El trastorno en menores empeoró en el confinamiento por la crisis del Covid-19

El estado de ánimo de los padres afecta a los síntomas del TDAH de niños


8 jul. 2020 9:55H
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POR MARÍA GARCÍA
El 'Informe de Salud Mental en la Infancia y la Adolescencia en la era del Covid-19', elaborado por las asociaciones profesionales de Psiquiatría y Psicología Clínica españolas, evidencia que los niños con TDAH se enfrentan a "desafíos notables durante este período". En un apartado de este documento, explican las dificultades a los que se enfrentan los menores con el trastorno -sobre todo como consecuencia del cierre de las escuelas- y las recomendaciones que deben seguir -como mantener una buena higiene de sueño sin aumentar la dosis de melatonina-. También indican que el estado de ánimo de los padres afecta a los síntomas del trastorno de los menores. 

En primer lugar, los expertos señalan que la pérdida de la rutina diaria y la falta de interacción interpersonal y social podrían funcionar como factores de riesgo potenciales para problemas de salud mental o podrían empeorar los síntomas del TDAH.


"La mayoría de los niños con TDAH reciben atención de entornos de Primaria; no pueden recibir la atención oportuna y profesional desde el hogar"


"Además, la mayoría de los niños con TDAH reciben atención de entornos de Atención Primaria. No pueden recibir atención oportuna y profesional desde el hogar. Se puede suponer que la mayoría de los padres de estos niños no son expertos en el dominio, pero se les impone la responsabilidad educativa además de manejar todos los problemas emocionales y de comportamiento de los/as niños/as las 24 horas, los 7 días de la semana", indican. 

Para saber más sobre cómo está influyendo la pandemia al trastorno, los profesionales realizaron una encuesta que contestaron un total de 241 padres de niños en edad escolar, de entre seis y 15 años, con diagnóstico de TDAH fueron invitados a participar en esta encuesta. El análisis de regresión determinó un modelo de tres predictores: el estado de ánimo general de los/as niños/as, estado de ánimo general de los padres, y el tiempo de estudio de los niños, predijeron significativamente los comportamientos de TDAH.

"Concluyendo que durante el brote de Covid-19, los comportamientos de TDAH de los niños empeoraron significativamente en comparación con su estado normal, el estado de ánimo negativo de los menores se asoció con síntomas de TDAH", indican. Además, señalan que el estado de ánimo de los padres también afecta los síntomas del trastorno de los pequeños.

"Además, indican que los padres de niños con TDAH experimentaron un alto nivel diario de estrés en la crianza de los hijos. La disposición extraordinaria del cierre de la escuela y de que los niños se queden en casa puede generar dificultades y estrés elevados tanto para los/as niños/as como para sus padres", añaden. 


Los desastres naturales aumentan el riesgo de problemas de salud mental


El informe también señala que la exposición a desastres naturales se asocia con un mayor riesgo de problemas de salud mental. Un estudio realizado en China investigó la prevalencia, el curso y los factores de riesgo de trastornos psiquiátricos probables entre 1.573 adolescentes después del terremoto de Wenchuan en mayo de 2008. Entre otros se evaluó el TDAH a los seis y 18 meses después del terremoto utilizando una batería de medidas estandarizadas.


"La exposición al estrés y el TDAH están aún más entrelazados de lo que actualmente se reconoce en la literatura"


Los hallazgos indicaron el TDAH con exposición a estrés muy elevado se asocia a una desregulación emocional grave y persistente (irritabilidad, y especialmente con reactividad y frustración extremas) o la presencia irritabilidad elevada y un elevado e incrementado nivel de ansiedad y depresión.

"Señalan que la exposición al estrés y el TDAH están aún más entrelazados de lo que actualmente se reconoce en la literatura que se centra en el papel del estrés en la depresión y la ansiedad, asociándose, además, a la persistencia del TDAH entre la infancia y la adultez", precisan.

Además, estos niños tratados por TDAH tuvieron peores resultados educativos: dejaron la escuela a una edad más temprana, tomaron más ausencias no autorizadas, tuvieron más probabilidades de ser excluidos de la escuela, un mayor riesgo de necesidades educativas especiales, peor desempeño en los exámenes y más probabilidades estar desempleado después de salir de la escuela. El cierre de escuelas puede contribuir a incrementar el abandono escolar o al aumento de las dificultades en la incorporación escolar.

Evitar auemtnar las dosis de medicación


Por otra parte, también indican que el cierre de los centros educativos puede dificultar que los niños con comportamientos problemáticos que ya de por sí tienen dificultada para hacer frente a las exigencias sociales que acompañan su progresión a lo largo de los primeros años escolares.

"Se han dado guías para el manejo de estos niños con TDAH ante la pandemia de Covid-19, enfatizando las intervenciones centradas en los padres, evitando aumentar las dosis de medicación o agregar fármacos (más allá de las prescritas) para manejar una crisis o estrés relacionado con el confinamiento. Y se debe atender o reforzar la higiene adecuada del sueño en lugar de aumentar las dosis de melatonina más allá del rango terapéutico (hasta 5-6 mg de noche), planteando sistemas de indicación y evaluación de respuesta para el inicio de tratamiento psicoestimulante y de atomoxetina", indican. 

"Posponer la investigación en casos nuevos, la ausencia de feedback escolar, los retrasos en el inicio de tratamientos farmacológicos o las dificultades para ajustar dosis y optimizar los tratamientos psicofarmacológicos son factores determinantes en el momento Covid-19 para los niños con TDAH, siendo creciente la evidencia de la utilidad de la telepsiquiatría para este tipo de población", concluyen. 
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