Los cursos formativos se han iniciado con un grupo de enfermeros y enfermeras de todas las gerencias.
El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), ha iniciado un proyecto formativo para
potenciar la capacidad de los profesionales de
Enfermería para
prescribir una serie de
medicamentos y productos sanitarios con todas las garantías de seguridad y calidad para el paciente, tal y como avala actualmente la legislación estatal y autonómica.
Con este proyecto, financiado por el Ministerio de Sanidad, se pretende dar a conocer a los profesionales de Enfermería del Sescam las nuevas competencias asumidas por su profesión tras la publicación del Real Decreto 954/2015, modificado por el RD 1302/2018, según el cual, las
enfermeras y enfermeros pueden indicar, usar y autorizar la dispensación de medicamentos y productos sanitarios, con distintos
niveles de autonomía según el tipo de
medicamento.
Además, otro de los objetivos es
informar a los equipos directivos del servicio regional de salud de los avances que se están produciendo en la indicación por parte de las enfermeras en determinadas patologías, y
recabar su apoyo para la implantación progresiva de esta función entre el personal de su Gerencia.
Con este proyecto se quiere dar a conocer también a la población general esta nueva función de la profesión enfermera, trasladando los beneficios para los pacientes:
mejora de la seguridad, de la continuidad de cuidados, de la agilidad de la atención sanitaria y de la
personalización de la atención prestada.
Actividades formativas en el Sescam
La primera actividad formativa de este proyecto se ha celebrado recientemente en los
servicios centrales del Sescam y fue impartida por la enfermera experta Mariló Ruiz Fernández, profesora de la
Universidad de Almería, y presidenta de la Asociación Andaluza de Enfermería Familiar y Comunitaria (Asanec). Durante esta actividad, tuvo la ocasión de interactuar con un grupo de enfermeros y enfermeras de todas las gerencias que, a su vez,
servirán de líderes y formadores de este proyecto en sus centros de trabajo.
Ruiz Fernández expuso el marco normativo y regulatorio que ampara esta nueva capacidad, los fundamentos y legitimidad de la misma, el
impacto y los beneficios que tiene para los pacientes, y las estrategias para implantarla de una manera eficaz. En su ponencia expuso que la
prescripción enfermera es una práctica que tiene una eficacia y unos beneficios claros, demostrados por estudios científicos, tanto para los pacientes, para los propios profesionales y para el sistema sanitario, ya que aumenta la eficiencia, la calidad y la seguridad de la asistencia sanitaria.
Entre los beneficios que aporta, según ha señalado, está el
trato personalizado que reciben los pacientes, mejora la continuidad de cuidados, la adherencia a los tratamientos aumenta la seguridad y también la
satisfacción global con la atención recibida. Además, esta nueva forma de trabajar facilita la colaboración entre los distintos profesionales sanitarios. El siguiente paso consistirá en la
preparación de un material divulgativo orientado a la población, ya que su participación en esta importante innovación es fundamental para lograr los objetivos previstos.
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