La inflación sanitaria española, a contracorriente de la Zona Euro

Marcos Domínguez. Madrid
El Eurostat, portal estadístico de la Unión Europea, ha publicado los datos de inflación en el continente, que cayó dos décimas en diciembre en la Zona Euro, siendo la primera vez que lo hace en cinco años. El precio de los combustibles, con la drástica reducción del coste del petróleo, es el principal factor para la caída.

En el ámbito sanitario, sin embargo, la evolución de los precios ha mantenido un ritmo constante de crecimiento. A la espera de los datos de diciembre, en noviembre la tasa anual se situaba en el 1 por ciento, cifra sobre la que ha girado el índice en los últimos meses. La tendencia contrasta con el caso español, que ha pasado de la inflación positiva de los primeros meses de 2014 a una caída de tres décimas a finales del penúltimo mes del año.

Productos sanitarios y medicamentos son los principales responsables de este empuje negativo en nuestro país, especialmente estos últimos: mientras que el pasado marzo crecían al 2,6 por ciento, los últimos datos ofrecen una reducción de 9 décimas. Sin ser tan pronunciado el cambio de tendencia, los precios de los productos sanitarios pasaron de subir por encima del medio punto a caer tres décimas al cierre de noviembre. En la Zona Euro, sin embargo, la estabilidad en ambos apartados ha sido la tónica dominante, creciendo un punto porcentual.

La diferencia más pronunciada respecto al resto de países comparados es la de los servicios hospitalarios. Según los últimos datos del Eurostat, en España han caído un 2,6 por ciento interanual, mientras que la media europea los sitúa en una subida del 1,8 por ciento. Los servicios médicos y paramédicos, en cambio, son la única partida en la que los precios en nuestro país han crecido, y por encima de la media de la zona euro, concretamente 8 décimas frente a 4.

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