Enfermería, anestesia y la sombra de una guerra impopular

Ejemplos de guerras impopulares hay muchos a lo largo de la historia. Vietnam, Afganistán o Irak son solo tres conflictos marcados por un considerable nivel de rechazo interno en los países participantes. Sin tener punto de comparación más allá de lo metafórico, el sindicato de Enfermería Satse se ha lanzado a una ‘guerra’ competencial con la anestesia como protagonista. El objetivo, dotar a las enfermeras de capacidad para “realizar activamente el proceso antes, durante y/o después de un procedimiento quirúrgico”, se ha encontrado sin embargo con una masa de profesionales que no ven este objetivo como una prioridad o directamente lo rechazan.

A través de una carta dirigida a José Manuel Miñones, Satse ha solicitado al Ministerio de Sanidad acometer los cambios formativo-reglamentarios necesarios para alcanzar una premisa que, aseguran, viene avalada por sus “positivos” resultados en Reino Unido. La ola de reacciones a la propuesta, que plantea la adquisición de estas competencias a través de un curso de postgrado de 20 créditos que combinen teoría y práctica, no se ha hecho esperar. Entre ellas está la de los médicos, que en un comunicado conjunto entre el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom) y la Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (Sedar) han querido “reiterar” que Anestesiología es una especialidad médica que requiere el Grado en Medicina y formación MIR específica. Menos esperadas que esa han sido las que, llegadas desde el ámbito de la Enfermería, tampoco están a favor de esta opción.

“No quiero anestesiar, quiero que se desarrolle la especialidad de Urgencias y la de Quirófano”. “Primero arreglemos nuestras competencias, por favor”. “Hay cosas más importantes que llevamos reclamando mucho tiempo ¡Escuchadnos!”. Son testimonios, todos correspondientes a profesionales de la Enfermería, sobre la posibilidad de participar en el procedimiento de anestesia. Solo una muestra de otras reacciones, difícilmente cuantificables pero numerosas, que ponen de manifiesto que la iniciativa no ha calado todo lo que el sindicato querría. Con los médicos en contra y una parte de las enfermeras considerando que no se han tenido en cuenta sus intereses, cabe preguntarse si Satse se ha adentrado en su propia guerra impopular con una nueva presidenta, Laura Villaseñor, como 'heredera' de su antecesor Manuel Cascos…