Los sanitarios que hicieron su segunda expedición a Gambia en octubre buscan financiación y alianzas para continuar

Jaume Julià.
Jaume Julià, presidente de Fundació SOM, en Gambia.


12 ene. 2023 8:00H
SE LEE EN 7 minutos
POR DESIREÉ POZO
Gambia es un país tranquilo, al que las guerras no azotan. Sin embargo, tiene otros problemas relacionados con la sanidad como la malaria y la tuberculosis. Además, las deficiencias en el saneamiento del agua son un problema para su población. La Fundació SOM (Sanitaris Oberts al Món) pasó ocho días a finales de octubre en Sanyang, una de las ciudades del país, y llevó a cabo una labor humanitaria necesaria en la ciudad. Los cuatro pilares de su expedición al país fueron las curas, las cirugías, las consultas pediátricas y la formación.

"Se han hecho muchas cosas", explica Jaume Julià, cirujano y presidente de la Fundació SOM, a Redacción Médica. El grupo de cirugías, por ejemplo, este año ha tenido por primera vez un anestesista, lo que ha permitido hacer cirugías un poco más complejas. Por otro lado, en el caso de las curas, Julià comenta que ha habido dos tipos de pacientes: "En personas que venían de la calle con úlceras de hacía años y los pacientes que vamos operando a lo largo de la semana, que se les incluye al día siguiente en las curas". Para explicar cómo está la situación sanitaria en el país, el cirujano cuenta que este año vieron a un paciente al que habían tratado el año anterior. "Vino con el mismo vendaje, porque no se lo había curado nadie", comenta. "Fue horroroso".

Jaume Julià y otras voluntarias de Fundació SOM revisan a un niño. (Imagen cedida por The Good Ones) 


En cuanto a la formación, el presidente de SOM afirma que "allí la enfermería está muy mal formada". Por lo que uno de los días, varias de las enfermeras que fueron a la expedición dieron una clase de dos horas "con un power point en inglés sobre teoría y práctica de suturas y retirada de puntos" en la universidad. También colgaron en el centro sanitario carteles con diversas explicaciones, como los síntomas de la malaria o cuándo una úlcera está infectada. Dejaron, además, documentos en los que se explicaban las dosis de medicamentos para pacientes pediátricos.


Evitar el 'volunturismo' y dejar la menor huella de carbono


En esta segunda expedición, han sido un total de 18 los voluntarios que han pasado ocho días ayudando en Gambia. Ha aumentado el número de la primera, ya que en ella fueron 16 personas. No obstante, Julià piensa que 18 es el número perfecto "para moverse en minibús", ya que allí los desplazamientos por carretera son difíciles, y también porque "cada uno tiene su función"; por lo que así se evitaría el "volunturismo". "Llevar más gente o tener gente ociosa en una expedición sociosanitaria es tóxico, porque se convierte en ‘volunturismo’ y eso no lo queremos", explica. 

Además de la ayuda a todos estos pacientes, la Fundació SOM también ha sido "la primera ONG" en llevarse del país ciertos residuos, ya que allí el reciclaje no es como en España: "Llevamos una maleta de 25 kilos de material médico y una mochilita con nuestra ropa interior. Esa maleta vuelve vacía a España, pero nosotros lo que hacemos es traernos  para reciclar todo el plástico y el cartón". No sucede lo mismo con el material médico, que debe "quemarse, incinerarse" y, por tanto, se queda allí. "Pero todo el papel y cartón que rodea todo el material médico se llena en bolsas y se devuelve dentro de las maletas a España y se recicla aquí, para intentar dejar la menor huella de carbono posible", explica Julià a Redacción Médica.


Tercera expedición en 2023


"Para mí hacer voluntariado significa mucho, la vida", cuenta el presidente de esta ONG. "Afortunadamente mi vida está resuelta, mis hijos son mayores, y  tengo el defecto de que me gusta muchísimo mi trabajo. Me faltan tres o cuatro horas al día para hacer todo lo que quiero. La fundación necesita mucho tiempo, pero para mí no es un problema porque yo lo disfruto". "Son expediciones tremendamente emotivas", añade el cirujano. "Me emociona ver gente que operaré hace un año, que vienen y me dan las gracias por la cirugía y la cura que les hicimos. Eso me da adrenalina para todo el año", afirma.

De hecho, en la última comida, según cuenta Julià, los voluntarios que van por primera vez suelen dar "un pequeño discurso de sus emociones, de lo que ha supuesto para él o ella esa expedición y es mejor que cualquier felicitación de todo el año, es brutal". 

Pacientes esperando a ser atendidas. (Imagen cedida por The Good Ones)

La fundació SOM ya está preparando la tercera expedición para el próximo año. Aunque no es fácil, ya que hay conseguir dinero para comprar todo el material, "que incluye desde el espray para los mosquitos de los voluntarios hasta el alojamiento, transpote, comidas...". "Cada año tengo que currármelo mucho para conseguir el dinero de la expedición", comenta. "No tenemos hoteles ni rent a car detrás, no hay nadie que me asegure el proyecto cada año. Sí tenemos la ayuda del Grupo Juaneda, Cardiva o algunos laboratorios, así que todo es trabajo, tiempo, horas y dame algo, por favor", añade el cirujano.

Inicios de la ONG


La aventura de la Fundació SOM comenzó hace unos años. De hecho, Julià llevaba a sus espaldas ya "catorce o quince años" de voluntariado y había estado en "tres continentes". Sin embargo, se dio cuenta de que le "gustaría pulir ciertas cosas" y, al final, junto con otro compañero, llegaron a la "conclusión" de que esto lo tenían que hacer ellos. Aunque las dificultades llegaron poco después, ya que "fue un proyecto burocrático muy difícil. Aunque por Internet te digan que es muy sencillo, no es así".

"La idea era crear un proyecto a nuestro gusto, con nuestros objetivos y principios éticos", afirma Julià. Y así fue como nació esta fundación que, aunque actualmente opera una vez al año en Gambia, el cirujano estaría encantado de ampliar: "Mi ilusión sería poder ir dos veces, pero la ONG es humilde, pequeñita y nueva". Aún así, el presidente de SOM está buscando "nuevas alianzas" y espera que, incluso, se pueda hacer una segunda expedición en otro país: "Nos llamamos 'Sanitaris Oberts al Món', no tengo problemas con ir a otro lugar", concluye.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.