Los anuncios que ha hecho la presidenta de la Comunidad de Madrid en materia sanitaria nos han dejado un sabor amargo. Ante una Atención Primaria colapsada y con unos profesionales sanitarios que ya se están manifestando en las puertas de los centros de salud por la presión inasumible que están soportando, la presidenta Isabel Díaz Ayuso anuncia un “Plan de Acción específico para Atención Primaria”, que a todas luces, tiene aspecto de ser una cortina de humo. La presidenta regional pretende resolver el abandono que sufre la Atención Primaria desde hace 30 años anunciando la inversión de 80 millones de euros en recursos humanos para, según sus palabras, “mejorar las condiciones laborales” con el fin de hacer de la Atención Primaria, un “ámbito atractivo de trabajo para que los nuevos profesionales sanitarios apuesten por incorporarse a ella”.

Decir esto y nada es lo mismo porque el Plan se olvida, una vez más, que la Atención Primaria debe construirse desde una perspectiva enfermera, ya que somos el eje conductor y coordinador de los cuidados comunitarios y sociosanitarios. Esta es la clave de cualquier Plan que realmente tenga el propósito de resolver problemas en un ámbito asistencial que, según los Estados Miembros de la Organización Mundial de la Salud que firmaron la Declaración de Alma-Ata en 1978, la Atención Primaria es un “servicio básico esencial y accesible para toda la población mundial”.


"El Plan de Primaria anunciado por la presidenta de la Comunidad de Madrid debe otorgar a la enfermera el lugar que le corresponde, a todos los niveles"


La Atención Primaria es tan importante en el sistema sanitario que tiene como principio de toda su razón de ser el desarrollo social y económico de los países, porque es el primer contacto sanitario de los ciudadanos dentro del sistema. Por lo tanto, y dada su magnitud y su importancia, y el papel que desempeñan las enfermeras y enfermeros dentro de la misma, este Plan anunciado por la presidenta de la Comunidad de Madrid debe otorgar a la enfermera el lugar que le corresponde, a todos los niveles: gestión, investigación, formación, prevención y promoción de la salud. Sin olvidar sus funciones asistenciales y atención directa de los cuidados de cada ciudadano, de su familia y la comunidad en su conjunto, tanto en el centro de salud, como en el domicilio.

¿Cuántas personas que viven solas no podrían afrontar su día a día sin el cuidado y la atención de una enfermera? En un país donde la sociedad cada vez es más longeva, es inasumible que un Plan de Atención Primaria que realmente pretenda resolver problemas, no se acuerde de que la enfermera juega un papel fundamental en la atención de crónicos donde lo social y lo sanitario van de la mano. Como tampoco, que no se haga mención alguna a medidas concretas para la demanda urgente y programada.

Situación de las residencias en Madrid


Sigamos. Durante la exposición que ha hecho la presidenta Díaz Ayuso de las medidas sanitarias de su gobierno ha mencionado la situación de las residencias. Otro ámbito donde las enfermeras y enfermeros son capitales. Sin embargo, no hemos escuchado nada acerca de finalizar el proceso de implantación de la enfermera geriátrica en todos los centros sociosanitarios tanto públicos, como privados y concertados. Además de una necesidad, es de sentido común.

Así pues, todo parece indicar que el anunciado “Plan Específico para Atención Primaria” se va a quedar en inversiones puntuales que no resuelven los problemas del día a día. Ni tampoco sientan las bases para el futuro. Porque seguimos sin escuchar nada sobre medidas de estabilidad profesional y laboral, así como mejoras retributivas. En definitiva, medidas que reduzcan la altísima temporalidad y la falta de reconocimiento por parte de la administración.

Otro ejemplo del aquí y ahora: estamos a punto de comenzar la campaña de vacunación de la gripe y la Comunidad de Madrid sigue sin desarrollar la acreditación para prescribir que establece el Real Decreto de Prescripción Enfermera, como ya lo han hecho otras Comunidades Autónomas. Tampoco sabemos nada de una acción coordinada entre toda la red de centros de salud de la Comunidad de Madrid y el redimensionamiento de la Salud Pública. Ni desde luego, parece que haya intención alguna de reconocer los méritos que le corresponde a la enfermera por su preparación y nivel académico. Me refiero, entre otras, al desarrollo e implantación total y definitiva de todas las especialidades enfermeras, además de asumir de una vez por todas, que las enfermeras y enfermeros están perfectamente capacitados para la alta gestión de los centros de salud.

Precisamente en este contexto de méritos, preparación y experiencia esperamos que se forme el equipo de trabajo que ha anunciado la presidenta Díaz Ayuso para formar parte del jurado de licitación del concurso que convertirá el antiguo hospital Puerta de Hierro en un nuevo hospital de cuidados y recuperación funcional. Las enfermeras y enfermeros somos los responsables de los cuidados, así que en ese grupo debe haber una nutrida representación de la profesión enfermera, dada nuestra preparación científica y técnica en la coordinación y supervisión integral de cuidados específicos y continuados a toda la población, especialmente, de los pacientes crónicos.

Una cortina de humo


Otro de los ejes de las medidas anunciadas por la presidenta en el ámbito sanitario ha sido la tramitación de la Ley de Farmacia. Desde esta tribuna reafirmo la intención del Colegio de Enfermería de Madrid de seguir muy pendiente del proceso y la letra pequeña de la citada ley para garantizar que recoja el acuerdo alcanzado entre ambas profesiones durante el proceso anterior.


"Este Plan tiene el aspecto de ser una cortina de humo para tratar de conformar a miles de compañeros y compañeras que ya no tienen otro recurso que manifestarse a las puertas de los centros de salud"


En definitiva, como decía al comienzo, este Plan tiene el aspecto de ser una cortina de humo para tratar de conformar a miles de compañeros y compañeras que ya no tienen otro recurso que manifestarse a las puertas de los centros de salud. El Plan es un fracaso antes de su puesta en marcha porque adolece de una mirada enfermera, lo que confirma lo que venimos denunciando desde este Colegio desde hace tiempo. La Comunidad de Madrid sigue ninguneando a 46.000 colegiadas y colegiados de nuestra región.

Queremos un Plan a medio y largo plazo concreto y real que recoja reformas que permitan mayor capacidad resolutiva a la Atención Primaria. Queremos saber qué medidas tiene previstas la presidenta Ayuso para mejorar sus condiciones laborales, económicas y profesionales. Como también, qué medidas tiene previstas para resolver el grave problema que tenemos en cuanto a ratio/enfermera, dado que estamos trabajando bajo parámetros irreales de todo punto. Queremos concreción.

La escasez de enfermeras, la falta de reconocimiento económico, laboral y profesional es un problema reconocido por la OMS. Queremos un Plan que contemple lo que en justicia nos corresponde. Es así como se mejora el sistema sanitario y se retiene el talento y el conocimiento. Y nada de eso hemos escuchado de los labios de la presidenta Isabel Díaz Ayuso.