Satse afirma que supondrá un perjuicio para la calidad asistencial y sobrecarga de trabajo para los sanitarios



7 jun. 2011 16:35H
SE LEE EN 3 minutos

Redacción. Santa Cruz de Tenerife
El Sindicato de Enfermería (Satse) ha anunciado que el Servicio Canario de Salud (SCS) va a cerrar a partir del 1 de julio varias plantas de hospitalización del Hospital Universitario de Canarias (HUC), lo que, según el sindicato, supondría un grave perjuicio para la calidad asistencial de los usuarios del hospital y una sobrecarga de trabajo para el personal sanitario.

Imagen del Hospital Universitario de Canarias.

A través de una nota, Satse ha incidido en que las consecuencias inmediatas de estas medidas serán una disminución en la contratación de enfermeras, de auxiliares de enfermería y otras categorías profesionales, pues no se cubrirán permisos en otras unidades. "No sólo se trata de un ataque directo hacia el personal sanitario, sino contra la población tinerfeña, pues se pretende disminuir el número de camas para ingreso y se producirá un aumento en el tiempo de espera, tanto en urgencias como en las listas de espera quirúrgica y de varias especialidades", advierte el Sindicato de Enfermería.

Para Satse, "este tipo de medidas vulnera derechos del convenio colectivo del HUC y se deben planificar a comienzos de año y no con menos de veinte días de antelación, fruto de la improvisación y de la mala gestión de la Administración, sin informar ni consultar a los afectados". Además, el sindicato ha señalado que el ahorro que se pretende "no es real" y que esta decisión se está tomando en "un momento crítico" para el funcionamiento del hospital, pues la Dirección de Enfermería ha presentado la dimisión y el puesto del gerente "está pendiente de los pactos políticos". "Este escenario de inestabilidad en la gestión del HUC está dando situaciones de descoordinación entre instituciones y no hay una política organizada", ha apostilado.

Según el sindicato, "cuando se denunció el colapso del servicio de urgencias, todos los colectivos, incluyendo la propia gerencia, argumentaron que la falta de camas hospitalarias era el problema crónico de este servicio, ya que se convierte en una especie de embudo porque no hay salida desde urgencias. Sin embargo, ahora han decidido que hay camas de sobra". "Mientras que en las clínicas privadas no se reduce la actividad, ni sobran camas, ni se cierran plantas y se sigue pagando extras mientras se deja a profesionales en el paro", añade.

Satse ha considerado que se pueden tomar otro tipo de medidas para ahorrar gastos sin tener que reducir camas de hospitalización y que así se lo ha propuesto a la gerencia. Éstas son la dispensación de fármacos genéricos, el control de los recursos materiales en todas las áreas del HUC, y no sólo la de enfermería, el control de la medicación caducada que originó un gasto de más de 150.000 euros, entre otras.

Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.