Se persigue la notificación de todos los casos de parálisis flácida que se produzcan al año, que se estiman en 74



10 feb. 2016 11:45H
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Redacción. Madrid
La Comisión de Salud Pública estudia este miércoles el Plan de acción para la erradicación de la poliomielitis en España. Esta estrategia busca trasladar a nuestro país los protocolos contra el virus diseñados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y pone deberes a las comunidades: 95% de cobertura de vacunación y notificación de todos los casos de parálisis flácida.

La polio se considera erradicada en España desde los '80, pero el plan busca mantener alta la guardia para evitar que pueda volver.  “La escasez de casos en nuestro territorio ha conducido a una pérdida progresiva de la concienciación sobre la poliomielitis como problema de salud pública y a la reducción en la notificación y la investigación del poliovirus”, según se reconoce en el documento presentado a la comisión.  Por ello se establece un plan trianual que busca reforzar la vacunación, la vigilancia y la contención del virus en los laboratorios. Este protocolo, diseñado por la Dirección General de Salud Pública, en colaboración con el Instituto de Salud Carlos III, también establece unas pautas de respuesta ante la detección del poliovirus en España.

Elena Andradas, directora general de Salud Pública.

El primer objetivo del plan es que, entre 2016 y 2018, todas las comunidades autónomas notifiquen e investiguen la totalidad de los casos de parálisis flácida que se produzcan en menores de 15 años en sus territorios. Estos casos suelen generalmente corresponder a reacciones adversas a la vacuna.

En 2014, en el conjunto del país se notificaron 41 casos (lo que supone un ligero repunte en relación con los años anteriores, en los que se registraron entre 25 y 35), sin embargo, la OMS estima que en España se deben estar produciendo unos 74 casos anuales de parálisis flácida, atendiendo a modelos estadísticos, por lo que aún hay 33 casos sin notificar. La meta que se impone a las comunidades autónomas es ésta: detectar 74 casos anuales hasta 2018. Se trata de que no quede ningún caso sin atender y que pudiera corresponder a un hipotético contagio del virus de la polio y no a una reacción adversa a la vacuna.

Los objetivos concretos del programa para cada comunidad se consensuarán en un grupo de trabajo que se va a constituir a tal efecto. Desde el Centro Nacional de Epidemiologia (CNE) se suministrará de todo el material de apoyo ‘ad hoc’ (protocolos, presentaciones, enlaces a paginas web) que necesiten las autoridades regionales.

Vacunación

El plan establece que  las comunidades autónomas “deben asegurarse de alcanzar y mantener coberturas de vacunación en su territorio iguales o superiores al 95 por ciento. Además, identifica ciertos grupos de riesgo, entre los que incluye las personas procedentes de los países con prevalencia del virus y también a los ‘antivacunas’, entre otros colectivos.

En 2014 la media nacional de niños que han completado el primer ciclo de vacunación frente a la polio (tres dosis) era de un 96,6%, una cifra que varía entre un 93,5% y casi un 100%, según la comunidad autónoma. Se estima que hay unos 78.259 niños menores de cinco años que no han completado la vacunación.

Respuesta frente al brote

Dentro de la estrategia de respuesta frente a un brote de polio se habla de poner en marcha acciones para “detener toda transmisión del polio, ya sea salvaje o derivado de la vacuna, en los 120 días siguientes a la confirmación del primer caso”.

En caso de brote, el servicio de salud pública de cada comunbidad autónoma pondrá en marcha el plan específico de respuesta previamente acordado de manera interterritorial. El procedimiento sigue lo que marca la OMS: a las 72 horas de confirmarse el brote, el Ministerio tiene que estar informado de la situación y haber valorado si necesita apoyo de la OMS, la Union Europea o el Centro Europeo de Prevencion y Control de Enfermedades (ECDC).

ENLACE RELACIONADO

Acceda al Plan para la erradicación de la polio

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