Esta profesional explica su última experiencia en un hospital donde no había trabajado antes

Nicole, enfermera: "Estoy harta de sentirme abandonada por lassupervisoras"
Nicole Abad, enfermera.


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Empezar a trabajar como enfermera en un nuevo hospital siempre es una situación que acarrea una dosis extra de nerviosismo. El problema viene cuando, al llegar, no se encuentra a ninguna figura de referencia que explique ciertos detalles y acompañe en esos primeros momentos. Es lo que le ha ocurrido recientemente a Nicole Abad, quien ha aprovechado la situación para expresar lo que siente sobre esta situación: "Estoy harta de sentirme abandonada por las supervisoras de Enfermería". 

"Estoy tan enfadada que no sé cómo voy a contar esto sin enfadarme más", empieza diciendo Abad, antes de relatar lo que califica como "la gota que colmó el vaso". La enfermera había aceptado cubrir un turno doble de mañana y tarde en un hospital en el que no había trabajado antes y explica que llegó media hora antes del inicio de su turno, para poder recibir la acogida habitual. "La acogida básicamente es decirte hola, buenos días. Soy Pepita de los Palotes, supervisora. Te acompaño al vestuario, te cambias, te llevo a la Unidad, te informo de los pacientes que vas a llevar y te doy usuario y contraseña del programa informático", resume en un vídeo publicado en su perfil de TikTok.

@nicoleabad.6 Basta ya de abandonarnos desde el despacho #enfermeria #nurse #enfermera #hospital #sanidad sonido original - Nicole Abad

Un comunicado para las supervisoras de Enfermería

Sin embargo, esa acogida no se produjo. "La recepción llamaba a la supervisora, pero no contestaba. Me puse el pijama, volví a subir al hall, llamaron otra vez, y la supervisora dijo que me esperaba en planta. Subí y allí nadie sabía nada", cuenta. Tras 45 minutos de espera, finalmente una compañera le informó de que debía incorporarse, pero sin las credenciales necesarias para trabajar.

"La supervisora le dice que llame a informática para que me den las contraseñas. Amiga, perdón. Yo he llegado media hora antes para que tú me acojas y me acompañes al hospital", protesta.

Agotada por la falta de respuesta, Abad decidió marcharse del hospital. "Les he dicho a las compañeras: lo siento mucho, sé que os voy a hacer un roto porque vais a trabajar con una enfermera menos, pero estoy harta de sentirme abandonada", afirma. En su vídeo, subraya que las supervisoras "también son enfermeras" y que "parece que se les olvida".

"Las supervisoras también son enfermeras"


"Un poco de acogida, un poco de sentirse apoyada. Es suficientemente duro estar nueva en un hospital, sin conocer nada, sin saber dónde está nada, sin conocer el sistema informático ni a los compañeros", insiste. "Es que me dicen: ah, mira, perdona, es que me hace falta una enfermera en Oncología. ¿Ah, que no has puesto nunca una quimio? No te preocupes, vete a Oncología", ironiza.

Su mensaje final se convierte en una llamada directa a las responsables: "Esto es un comunicado para las supervisoras que se olvidan de que son enfermeras. Que salgan del despacho, cojan el teléfono y solucionen las cosas en persona. No puedo con estas supervisoras que se piensan que son la gerente".


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