Solo un tercio de los aspirantes a Medicina superaría una prueba de aptitud

La prueba de aptitud personal de Medicina para seleccionar mejor a los estudiantes con base en un perfil más acorde con valores humanísticos es "perfectamente factible". Así lo muestran los resultados de la primera prueba piloto realizada en España sobre la selección de alumnos de este Grado con otras competencias más allá de la EBAU. Sin embargo, los autores reconocen que en base a esta experiencia "se precisa mejorar el instrumento para hacerlo más confiable". De hecho, los datos constatan que solo un tercio de los aspirantes a Medicina superaría la prueba de apttiud.

El estudio 'La selección de estudiantes de Medicina con competencias en humanidades: resultados de una prueba piloto', publicado en ScienceDirect, se basa en la prueba piloto, inspirada en los procesos de selección que se realizan en otros países de Europa, con el fin de seleccionar un perfil de alumno más alineado a las competencias que deberá adquirir para ejercer la profesión y realizado en las facultades de Medicina de Cataluña. Esta prueba tiene el objeto de que se tengan en cuenta otras competencias diferentes al resultado de las pruebas de acceso (EBAU), que son las que actualmente determinan las características de los estudiantes que inician el Grado de Medicina.

El objetivo del trabajo era elaborar una prueba para la detección de habilidades no técnicas en los alumnos que acceden al grado. Por su parte, la metodología de la misma consistía en responder tres tipos de test, para medir la comunicación y relación con el entorno profesional (CREP), el juicio ético ante situaciones concretas (Juesc) y, por último, la capacidad de razonamiento crítico (CRAC).

En total se plantearon 134 preguntas de elección múltiple que previamente habían sido validadas por miembros de los equipos decanales. Contestaron la prueba 511 estudiantes de primer curso, el 49 por ciento del total, en septiembre de 2022.

Mejores estudiantes para estudiar Medicina

De todos ellos, 484 estudiantes, es decir, el 95 por ciento de alumnos respondieron correctamente a las tres partes de la prueba. Las medias de cada uno de los test, CREP, Juesc y Crac, fueron de 7,18, 4,68 y 5,43, respectivamente.

En el supuesto de que se estableciera el 5 como valor mínimo para aprobar, aprobarían los tres test con esta nota el 31,6 por ciento de los alumnos. El 51,7 por ciento suspende en una prueba; el 15,7 por ciento, dos pruebas; y el 1 por ciento, una.

Sin embargo, los valores de fiabilidad de las tres pruebas de una prueba total expresada como suma de las tres parciales son bajos y no alcanzan el estándar considerado aceptable para este tipo de pruebas, aunque para el caso de la prueba total queda "muy cerca de ellos". Los autores consideran que estos resultados son propios de una primera experiencia piloto y obligan a seguir investigando para mejorar las pruebas. La mejora está en revisar las preguntas que discriminan poco y realizar cambios en su estructura, así como eliminar formatos ambiguos y enunciados distractores.

Por último, los resultados del estudio "demuestran que el sistema de selección actual puede ser incompleto". Los autores aseguran que añadir este tipo de pruebas a las ya existentes permitiría que la presencia o no de estas aptitudes ejerza cierta influencia en el cómputo global y en la posición final para poder ser admitidos.