Un estudio señala que no es necesario usar este tratamiento para superar la enfermedad

La omisión de radioterapia, un "punto de inflexión" para el cáncer de recto
Deborah Schrag, autora principal del estudio.


5 jun. 2023 17:10H
SE LEE EN 5 minutos
Un nuevo estudio sugiere que miles de pacientes con cáncer de recto podrían ahorrarse el uso de la radioterapia, después de que los médicos descubrieran que podían utilizar únicamente la quimioterapia y la cirugía para tratar su enfermedad. La radioterapia es el tratamiento más común para el cáncer de recto. Según la American Cancer Society, se puede utilizar antes o después de la cirugía para ayudar a evitar que el cáncer regrese. Actualmente, muchos médicos prefieren administrar la radioterapia antes de la cirugía, señala la organización, ya que puede hacer más fácil la extracción del tumor canceroso.

En esta nueva investigación, presentada el domingo en la reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés), el mayor congreso mundial sobre cáncer, busca evitar la radioterapia y, con ello, sus efectos secundarios. "Omitir la radioterapia puede reducir los efectos secundarios a corto y largo plazo que repercuten en la calidad de vida, al tiempo que proporciona resultados similares en supervivencia libre de enfermedad y supervivencia global", afirmó ASCO.

Los posibles efectos secundarios de la radioterapia van desde la irritación de piel, la dificultad para que las heridas cicatricen, náusea, irritacion rectal que puede causar diarrea, el cansancio y hasta los problemas sexuales, entre otros. Aunque la mayoría de los efectos secundarios deben mejorar con el tiempo tras finalizar el tratamiento, es posible que algunos problemas no desaparezcan completamente, señala la American Cancer Society.


"Este estudio ofrece a los pacientes opciones de tratamiento alternativas"




La Sociedad Americana de Oncología Clínica indica que la radioterapia puede tener "importantes efectos tóxicos a corto y largo plazo que repercuten negativamente en la calidad de vida", como la infertilidad, fallos ováricos o la necesidad de una ostomía temporal. Así mismo, subraya que la quimioterapia también puede producir fatiga, náuseas, vómitos, recuento bajo de glóbulos blancos, infección y neuropatía. "Este estudio ofrece a los pacientes opciones de tratamiento alternativas", resalta ASCO.

La principal autora del estudio, Deborah Schrag, resaltó la relevancia de este avance en la investigación contra este tipo de patología. “Es importante tener esta opción [de tratamiento] por varios motivos. En primer lugar, en muchas partes del mundo, la radioterapia no es de fácil acceso. Un enfoque total de quimioterapia puede hacer que el tratamiento con intención curativa sea accesible para los pacientes en estos entornos de recursos limitados. Además, dadas las crecientes tasas de cáncer colorrectal en pacientes jóvenes, esto proporciona una opción para los pacientes que desean conservar la fertilidad o evitar la menopausia temprana”.

"Nuevo estándar de atención" para los pacientes


El estudio dividió a los pacientes en dos grupos aleatorios: uno recibió el tratamiento estándar de quimiorradiación antes de la cirugía y el otro recibió seguida de radioterapia solamente si los tumores no se reducían en un 20 por ciento o más después de la quimioterapia. El ensayo, realizado entre 2012 y 2018, mostró que ambos grupos tuvieron resultados similares de superviviencia sin enfermedad: 78,6 por ciento para quienes usaron quimiorradiación y 80,8 por ciento para quienes solo usaron quimioterapia.

"Después de cinco años, no hubo diferencias estadísticamente significativas entre los dos grupos de tratamiento en ninguno de los criterios de valoración estudiados, lo que significa que la radioterapia puede omitirse con seguridad antes de la cirugía si el tumor responde al tratamiento con quimioterapia mFOLFOX6", resalta ASCO.

Según la Sociedad estadounidense, estos resultados demuestran que es "seguro y eficaz" tratar el cáncer de recto localmente avanzado con quimioterapia preoperatoria y el uso selectivo de quimiorradioterapia, en lugar de tratar a todos los pacientes con quimiorradiación. "Este estudio ofrece a los pacientes un nuevo estándar de atención que tiene el potencial de reducir las toxicidades, como la preservación de la fertilidad. También es importante a escala mundial, porque el acceso a la radioterapia es limitado en algunos países" señalan.

Para Pamela L. Kunz, experta de ASCO, "hemos llegado a un punto de inflexión en el tratamiento de los pacientes con cáncer de recto". "A medida que desarrollamos nuevas terapias, también exploramos dónde podemos eliminar las terapias tóxicas para el bienestar de nuestros pacientes. Los resultados de este estudio nos permiten hacer precisamente eso, al demostrar que podemos omitir la radioterapia en algunos pacientes, mejorando así su calidad de vida sin comprometer la eficacia. Estos hallazgos que cambian la práctica son significativos, incluso cuando el panorama del tratamiento para estos pacientes sigue evolucionando", sentencia.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.