Diccionario de enfermedades

Calambres nocturnos

¿Cómo se diagnostican los calambres nocturnos?
Los calambres nocturnos son un problema frecuente que, ocasionalmente, puede producir insomnio. Consisten en dolores musculares localizados en los pies y en las piernas, habitualmente en los gemelos, que aparecen mientras se está en la cama.

¿Cuál son las causa de los calambres nocturnos?


En la mayoría de las ocasiones la causa de los calambres nocturnos es desconocida. En algunos casos pueden ser debidos a:
  • Problemas de los pies o de las piernas (pies planos u otra anomalía).
  • Malas posiciones durante el día (estar mucho tiempo sentado o en una mala posición, trabajar o pasar mucho tiempo de pie sobre suelos de hormigón, etc.).
  • Enfermedades que cursan con alteraciones musculares o de la postura (enfermedad de Parkinson, enfermedades de los nervios o de los músculos).
  • Deshidratación (toma de pastillas para orinar, sudoración excesiva sin reponer la sal, diarrea, ejercicio intenso o tratamiento con hemodiálisis).
  • Enfermedades metabólicas como diabetes, hipotiroidismo, alcoholismo, hipocalcemia (calcio bajo en sangre) o hipomagnesemia (magnesio bajo en sangre), etc.
  • Toma de determinados medicamentos, como diuréticos (medicinas para orinar), beta-bloqueantes, anticonceptivos, broncodilatadores inhalados, sedantes y otros muchos.
  • Falta de riego a las piernas (enfermedad arterial periférica).
  • Asociados a ejercicio.
  • En las embarazadas puede haber calambres por falta de magnesio.

¿Cómo se diagnostican?


El diagnóstico de los calambres nocturnos es clínico. Son calambres dolorosos que, si bien no son importantes desde el punto de vista de comprometer la salud del paciente, pueden llegar a ser muy molestos. Si son muy frecuentes se recomienda realizar un análisis de sangre para descartar problemas como calcio o magnesio bajos en sangre.



¿Cuál es el tratamiento de los calambres nocturnos?


En el momento en el que se produzca un calambre se debe recomendar:
  • Estirar el músculo del pie o de la pierna que se ha contraido.
  • Caminar.
  • Aplicarse agua caliente en la zona durante varios minutos.
  • Darse un masaje con hielo.
Para evitar nuevos calambres se pueden recomendar:

Medidas no farmacológicas
  • En pacientes que llevan una vida sedentaria, es decir, que se mueven poco, se recomienda realizar algún ejercicio antes de descansar, como por ejemplo unos minutos de bicicleta estática.
  • Ejercicios de estiramientos de piernas.
  • Utilización de calzado adecuado durante el día.
  • Mantener las sábanas flojas (no muy metidas) en la zona de los pies.
  • Mantener una buena hidratación (beber suficiente agua) y evitar el alcohol y la cafeína.
  • Tomarse una tónica antes de acostarse (tiene quinina en su composición).
Medidas farmacológicas

Salvo la quinina, ninguna medicina ha demostrado ser eficaz. Sin embargo la quinina puede tener efectos secundarios muy graves por lo que no se recomienda en pacientes con calambres a no ser que la situación sea desesperada. Como alternativa puede intentarse:
  • Utilizar suplementos vitamínicos y minerales que lleven en su composición calcio y magnesio, siempre que no haya contraindicación. Los calambres de las embarazadas suelen responder bien al tratamiento con magnesio.
  • Evitar medicinas que puedan producir calambres.
  • Si fallan las medidas previas puede intentarse el tratamiento con antihistamínicos (polaramine® o similar) o con calcioantagonistas.
  • En casos de que no haya respuesta, si los calambres son muy molestos puede intentarse tratamiento con cloroquina, hidroxicloroquina o gabapentina.
  • La quinina solo estará indicada en situaciones graves.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.