Tanto el monarca como el presidente del Gobierno se suman al frente para que Barcelona se lleve el 'premio final'

Felipe VI y Rajoy se suman al esfuerzo final de España por la EMA
Mariano Rajoy y el Rey Felipe VI.


16 nov. 2017 11:10H
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POR REDACCIÓN
España ha decidido poner toda la carne en el asador para que sea Barcelona la sede elegida para las instalaciones de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) cuando el Brexit se haga realidad. Según informa Carlos Segovia en El Mundo, tanto el Rey Felipe VI como Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, se están implicando personalmente en los esfuerzos diplomáticos para que la candidatura española sea la ganadora en la votación que tiene lugar la próxima semana.
 
Aunque Felipe VI sabe que es “casi imposible tras la crisis catalana”, se ha ofrecido a hacer “gestiones con los gobiernos europeos que más se resisten a la opción de Barcelona y Rajoy también está actuando personalmente en la ofensiva para conseguir votos suficientes en la Unión Europea el próximo día 20”. Estas informaciones proceden de fuentes de la delegación española, que también han indicado que Dolors Montserrat, ministra de Sanidad, mantiene informada a la Casa Real y a La Moncloa sobre los países que pueden estar del lado de la Ciudad Condal y tanto ella como el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, están jugando con un nuevo argumento político para ganar la carrera.
 
Esta nueva carta “consiste en convencer a los socios de que la Unión Europea daría un mensaje claro de que no hay secesiones en su territorio y se respeta la integridad territorial de sus miembros, lo cual favorecería la estabilidad no sólo de España, sino del club en su conjunto”.
 
Según precisa el diario de Unidad Editorial, Dastis usó ese argumentario durante la sesión de control del Congreso de los Diputados y enmarcó la candidatura en beneficio de “la Unión Europea en su lucha contra los populismos y los nacionalismos”.”·Le garantizo que nos vamos a dejar la piel en ello”, afirmó Dastis ante la pregunta de la socialista catalana Meritxell Batet.
 
“Es una batalla que se antoja difícil, pero no le quepa la menor duda de que lo vamos a hacer. Lo vamos a hacer por Barcelona, porque la llegada de la Agencia del Medicamento supondría un espaldarazo no sólo para la ciudad sino también para toda España; por la Unión Europea en su lucha contra los populismos y los nacionalismos; por la economía de Barcelona, por el dinamismo empresarial que generaría y por su impacto en las ciencias de la salud”, remachó el jefe de la diplomacia española.
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