Jorge Bustos, jefe de Obstetricia de Cruces, subraya en la importancia de identificar los síntomas del parto prematuro

La inteligencia artificial en el examen uterino evita cesáreas innecesarias
Itziar Astigarraga, jefa de servicio de Pediatría en el Hospital de Cruces (Bizkaia), y Jorge Bustos, jefe de sección del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital de Cruces.


23 nov. 2022 12:00H
SE LEE EN 5 minutos
POR JESÚS MEDIAVILLA | XABIER GONZÁLEZ Pablo Álvarez
Las nuevas tecnologías pueden suponer un gran avance para la Obstetricia y Ginecología, puesto que la inteligencia artificial puede ayudar a que el proceso del embarazo finalice de la manera más satisfactoria posible. “Hemos intentado ver si los algoritmos de la inteligencia artificial son capaces de identificar cambios en la imagen del cuello uterino y hemos visto que es efectivo. Por lo tanto, hemos podido identificar cuellos de mujeres que van a tener un parto prematuro”, así lo ha recalcado Jorge Bustos, jefe de sección del Servicio de Obstetricia y Ginecología en el Hospital Universitario de Cruces.

Intervención completa de Jorge Burgos e Itziar Astigarraga.

Cuando implementas ese procedimiento en el cribado, el profesional será capaz de mejorar “muchísimo” la sensibilidad y la precisión del diagnóstico, según Bustos. Ese paso supone abrir una nueva ventana de oportunidades para lograr una eficiencia real en la práctica clínica.

Bustos indica que cuando una mujer tiene síntomas de parto prematuro hay que clasificar su situación correctamente: “La paciente que realmente tiene los síntomas tendrá que ser ingresada y medicada para que después podamos darle de alta con total seguridad”.

¿Cómo mejorar la práctica clínica durante el embarazo?


Un grupo de ingenieros de la Universidad de Granada están desarrollando una tecnología que todavía no se ha utilizado en Medicina, y que está basada en ondas transversales. “Llevan 10 años diseñando el prototipo, y cuentan con nosotros para realizar la implementación del dispositivo en práctica clínica”, especifica Bustos. El proyecto, además, se está llevando a cabo en una startup del País Vasco.

Jorge Burgos, jefe de sección de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario de Cruces, durante su intervención.


El prototipo ha pasado la Fase I del ensayo, por lo que la tecnología en desarrollo ha logrado su objetivo de medir lo que tenía que medir. Cuenta Bustos que actualmente están en fase de evaluación clínica multicéntrica en diez centros españoles. “Esperamos que esta herramienta nos ayude a identificar en la consulta si la paciente tendrá o no un parto prematuro”, especifica Bustos.

¿Qué mejoras se podrían aplicar durante el embarazo?


El Hospital de Cruces es el centro sanitario de referencia del País Vasco en cuanto a embarazos y partos. En los últimos años han incorporado innovaciones en las cesáreas, y debido a ello, Jorge Burgos apunta a que ese reconocimiento les “obliga” a hacer un trabajo de coordinación importante con Atención Primaria.

“Hemos puesto en marcha un método de cribado para identificar a las pacientes que pueden tener un alto riesgo de preeclampsia. En los primeros tres meses les damos una aspirina de 150 gramos y monitorizamos después su tratamiento, para ver la evolución”, explica el responsable de Obstetricia y Ginecología de Cruces.

Itziar Astigarraga, jefa de servicio de Pediatría en el Hospital Universitario de Cruces, durante su exposición.


Sin embargo, el propio Burgos ha subrayado que las cesáreas son hoy por hoy una “epidemia”. Sus dos principales causas son, según el facultativo, provocar el parto y que el niño salga de nalgas. Poder clasificar a las mujeres en diferentes grupos para individualizar el proceso es uno de los retos primordiales para evitar cesáreas, según ha incidido Burgos.


¿Cómo debe ser la investigación aplicada?


La labor investigativa tiene que ser una investigación aplicada, teniendo en cuenta cuáles son los principales problemas de salud en la infancia y en la adolescencia. Así lo ha explicado Itziar Astigarraga, jefa de servicio de Pediatría en el Hospital Universitario de Cruces (Bizkaia): "Tenemos que investigar no sólo por los grandes prematuros que nacen a las 24 semanas, sino que también por los adolescentes que padecen cáncer, ya que pueden tener tumores embrionarios. Por eso tenemos que hacer esa investigación. Para que tenga su máximo impacto en la comunidad”. Una investigación que tiene que darse en todas las especialidades y ámbitos del sector salud, también en Pediatría: “Investigar en Pediatría es una necesidad”, ha incidido.

Además, ha añadido que el proceso de investigación se “debe” hacer tanto desde el hospital como desde la universidad. “Tiene que hacerse en el laboratorio y que sea una investigación transnacional y comunitaria”, ha subrayado Astigarraga, remarcando que para ello hay que pensar en los problemas de salud pública para que ese trabajo pueda llegar al mayor número de pacientes pediátricos.

Jorge Bustos en un momento de su explicación, ante la mirada de su compañera Itziar Astigarraga.

Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.