Madrid empieza a liberar de burocracia a sus médicos con una nueva figura

La Comunidad de Madrid es la tercera región en incorporar la figura del administrativo o asistente clínico, cuya finalidad es liberar a los sanitarios de la carga burocrática que se puede resolver por el personal de gestión. Se suma así a Cataluña y Canarias, con un modelo diferente a estas comunidades autónomas, con "resultados positivos" y limitaciones debido a "la propia resistencia de los pacientes".

Así es la primera valoración de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), en palabras de Francisco José Sáez Martínez, responsable del Grupo de Trabajo en Gestión Clínica de la SEMG, a Redacción Médica. "El modelo en la Atención Primaria es diferente que en otras comunidades autónomas", señala, ya que se han decidido crear unidades administrativas de los centros de salud y unidades centrales de cada dirección asistencial.

En el primer caso, desde la gerencia se han indicado una serie de actividades que tiene que hacer el administrativo y después el médico de Familia, en trámites como facilitar informes al paciente, renovación de citas en hospital, activar recetas electrónicas o justificantes. "Lo hace el administrativo, que se pone en contacto con el médico o enfermera y contacta con el paciente", asegura Sáez. Estos mismos asistentes también trabajan con hospitales como la Jiménez Díaz para comprobar que los pacientes derivados por el médico de Familia se han realizado unas pruebas imprescindibles de cara a sus citas en el hospital, reduciendo así de dos a una las consultas.

En el segundo caso, en las unidades centrales de cada dirección asistencial, un administrativo recibe notificaciones de dudas que pueda tener el paciente, tras llamar a esta unidad central y no al centro de salud. Ocurre en situaciones como problemas que puedan surgir en residencias de mayores o solicitar transporte sanitario, en que el asistente se pone en contacto con el profesional asistencial de la unidad central.

Diferencias con Cataluña y Canarias

"La valoración es positiva, que los administrativos hagan este tipo de tareas hace disminuir el gran número de consultas que tenemos los médicos de Familia", incide el responsable del Grupo de Trabajo en Gestión Clínica de la SEMG. No obstante, un aspecto a mejorar es "la resistencia de los pacientes, que hace que muchos administrativos no realicen las tareas como estaban ideadas en un principio".

Los pacientes llegan al centro de salud, el administrativo les dice que les gestiona la solicitud y el usuario pide citarse con el médico, agrega Sáez. Por ello, "los administrativos no hacen todas las gestiones que están contempladas". Según su criterio, "el modelo está siendo más efectivo en Cataluña y Canarias porque el único acceso para estas gestiones es con el administrativo".