Los socialistas consideran que el actual nivel del tipo impositivo supone un menor control sanitario en los animales



19 feb. 2015 18:39H
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Redacción. Madrid
El Grupo Parlamentario Socialista se ha comprometido ante el Consejo General de Veterinarios de España para que el Gobierno reduzca el IVA actual, al 21 por ciento, al reducido del 10 por ciento para los establecimientos dedicados a servicios veterinarios, según ha asegurado el portavoz adjunto de Economía del partido, Antonio Hurtado.

Antonio Hurtado.

Hurtado, junto al secretario general de la formación, Miguel Ángel Heredia, el portavoz de sanidad, José Martínez Olmos y el de Agricultura, Alejandro Alonso, se han reunido este jueves con el presidente del consejo, Felipe Vilas Herranz, y su asesor jurídico, Juan José Jiménez Alonso.

El Gobierno del PP elevó, en 2012, el IVA en este sector, que pasó del tipo reducido, entonces del 8 por ciento, al nuevo tipo general, del 21 por ciento. “Ello ha provocado que muchos propietarios de establecimientos dedicados a servicios veterinarios no puedan hacer frente al aumento del coste que comporta la tenencia de un animal en condiciones de salud adecuadas, ni tampoco a los tratamientos de enfermedades crónicas, cirugías, urgencias veterinarias, lo a que juicio de los veterinarios ha originado el incremento del abandono de animales”, ha afirmado.

Menor control sanitario por el incremento de los costes

El PSOE ya pidió al Gobierno que vuelva a aplicar el tipo reducido del IVA a estos servicios que tengan por objetivo “la prevención, diagnóstico o tratamiento de las enfermedades o dolencias de los animales”, ha recordado el portavoz de Economía.

El partido registró en junio de 2014 una propuesta en la que instaba al Ejecutivo a que devuelva el IVA que pagan los servicios veterinarios al 10 por ciento para favorecer la prevención, advirtiendo que desde que se aprobó la subida, han descendido el control a los animales, incluso en enfermedades que pueden contagiarse a las personas.

Hurtado ha subrayado que en las iniciativas recogían que se había producido un aumento de las eutanasias, una disminución de los controles veterinarios sobre la salud de los animales y un menor control de las enfermedades de transmisión.

Asimismo, en la iniciativa, también se planteaba el agravio comparativo con otras profesiones sanitarias, exentas del IVA, como médicos u odontólogos.

En España hay entre 9.000 y 10.000 establecimientos dedicados a las actividades veterinarias, de los cuales, 733 cerraron en 2013. Se calcula que en el país hay 20 millones de mascotas y el incremento de los costes conlleva un menor control sanitario sobre enfermedades que los animales pueden transmitir.

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