El Gobierno frena el desarme de la tasa de reposición en las OPE de sanidad.
Fue a principios del año 2024 cuando el Gobierno anunció su intención de
eliminar la tasa de reposición de los profesionales del
Sistema Nacional de Salud (SNS). El objetivo era claro: rejuvenecer las plantillas del empleo público. De esta manera, la tasa de reposición en la Oferta Pública de Empleo (OPE) determina el número de plazas que pueden abrirse por cada baja de funcionario. Ahora, más de un año después de aquel anuncio, el Gobierno, en respuesta a una pregunta planteada por
el Partido Popular, parece decir ‘no’ a eliminar la tasa de reposición de la OPE.
"Es muy difícil defender la
tasa de reposición cuando estamos hablando de modernización y transformación de la Función Pública. Por lo tanto, necesitamos un modelo distinto", defendió el entonces ministro de Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá, durante su comparecencia en la Comisión de Hacienda y Función Pública. Por su parte,
en marzo de este 2025, el actual ministro de Función Pública, Óscar López, anunció su compromiso de implantar una tasa adicional de empleo para que el personal laboral del sector público pueda jubilarse anticipadamente. A este respecto, en marzo de este 2025, desde el
Partido Popular preguntaron al Gobierno por las medidas previstas para propiciar la eliminación de la
tasa de reposición en las ofertas de empleo público en el ámbito de la sanidad, así como por el cálculo de dicha tasa.
La respuesta del Gobierno a la eliminación de la tasa de reposición
“Se informa de que las
Administraciones Públicas, incluidas aquellas compuestas de personal estatutario, están
obligadas a respetar la tasa de reposición que se establece en las leyes de
Presupuestos Generales del Estado y la forma de calcularla”, sentenciaba el Gobierno. De esta forma, la definición de la tasa de reposición queda recogida en la ley de
Presupuestos Generales del Estado para el año 2023. Según la citada normativa, el cálculo de la tasa de reposición de efectivos en la administración pública se rige por una fórmula clara.
En este sentido, pasa saber cuántas plazas de funcionarios pueden convocarse en una oferta de empleo público, se aplica la siguiente operación: se divide el
número de bajas de funcionarios fijos producidas durante el ejercicio anterior entre el
total de funcionarios fijos existentes en ese mismo periodo, y el resultado
se multiplica por la tasa de reposición establecida en la Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE). Así, la tasa general de reposición en el año 2023 se estableció en un 110 por ciento. Sin embargo, para sectores considerados prioritarios, como la sanidad, esta tasa se eleva al 120 por ciento. Por tanto, y de acuerdo a la respuesta presentada por el Gobierno, esta tasa debe respetarse en todas las convocatorias de empleo público,
incluidas las de sanidad.
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