ballesteros


16 feb. 2022 13:20H
SE LEE EN 3 minutos
La nueva presidenta del Grupo Español de Hematogeriatría (GEHEG) y especialista del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, Mónica Ballesteros Andrés, ha afirmado que la hematogeriatría se ha convertido en un factor clave para mejorar la atención médica al paciente mayor con patologías hematológicas, especialmente con cáncer hematológico.

En formato virtual la GEHEG, organismo de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH), ha llevado a cabo el VIII Workshop de Hematogeriatría con la participación de los expertos más importantes del ámbito nacional. En esta edición, gana importancia la inmunoterapia en el paciente adulto mayor. La jornada de trabajo aborda la inmunosenescencia o envejecimiento del sistema inmune, así como el modelo VIVIFRAIL para la prevención de la fragilidad y las caídas en las personas mayores.

La inmunoterapia está más desarrollada en el linfoma y en el mieloma múltiple, por lo que el programa del GEHEG añade la valoración de la fragilidad en cada una de estas patologías, además de la revisión de los datos en el paciente adulto mayor. Asimismo, se incluye una ponencia de la terapia celular, desde el trasplante alogénico de progenitores hematopoyéticos hasta los CAR-T en el paciente anciano o adulto mayor.

Ballesteros explica que la misión del Grupo GEHEG a corto plazo es “formalizar la hematogeriatría como una disciplina transversal tanto en Hematología como en Geriatría, aunando fuerzas de ambas especialidades para mejorar la atención médica a los pacientes adultos mayores con patologías hematológicas. Cada vez hay más evidencia del papel del sistema inmune en el desarrollo de tumores y la inmunosenescencia explicaría en parte el aumento de la prevalencia de la mayoría de las neoplasias hematológicas en el paciente adulto mayor”.

Las novedades relacionadas con el linfoma y mieloma múltiple


Durante la reunión, los expertos indican la necesidad de prescribir ejercicio físico en el paciente hemato-oncológico. El objetivo es prevenir la fragilidad y, en consecuencia, aumentar la resiliencia para optimizar el reto terapéutico del paciente anciano con neoplasia hematológica.

El encuentro dirigido por el Grupo Español de Hematogeriatría aborda también las novedades presentadas recientemente en cuanto al linfoma y el mieloma múltiple. En concreto, la directora Ballesteros se refiere a la oferta de supervivencia libre de progresión a pacientes con linfoma en recaída o refractarios. “Ya tenemos aprobados polatazumab y tafasitamab para los pacientes con LDCBG R/R no candidatos a TASPE. Desde hace pocos años hemos conseguido experiencia con los CAR-T aprobados en determinados subgrupos histológicos de linfomas, concretamente LBDCG R/R y LBPM, después de dos o más líneas de tratamiento sistémico”, afirma la especialista.

Según afirma Ballesteros, en un futuro a corto plazo se incrementarán los subgrupos histológicos con indicación de CAR-T y en LBDCG se valorará adelantar la línea el tratamiento con esta terapia y se aprobarán nuevos fármacos, como los anticuerpos biespecíficos. Por lo que respecta al mieloma múltiple, está aprobado el belantamab (inmunoconjugado) para pacientes que ya hayan recibido IMIDS, inhibidores del proteosoma y anti-CD38 y están a punto de entrar en práctica clínica los CAR-T y los anticuerpos biespecíficos con resultados muy prometedores.

Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.