Médicos internistas de todo el país se han congregado el pasado 11 y 12 de mayo en Madrid

El 75% de reingresos tras una intervención se debe a complicaciones médicas, por lo que la presencia de un internista en las cirugías
Eduardo Montero, coordinador del Grupo de Trabajo de Asistencia Compartida y Medicina Hospitalista de la SEMI.


16 may. 2023 8:00H
SE LEE EN 5 minutos
Médicos internistas de todo el país se han congregado el pasado 11 y 12 de mayo en Madrid en la VII Reunión de Asistencia Compartida y Medicina Hospitalista de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), en donde han analizado novedades en este campo con el foco puesto en el papel “fundamental y cada vez más relevante” del especialista en Medicina Interna en la optimización de pacientes antes de la cirugía y en el seguimiento postquirúrgico, así como en los denominados programas “Rapid Recovery o ERAS”, teniendo en cuenta la “elevada carga de comorbilidad que presentan los pacientes quirúrgicos en la actualidad”.
 
Dicha optimización realizada por internistas, en palabras del Eduardo Montero, coordinador del Grupo de Trabajo de Asistencia Compartida y Medicina Hospitalista de la SEMI, es clave porque “reduce las suspensiones de cirugías, la estancia hospitalaria y la mortalidad, entre otros beneficios. Asimismo, es destacado también el papel del internista en el seguimiento postquirúrgico para detectar y tratar precozmente las complicaciones que pudieran aparecer, incluyendo el seguimiento post-alta de pacientes quirúrgicos, ya que también reduce la mortalidad y los reingresos”.  Se estima que hasta tres cuartas partes (75 por ciento) de los reingresos de pacientes tras una intervención quirúrgica se deben a complicaciones médicas y no quirúrgicas.
 
En dicha reunión, entre otros temas relevantes, se ha disertado sobre “las últimas novedades en el manejo de la anemia perioperatoria, tema muy importante y en constante debate en la actualidad. Según se ha expuesto, precisamente, “la anemia está presente en un tercio de los pacientes que van a ser sometidos a una intervención quirúrgica, y en otro tercio, lo está la ferropenia (escasez de hierro en el organismo), que es su precursor en la mayoría de los casos”. Su abordaje en la actualidad consiste en prevenirla, o corregirla si ya está presente, mediante la administración de hierro con suficiente antelación para que el paciente supere la anemia y llegue a la intervención quirúrgica en las mejores condiciones posibles.
 
En relación a las prótesis vasculares, se ha abordado el manejo de las infecciones relacionadas con este tipo de prótesis, que “si bien son poco frecuentes, son muy graves para el paciente y de difícil manejo”, además de tratarse el impacto de “las infecciones víricas, en especial la Covid-19, en el perioperatorio”.


Complicaciones más frecuentes tras una cirugía

 
Entre las complicaciones más frecuentes tras una cirugía, se encuentran las de tipo respiratorio. Según se ha mencionado, “este tipo de complicaciones son, junto con las infecciosas, las más frecuentes en el postoperatorio, más incluso que las cardíacas”. De ellas, las más frecuentes son la insuficiencia respiratoria y la neumonía. Su pronóstico, aunque en general es bueno, puede ser grave. De hecho, “su mortalidad a 30 días es superior a la de las complicaciones cardíacas”.
 
La reunión ha sido inaugurada por el secretario general de la SEMI, Manuel Méndez Bailón y por Eduardo Montero Ruiz, como coordinador del Grupo de Asistencia Compartida y Medicina Hospitalista de SEMI.
 
Otro de los temas abordados en la reunión ha sido el de las infecciones en prótesis articulares. Se ha mencionado que “son poco frecuentes, ya que se producen en alrededor del 2 por ciento de las prótesis implantadas. Aunque no tienen un riesgo vital para el paciente, reducen mucho su calidad de vida y son complicadas de tratar, aunque depende de cada caso”. En estos casos, se intenta “evitar retirar la prótesis colocada administrando antibióticos durante períodos prolongados de tiempo”, pero no siempre es posible y, en ocasiones, “hay que extraerla”.


Programas 'Rapid Recovery' y 'Eras'


 Los programas 'Rapid Recovery' o 'Eras' se fundamentan en una adecuada preparación de los pacientes antes de la cirugía. Por ello, es fundamental la intervención de los internistas en esta optimización previa a la cirugía, entre otras razones por “la importante carga de comorbilidad que tienen”, según ha indicado el Dr. Montero. Después de la cirugía “también es importante el seguimiento de aquellos pacientes que se considere especialmente necesario”, lo mismo que con los pacientes que se dan de alta de los servicios de Medicina Interna, ya que tres cuartas partes de los reingresos de los pacientes operados se produce por motivos médicos, no quirúrgicos.
 
Traumatología es uno de los servicios con los que se realiza más frecuentemente asistencia compartida con Medicina Interna, “obteniéndose muy buenos resultados”. En esta séptima edición de la reunión se ha dado protagonismo especial a los médicos residentes, con el fin de inculcarles, desde la residencia, la importancia creciente de la asistencia compartida y la interconsulta en beneficio de los pacientes.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.