El caso Cerdán no altera la ruta progresista de Pedro Sánchez hasta 2027

La comparecencia del presidente del Gobierno este jueves, tras el estallido del ‘caso Santos Cerdán’ , relacionado con una investigación judicial que afecta al secretario de Organización del PSOE y le vincula a la trama protagonizada por Koldo García, ha servido para reafirmar su continuidad al frente del Ejecutivo y anunciar una reestructuración interna del partido. Aunque no ha detallado nombres ni cambios específicos, sí ha asegurado que no se verán alteradas las prioridades legislativas del Gobierno.

"Pido disculpas a toda la ciudadanía, a los militantes y simpatizantes del PSOE. No existe la corrupción cero. Pero sí debe existir la tolerancia cero cuando esta se produce. Seguiré trabajando por lo que siempre he defendido: la política limpia y la regeneración democrática", ha expresado el mandatario socialista.

Por ello en principio hay que descartar que los hechos que han trascendido hoy vayan a alterar la agenda gubernamental en materia sanitaria en los más de dos años de legislatura que restan por delante al gabinete que preside Pedro Sánchez.

Los grandes proyectos sanitarios siguen adelante

Uno de los pilares que se mantiene es la hoja de ruta sanitaria trazada por el Ministerio de Sanidad, que ya está definida en el Plan Anual Normativo (PAN) para 2025. Según ese documento aprobado por el Consejo de Ministros, Sanidad prevé sacar adelante tres leyes clave: la reforma de la Ley de Garantías (actual Ley de los Medicamentos), la Ley de Gestión Pública de los servicios sanitarios y la reforma del Estatuto Marco del personal estatutario.

Estas tres normas ya estaban previstas para 2024, pero no llegaron a aprobarse, por lo que el Ministerio de Mónica García las vuelve a poner sobre la mesa. Además, Sanidad planea impulsar 17 Reales Decretos a lo largo del año, cinco más que el ejercicio anterior, lo que eleva a 20 las iniciativas legislativas planteadas para 2025.

Esto incluye proyectos como la ampliación del Plan de Salud Bucodental, el avance hacia la Agencia Estatal de Salud Pública, el impulso a la salud digital y el Plan de Acción de Salud Mental. Todos ellos forman parte de la hoja de ruta del Ejecutivo y no han sido cuestionados en la comparecencia.

Pese a que el nivel de cumplimiento del PAN de Sanidad fue bajo en 2024 (22,2 %), el departamento fue uno de los que más normas aprobó si se suman también las iniciativas no planificadas. En total, Moncloa dio luz verde a 17 normativas sanitarias el año pasado, entre ellas la Ley de Universalidad del SNS, la Ley de Equidad y Cohesión, y Reales Decretos clave como el de la especialidad MIR de Urgencias, el de plazas en grados de Medicina o el antitabaco.

Con este historial, y tras la reafirmación del presidente en su continuidad, todo indica que el Ministerio de Sanidad seguirá desplegando su agenda legislativa con margen político suficiente. La estabilidad del Ejecutivo permite avanzar con reformas estructurales en ámbitos como la financiación, la organización del sistema o la planificación del personal sanitario.

Aunque Sánchez ha evitado entrar en nombres concretos durante su intervención, la posible reconfiguración del partido no afectará de momento a la estructura ministerial ni a sus prioridades. Así lo reflejan también los mensajes lanzados desde Sanidad en los últimos días, que insisten en la necesidad de cerrar reformas pendientes y responder a los desafíos de un sistema tensionado.