El presidente de SEMG, Antonio Fernández-Pro, analiza el papel del primer nivel asistencial en la crisis del coronavirus

SEMG: "Ante epidemias, Primaria necesita criterios claros para derivar"
Fernández-Pro, en una imagen del último congreso nacional de SEMG.


21 abr. 2020 19:10H
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La Atención Primaria tiene el encargo de gestionar la desescalada de medidas frente a la epidemia del coronavirus. Sin embargo, este papel fundamental no debe hacer obviar que la presencia del primer nivel asistencial ha sido fundamental para aliviar la carga de los hospitales. Este trabajo en la sombra es el que valora Antonio Ferández-Pro, presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) a la hora de evaluar la gestión de esta crisis sanitaria.

En esta entrevista, que forma parte de una serie de conversaciones que Redacción Médica está reuniendo en el documento 'Lecciones del Covid-19 (qué ha aprendido el sector sanitario español ante la pandemia)', el médico de Familia apunta a la necesidad de realizar diagnósticos precoces y de disponer de unos criterios claros para la derivación a los siguientes peldaños de asistencia para garantizar una actuación eficaz de los servicios de Primaria ante posibles situaciones similares en el futuro.

Aciertos y errores cometidos durante esta crisis.

Es una evidencia que la crisis por Covid-19 ha puesto a prueba y al límite a los diferentes gobiernos del mundo en general y, de manera especial, a los sistemas sanitarios; y que no solo en nuestro país evidenciaron las debilidades y la falta de medios, que en muchos de los casos fue la traducción de la disminución sistemática que hemos venido sufriendo de recursos (tanto de personal, como de medios) con la falta de suficiencia presupuestaria. Esto ha sido un hecho independiente del color político de los gobiernos.

En todas las crisis importantes, sobre todo las comunitarias, existen varios factores que son determinantes para su manejo, independientemente de su gestión, como son la comunicación y la propia población.

Es fundamental, en una crisis de esta magnitud, que el ciudadano esté correctamente informado, y esto, a veces, no ha ocurrido en su justa medida. El Comité Técnico de crisis que se creó sí fue un acierto, y ponerlo en el centro de la crisis fue absolutamente importante, pero es verdad que la comunicación fue llevada en muchos casos de la mano de los políticos y no de comunicadores o técnicos.


"Todo fallamos en el cálculo de la dimensión de esta crisis"


No es lo mismo obedecer a la autoridad que estar convencido de que las medidas que se toman son acertadas o no. Existió (sobre todo en la primera fase de la pandemia) una sobresaturación de información y no una comunicación clara y directa en alguna de las cuestiones importantes.

Creo que el exceso de información fue tomado como gestión de la crisis, obviando realidades que todos hemos vivido, como la falta de materiales y sobresaturación del sistema sanitario. Teniendo todos claro que todos fallamos en el cálculo de la dimensión de esta crisis, en un principio.

La gestión de los grupos de riesgo, en lo que se refiere sobre todo a las residencias de ancianos, fue deficiente y con lagunas que habrá de analizar más adelante. A la vez que también obligado será el análisis de las diferentes medidas tomadas por otros países, que han hecho que sus cifras no sean tan dramáticas como las nuestras.

Por otra parte, habrá que elogiar la gran disciplina ciudadana y evidenciar por qué el número de profesionales sanitarios contagiados ha sido tan alto y por qué los materiales de protección fueron tan escasos en las primeras etapas.

Ante una crisis similar futura, qué medidas deberían adoptarse en cuanto a recursos humanos, recursos materiales, y gestión/organización.

La experiencia de esta crisis nos llevará a trabajar en varias direcciones. La primera, fundamental y más adecuada, debe ser el tomar estas medidas mucho más precozmente y ser mucho más ágiles en la toma de decisiones cuando se dé una alerta desde la OMS.

Segundo, el fortalecer los sistemas sanitarios para que funcionen como uno de los ejes vertebradores fundamentales de la sociedad. Esto se conseguirá si se dota de presupuestos suficientes y se acaba con la atávica deficiencia de medios materiales y recursos humanos.


"La Primaria ha jugado un papel cardinal en la atención a personas frágiles y discapacitadas"


Otras de las líneas deben ser hacer políticas encaminadas a ser autosuficientes para la fabricación de materiales básicos y de primera necesidad, y no tener absoluta dependencia del exterior.

Qué podría aportar la Medicina de Familia que no haya podido aportar en la crisis actual.

Son varias las líneas en las que la Atención Primaria debe trabajar y aportar todo lo que sabe y debe hacer. En una crisis comunitaria de salud pública como ésta, la contención de la misma está en la Atención Primaria. Esa contención se basa en el diagnóstico precoz y aislamiento de población susceptibles y hay que trabajarla en varias vertientes.

En primer lugar, en la detección precoz de nuevos casos, con posibilidad de aislamiento de la población susceptible. Para esto es imprescindible contar con la posibilidad de medios para realizar correctamente un diagnóstico precoz y seguimiento de los casos leves, a la par que tener claros los criterios de derivación de estas patologías al segundo escalón asistencial.

Si algo ha puesto en evidencia durante la crisis es que la Atención Primaria ha servido de contención evitando que haya sido todavía mayor el colapso de los hospitales.

Otro dato de suma importancia es la atención a las personas frágiles y discapacitadas, donde la Primaria ha jugado un papel cardinal.
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