José Ignacio Granda, neumólogo experto en tabaquismo y miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), es el primer autor de una publicación que prueba que el consumo de tabaco de una población se puede estimar a través de la medición de los metabolismos de la nicotina en las aguas residuales. Esta metodología, que se ha empleado en otras investigaciones, se suma al resto de herramientas que se utilizan en salud pública para conocer el consumo de sustancias y que, además tiene grandes ventajas: mayor rapidez, mayor representatividad y menor coste.