María Paz García, coordinadora del teléfono de atención psicológica, analiza la presión emocional de estos meses

Covid | La 'voz' que escucha a los sanitarios: "Han tenido muchas pérdidas"
María Paz García-Vera, Catedrática de Psicología de la Universidad Complutense


5 dic. 2020 19:00H
SE LEE EN 6 minutos
POR SONIA NAVARRO
La pandemia de Covid-19 ha dejado secuelas en la población más allá de las físicas, económicas y emocionales. Estas últimas las conoce de primera mano María Paz García-Vera, coordinadora del teléfono de apoyo psicológico del Covid.

Durante la primera ola de la pandemia, este servicio impulsado por el Ministerio de Sanidad y el Consejo General de Psicología realizó 11.417 intervenciones psicológicas, la mayoría a familiares de pacientes fallecidos por Covid, pero también a un gran número de sanitarios que tuvo que lidiar, sin descanso, contra la enfermedad.

En una entrevista para Redacción Médica, María Paz García-Vera ha querido diferenciar los grupos poblacionales más afectados por la pandemia, porque “no todo el mundo está igualmente afectado”. Para la coordinadora de este servicio de atención psicológica, los grupos que tienen mayor riesgo de desarrollar problemas emocionales son los siguientes:

Grupos con mayor riesgos a desarrollar problemas emocionales


1. Los que han visto o ven amenazas para su salud o la de los suyos:
  •  Los sanitarios y otros intervinientes y trabajadores en primera línea de la pandemia, que ponen en riesgo sus vidas y las de los suyos al tener más probabilidades de contagiarse
  • Los enfermos que están o han estado graves, sus familias, y por supuesto los familiares de los fallecidos
  • Los que tienen sus vidas expuestas a la amenaza de la pandemia, sus familias y, por supuesto, los enfermos graves y los familiares de fallecidos y enfermos)
2. Los que se ven afectados por los graves estresores secundarios de la pandemia. Como explica María Paz "este grupo ha ido aumentando desde que comenzó la pandemia, me atrevo a decir que serán el mayor número de afectados". Estos son:
  •  Personas que han perdido su empleo, recursos económicos.
  •  Personas con otras situaciones problemáticas graves que se ven agravadas por las situaciones generadas por la pandemia (personas con problemas de violencia, con problemas en sus relaciones personales, problemas de convivencia, o personas con trastornos psicológicos que han sufrido un empeoramiento).

Reconocer y manejar las emociones


Una diferenciación que quiere dejar patente porque considera que, si bien una parte de la población puede estar decepcionada, esto no se manifiesta “de forma clínicamente significativa para que eso nos distraiga de los más afectados, los que pueden estar realmente mal: los sanitarios, los intervinientes en primera línea, y los que sufren los efectos económicos y sociales de la pandemia: los que pierden sus negocios, los que pensaban que iban a recuperarse y no ha ocurrido”.

Sobre la atención que se dio a los sanitarios que se apoyaban en este servicio, María Paz explica que se les trataba de ayudar fortaleciendo “sus recursos psicológicos para manejar el estrés al que se ven expuestos en su trabajo o a la ansiedad que les puede genera el manejo de las situaciones de riesgo de contagio. También es importante que personas que se enfrentan a situaciones tan extremas sepan reconocer y manejar muy bien sus emociones. Eso puede entrenarse. Tener un poco de ansiedad en situaciones que pueden poner en peligro nuestra salud, es útil, nos protege. Pero tener demasiada ansiedad puede hacer que no nos enfrentemos eficazmente al peligro, incluso que cometamos errores, o que tengamos un sufrimiento inmanejable.  Por eso, el manejo de las propias emociones era fundamental”.

"Los sanitarios han tenido muchas pérdidas"


También añade que “algunos sanitarios se sentían tristes, no solo por la situación de pérdidas que se producía en los hospitales, sino también por sus propias pérdidas en las relaciones con sus familias, a veces teniendo que separarse de ellos, o perder rutinas de estar juntos, de contacto físico con sus hijos… Todo esto requiere una preparación psicológica y muchos recursos para encajar estas dificultades. Es normal que mucha gente necesite ayuda para conseguirlo. No por ello deben sentirse mal. Nadie te prepara para enfrentarte a estas situaciones”.

En cuanto a cómo ha afectado esta crisis a los profesionales sanitarios, la psicóloga mantienen que, desde su punto de vista, “los sanitarios han tenido muchas pérdidas, muy distintas, y siguen teniéndolas”, y recalca que “son un colectivo que ha perdido mucho, y ahora es importante que les protejamos, que les respaldemos todo lo que podamos, que sientan que, a pesar de las pérdidas, también pueden ganar, que se les haga caso, que se les escuche, que se les reconozca el esfuerzo, el sacrifico”.

Afrontar las consecuencias psicolígicas de la pandemia


Un sector muy dañado que podría tener unas secuelas futuras “puede haber problemas de ansiedad, depresión, no sabemos con qué magnitud, pero lo esperable es que haya un aumento importante de problemas de salud mental vinculados, no solo a los problemas sanitarios, sino a los problemas sociales y económicos que son de una gran intensidad y persistencia, y se prevé de una larga duración”.

Una situación futura para la que  “no hay suficientes psicólogos en salud mental, ni en atención primaria, ni en otros servicios como las UCI, cuidados paliativos, oncología, cardiología, neurología, ... para afrontar todas las consecuencias psicológicas negativas que tuvo la pandemia y sus devastadores efectos económicos. Y, sobre todo, hacen falta más psicólogos en la propia gestión de la emergencia, en la comunicación de los mensajes a la población, y en la sanidad pública, en general”.

Por último, María Paz García-Vega reflexiona sobre la situación actual en la que "hay mucha más gente preocupada por la situación económica que al principio, de hecho, parece que nos hemos acostumbrado a escuchar las cifras diarias de muertos, y las hemos aceptado".
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.