Marta Sánchez-Celaya, Carmen González, Sonia García y Leticia Camarillo.
La atención a las víctimas de violencia de género es una prioridad en el
Hospital Universitario Gregorio Marañón. Prueba de ello es el
nuevo procolo que pondrá en marcha el centro, dedicado a proteger, orientar y asesorar a las trabajadoras del hospital madrileño respecto a la violencia machista.
Se trata de un documento que establece un circuito claro y seguro para que cualquier profesional del hospital que esté atravesando una situación de violencia pueda recibir asesoramiento, apoyo y acompañamiento especializado. Un protocolo que nace con el objetivo de reforzar la protección, la seguridad y el bienestar de sus profesionales, garantizando una atención confidencial, cercana y adaptada a las
necesidades individuales de cada una de las trabajadoras.
Todo ello con motivo del 20º aniversario del
programa Atiende del Gregorio Marañón. Una unidad de "referencia" en la región para pacientes con síntomas derivados de situaciones de
violencia de género actuales o recientes, que ofrece una respuesta temprana y "altamente especializada a mujeres derivadas desde toda la Comunidad de Madrid".
En total, según han trasladado las encargadas de dirigir este proyecto, el hospital ha atendido a
más de 3.400 mujeres víctimas de violencia de género con problemas de salud mental. Además, la media de edad de las pacientes que recibe el programa es de 38 años, con mayor concentración entre el grupo de 41 y 50 años.
Compromiso con la lucha contra la violencia de género en la sanidad madrileña
Concretamente, la encargada de explicar la nueva hoja de ruta del gran bualarte sanitario madrileño ha sido
Marta Sánchez-Celaya, subdirectora gerente del Hospital Universitario Gregorio Marañón. "Este protocolo es un compromiso de la dirección gerencia de este hospital", sobre todo, con base en lo sucedido el pasado año 2023, cuando se conoció
el fallecimiento de Leticia, enfermera del Gregorio Marañón asesinada a manos de su pareja.
Tal y como ha trasladado a los asistentes a la presentación del mismo, llevada a cabo en el salón de actos del Hospital Materno Infantil, este protocolo "busca garantizar el apoyo confidencial y efectivo de las mujeres que han sufrido
violencia de género fuera o dentro del hospital".
Según ha detallado, "involucra a
diferentes departamentos hospitalarios, como la Comisión Contra la Violencia de Género, el Comité de Igualdad, el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales o el departamento de Recursos Humanos". Para ello, esta iniciativa permitirá poner a disposición de las trabajadoras del centro diferentes "formas de contacto".
En contacto con enfermeras, médicas, TCAE, celadoras y administrativas
Entre ellas, un correo electrónico, un teléfono,
un servicio de atención presencial directa y un QR "para facilitar el acceso". "En este último caso, se rellenan una serie de datos para ponernos en contacto con las mujeres", ha profundizado.
Una vez se crea el contacto entre ambos agentes, "la trabajadora es derivada o a la Comisión de Recursos Humanos o a la Comisión de Violencia, dependiendo de la solicitud". A continuación, "se valoran las
necesidades jurídicas y psicológicas y se orienta a recursos externos para una atención personalizada" como la psicólogica, a cargo, por ejemplo, del programa Atiende.
La coordinadora de este proyecto que cumple este año dos décadas,
Leticia Camarillo, ha explicado que uno de los principales objetivos de la iniciativa era "paliar los síntomas de las mujeres en
momentos duros tras años de sometimiento". "Intentamos ayudarlas y acompañarlas en el camino que han de recorrer posteriormente en los procesos judiciales, en la disolución de gananciales o en las custiodias de hijos e hijas", ha detallado.
Por otro lado, ha puesto en valor la importancia de "la detección temprana", que "es fundamental". "Es especialmente importante que la derivación de las mujeres se haga lo antes posible. En los últimos años, ha aumentado
el número de mujeres recibidas en el programa, sobre todo derivadas de los Servicios de Ginecología y de los centros de salud mental", ha añadido. Un programa que "ha ayudado a cientos de mujeres".
Prevención de la violencia de género
"Es una iniciativa pionera en España. Las cifras demuestran la relevancia de este programa.
La atención ha 235 mujeres anualmente, casi 5.000 intervencionales anuales, etc.", ha destacado
Carmen González, directora general de Coordinación Sociosanitaria del Servicio Madrileño de Salud (Sermas). Y es que, según ha afirmado, "los hospitales tienen que ser espacios de protección, acogida y reconstrucción emocional".
"La violencia de género es una lacra. Tuvimos que sufrir la pérdida de nuestra compañera, lo que nos hizo parar y reflexionar. Y nos pusimos a trabjar con la Comisión de Violencia", ha admitido la gerente del Hospital Universitario Gregorio Marañon,
Sonia García. Ahora, el caso de Leticia se intentará prevenir por todos los medios posibles, y este nuevo protocolo dirigido a trabajadoras es un ejemplo de ello. El siguiente paso es darlo a conocer a través de todos los canales de comunicación del centro para, así, hacer del Gregorio Marañón un 'arma letal' contra la violencia de género.
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