El Ministerio también va a recuperar la Encuesta Nacional de Salud Sexual, que se realizó por última vez en 2009

Sanidad reactiva la Estrategia de Salud Sexual casi una década después
María Luisa Carcedo


20 dic. 2018 14:10H
SE LEE EN 5 minutos
La Ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, ha presidido esta mañana la reunión del grupo de expertos que, junto con los Comités Técnicos e Institucionales, actualizarán y desarrollarán la Estrategia Nacional de Salud Sexual y Reproductiva. Esta iniciativa forma parte del desarrollo de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de la Interrupción Voluntaria del Embarazo, de 2010, y se encontraba paralizada durante los últimos años.

En octubre de 2010, se diseñó la estrategia, consensuada con las sociedades científicas y profesionales, con organizaciones sociales, personas expertas y las comunidades autónomas. Pero tal y como ha recordado Carcedo, su aplicación “ha sido prácticamente nula en salud sexual y existen deficiencias en su implantación”. La Ministra ha defendido que la estrategia es “una herramienta fundamental” para avanzar en los derechos sexuales y reproductivos para la ciudadanía, una de las prioridades del Gobierno de España.

Información sobre los métodos de prevención


En el marco de la estrategia, el Ministerio también va a recuperar la Encuesta Nacional de Salud Sexual, que se realizó por última vez en 2009. Su objetivo es recabar información relevante sobre 

Se obtendrá información de las experiencias sexuales, los métodos de prevención, o el acceso a los recursos, entre otros aspectos


distintos aspectos de la salud sexual de la población en España, de cara a identificar las necesidades de información y atención sanitaria existente. Se recogerán datos de la población de 16 años en adelante y, como ya se hizo en 2009, planteará cuestiones como el tipo de información sexual de que se dispone, las necesidades que se tienen a este respecto o cómo se accede a ella. También se obtendrá información de las experiencias sexuales, los métodos de prevención, o el acceso a los recursos, entre otros aspectos.

Además, se hará especial hincapié en la población más joven para identificar y analizar la aceptación de discursos en torno a fenómenos como las violencias sexuales, el consumo de pornografía en internet y la prostitución.

El grupo encargado de actualizar la estrategia está formado por expertos y expertas de los campos de la sexología, la ginecología, la enfermería y en promoción de la salud. Se han convocado para el mes de enero los diversos Comités que rediseñarán la estrategia. El Comité Técnico (sociedades científicas y sociedad civil) y el Institucional (comunidades autónomas), que avanzarán en el desarrollo de la salud sexual, así como el Comité de Seguimiento y Evaluación de Salud Reproductiva.

Vocación transversal


En esta primera reunión, la Ministra ha defendido el objetivo de “abordar la salud sexual desde una perspectiva social y cultural, de derechos y de equidad, incluyendo el enfoque de género”. En este sentido, el Ministerio ya está en contacto con el Ministerio de Educación y FP para impulsar de manera 

Las mujeres lesbianas y sin pareja podrán volver a acceder a programas de reproducción asistida. La medida entrará en vigor en el primer trimestre de 2019


transversal y efectiva la educación afectivo-sexual en el entorno escolar.

También ha puesto el foco en la necesidad de abordar el impacto de enfermedades crónicas y las discapacidades en la salud sexual, “una asignatura pendiente”. Respecto a la salud reproductiva, la estrategia buscará, por ejemplo, evitar la instrumentalización excesiva del parto, con altas tasas de cesáreas y episiotomías.

Además, las mujeres lesbianas y mujeres sin pareja podrán volver a acceder a programas de reproducción asistida a través de la sanidad pública. Esta medida se encuentra en trámite de consulta pública y en revisión por las comunidades autónomas y se prevé que entre en vigor en el primer trimestre de 2019.

Interrupciones Voluntarias del embarazo


La Ministra también ha comentado los últimos datos de interrupciones voluntarias del embarazo, cuyo informe de 2017 se ha publicado hoy y muestra una tendencia a la estabilización.

El año pasado se practicaron 94.123 abortos, lo que supone una tasa de 10,51 interrupciones por cada 1.000 mujeres. Respecto a 2016, se ha producido un incremento del 1%. El descenso es acentuado, del 16,71%, si se compara con 2010. En julio de ese año entró en vigor la ley del aborto. Un año antes, se había aprobado la dispensación gratuita de la píldora del día después.

En el caso de las menores de 20 años, existe un ligero descenso, del 0,2%, respecto a 2016. En 2017, se realizaron 9.755 interrupciones, 8,84 por cada 1.000 mujeres de esa franja de edad. También en esta franja de edad, si se comparan los datos con 2010, se observa una variación a la baja considerable, del 30,92% menos.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.